Vale, estoy nerviosa, ya estoy vestida, pintada, peinada, todo.
Miraba el reloj, la fiesta era a media noche y quedaban diez minutos y mi amiga aún no se había rizado el pelo.
-Clady, te avisé que lo hicieras todo a tiempo.- le dije algo molesta por la falta de tiempo.
Esta me miró por el espejo, me apollé en el marco de la puerta y me crucé de brazos.
-Ya, ya termino, me falta poco.- me dijo mientras que se echaba laca en el pelo.
Se puso una horquilla para ajustar un pelo que tenía suelto en la cabeza y se dio la vuelta.
-Venga vamos.- dijo recogiendo su bolso que estaba colgado en el tirador de la puerta.
Salimos de casa, bajamos las escaleras con cuidado y con un poco de prisa por los tacones y salimos del portal, en frente nos esperaba un coche de color negro, Clady se dirigió hacia el auto y yo fui tras ella.
Había avisado a su amiga que llegaríamos con la hora pegada al culo y que si nos podía recoger, y allí estaba, en frente del portal con los intermitentes encendidos para llamar la atención.
-Muchas gracias Milda.- dijo Clady montándose en la parte de atrás del coche.
-¡Ya era hora!- protestó su hermana gemela Mélica que estaba montada de copiloto.
Se giró para vernos y en especial me vio a mi, me ruboricé, pero con la poca luz que había en el coche no se notó.
-Dios, estás preciosa.- me dijo con la boca abierta.
-Gracias.- le contesté colocándome bien la falda del vestido.
Milda me vio por el espejo del retrovisor y sonrió.
-¡Déjanos algo para nosotras eh!- me dijo arrancando el coche.
Me ruboricé aún más y las tres se rieron, yo me uní a ellas.
La noche había comenzado muy bien.La fiesta era en casa de un amigo de Clady, vivía en un pueblo no muy lejos de donde vivimos nosotras y ya que no había autobuses para esas horas las hermanas nos hicieron un favor.
Por el camino estuvimos hablando de las posibles personas que pudieran haber en la fiesta, si iban a ligar o no o si incluso pudieran hacer algo más.
Una vez que llegamos frente a la casa, Milda aparcó cerca por si sucediera algo y salimos del coche.Parejas, amigos, desconocidos, habían empezado la fiesta con antelación, ya habían muchas personas que no daban pie con bola y otros que ya estaban tendidos en el suelo ¿durmiendo? ni idea, pero de esos habían pocos.
-Bienvenidas preciosas.- nos recibió un chico bien trajeado para la fiesta.
-Gracias Eneon.- dijo Milda saludándole dándole dos besos en las mejillas.
Así lo saludaron las tres que iban conmigo, yo al no conocerlo no sabía si saludarlo así o simplemente decirle hola e irme con mis amigas.
-Esta es Steny, mi mejor amiga.- me presentó Clady una vez que saludó a Eneon.
-Hola guapa, ¿eres nueva no?
¿Cómo que si era nueva? ¿qué me intentó decirme con eso? Me quedé bloqueada con la dichosa pregunta.
-Si, es nueva en esto de las fiestas.- contestó Clady por mi.
Vale, ahora lo entiendo todo.
-Si.- me reí tímidamente.
-No pasa nada, todo el mundo tiene su primera vez en todo ¿no?- me dijo agarrándome por la cintura.
¿Qué está pasando? ¡qué esta haciendo!
Clady, Milda y Mélica se miraron entre ellas y se rieron por lo bajo.
-Bueno, ¡nos vemos!- se despidió Clady y desapareció entre la gente.
¿Me ha dejado sola con un completo desconocido? ¡me ha dejado sola con un desconocido! ¿¡por qué!?
-¿Una copa?- me preguntó tendiéndome un vaso.
Lo cogí mientras que pensé mejor.
Vale, vamos a centrarnos, ¿vienes a divertirte no? Si, pues, no te asustes por nada y pásatelo lo mejor que puedas.
Tras pensar, le sonreí como nunca y este me devolvió la sonrisa.
Copa tras copa la música sonaba más alta o demasiado alta para mis oídos, estaba algo borracha, pero no mucho, conocí a aquel chico con el que me dejaron, me dijo que tenía veinte años, que trabajaba de grafitero y que vivía solo en un apartamento, me calló muy bien la verdad.
Bailamos juntos, reíamos juntos, pero llegó a un punto que intentó forzarme para que le diera un beso y yo le aparté como pude, era muy fuerte y cada vez su cara se acercaba más a la mía, un chico apareció cerca de nosotros y le tiró a la cabeza una botella de cristal vacía, Eneon cayó bruscamente al suelo.
Yo me quedé en el sitio donde estaba contemplando a Eneon en el suelo y miré a mi salvador.
No jodas, dime que esto no es verdad, joder...
Es el puto chico de esta puta mañana, el pizzero.
¿¡Qué hace en la fiesta!?
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Como una muñeca TRILOGÍA VENGANZA I [Terminada]
Mystère / ThrillerTRILOGÍA VENGANZA PRIMERA PARTE Había una cosa que odiaba de mí y es que, me dejaba utilizar como una muñeca... ¡Si, soy idiota, lo sé!, pero, pensaba que obedeciendo lo que me decían, encajaría en el grupo de "amigos" que consideraba que tenía. El...