Mi Imbécil. (Libro 1) [Finalizado]

Capítulo 36

Narra Ashley

Despierto por la alarma escandalosa que resonó en toda la habitación. Gruñí sin ánimos de nada y a regañadientes me levanté.

Nuevamente es lunes y tengo que alistarme para ir al instituto, pero para mí mala suerte, mi mente ya no estaba pensando con claridad, debido a que no pude dormir en toda la jodida noche. ¿Por qué? ¡Por los malditos dolores menstruales!

Juro que haré que Luke se arrepienta de haberme lanzado a ese jodido lago.

El rostro de Luke paso brevemente por mi cabeza y mis mejillas se calentaron al instante. No quería admitir lo que había pasado entre Luke y yo, pero tampoco quise fingir que nunca sucedió. Los dos estábamos coqueteándonos más frecuentemente y el, se comportaba de otra manera conmigo. Y eso me gustaba.

Solté una risita al recordar todo lo que hicimos aquella mañana y mordí mi labio al recordarlo. Podía revivir las imágenes y sentir todo lo que sentí en ese momento, fue tan excitante si recuerdo, que no pude evitar sentir como algo calientito bajaba entre medio de mis piernas.

Giré mis ojos molesta y posicione mis manos sobre la parte baja de mi estómago frotándolas suavemente transmitiendo calor en aquella zona, pensar en eso provocó que me doliera el útero.

Camine hasta mi armario y saqué todo lo necesario para comenzar a realizar mi rutina de higiene.

(...)

Una vez vestida, bajé las escaleras intentando no hacer muchos movimientos bruscos y quejándome suavemente por el dolor. El dolor intenso que yacía en mi parte baja no hacía más que aumentar, no quise maquillarme porque básicamente no estoy de ánimos para eso.

Me dirigí hasta la cocina y visualicé a mis hermanos hablando animadamente. Ellos al verme se alarmaron de inmediato.

–Ashley, ¿Te encuentras bien? Te ves horrible...–Preguntó Logan preocupado.

–Estoy perfectamente bien, Logan. –Murmuré irónica –Gracias por el cumplido –Gruñí molesta. Ellos sabían que estando en mis días, no soy la persona mas simpática, ni agradable del mundo.

–Lo siento, hermana –Se disculpó haciendo una mueca. Ignoré por completo su disculpa y mire a mi hermano menor que se mantuvo en silencio en todo momento.

–¿Me prepararías es desayuno?–Pregunte suplicante. Quería evitar moverme demasiado.

–Solo esta vez –Murmuró incorporándose de su lugar.

Observé como preparaba unas tostadas y servio una infusión de té de hierba. Dejo todo frente a mí y del mueble superior, saco un antiinflamatorio para luego estirarlo en mi dirección.

Paul, a diferencia de Logan, era mucho más atento, siempre hacía mucho más de lo que uno le pedía, es cuidadoso, compasivo. Desprendía empatía las veinticuatro horas del día.

Estoy segura que el, será un muy buen novio para la hermana de Luke. Como es conmigo es la clara evidencia de cómo será con ella cuando más lo necesite.

–Muchas gracias, enano –Agradecí con una media sonrisa y me dispuse a comer.

Mi cabeza lo único que pensaba, era en Luke, pero, andaba jodidamente bipolar. Pasaba de querer besarlo, a querer matarlo. Lenta y dolorosamente. Gran parte de mi dolor es por culpa de su grandiosa idea de lanzarme al lago. Espero que hoy, su suerte esté de su lado. Porque una vez que se me cruce, siento que lo voy a matar. Lo juro.

–¿En qué piensas?–Pregunto con suavidad. Estaba segura que no quería irritarme, así que le sonreí brevemente antes de responder.

–En las mil y un maneras de cómo asesinar a una persona –Solté haciendo reír a mis dos hermanos. Logan aplaudía con tanta felicidad que no pude evitar mirarlo extrañada.