Capítulo 25 parte 2

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N/A: Cuando vean ** ya saben que les dejo una canción en multimedia que pueden poner si gustan, disfruten el cap demasiado largo...

Brooklyn POV

El silencio a mi alrededor era ensordecedor, había venido aquí para ver si mis ansías disminuían, no podía cortarme en mi estómago, tenía a mis bebés ahí y nunca podría dañarlos y si me cortaba en cualquier otra parte de mi cuerpo lo vería Will y lo decepcionaría, tampoco quería eso así que aquí me tienen sentada entre la tumba de Sydney y de Frank.

Kim gateaba de una tumba a otra sin prisa alguna, se distraía con sus juguetes o con el pasto que había. Por momentos quisiera seguir siendo una bebé, sin problemas, que sólo me importara comer, dormir, hacer mis necesidades y jugar; eso sería increíble pero no, todos teníamos que crecer y con cada año que se me aumentaba tenía más problemas.

El cementerio estaba muy solo el día de hoy, aunque claro, a quién se le va a ocurrir venir un viernes por la tarde, yo pienso que a nadie, la mayoría de las personas estarán arreglándose para irse a divertir y digamos que un cementerio no es muy divertido a menos que vengas a cazar fantasmas o hacer programas paranormales, y sin duda alguna yo no hacía ni una ni otra cosa.

Sin embargo, estaba seriamente pensando en hacer un programa paranormal, yo no sé si mi mente estaba haciéndome una jugarreta pero estaba viendo cosas extrañas aquí y ni hablar de los ruidos que a veces se oían, como por ejemplo la risa de personas las cuales obviamente no están aquí sino ya las hubiera visto. Y tampoco ayudaba el que Kim se quedara viendo fijamente hacia un lado y se riera o hiciera pucheros.

Empecé a escarbar a un lado de la tumba de Frank, me había venido preparada para esto, hice un pequeño hueco y dejé mi cutter ahí, sabía que si lo dejaba en casa terminaría por cortarme y en serio lo quería evitar pero las ansías me estaban ganando la batalla y aún faltaba una semana para que Will estuviera de regreso así que aquí lo dejaría; incluso después de la muerte sé que Frank me cuidaría.

Lo enterré y recogí todas las cosas que había traído para arreglar las tumbas, estar aquí no había hecho realmente mucho por mí, sólo me sentía más sola, incluso más sola que el último pedazo de pastel que tenía en mi refrigerador, extrañaba a mi hermana y a mi mejor amigo. No sé por qué la dejaron a mi cargo si ellos más que nadie sabían que yo estaba rota.

¿Qué le esperaba a Kim conmigo? ¿Ella seguiría mis pasos? ¿Ella también se hartaría de mí? ¿Se avergonzaría de mis cicatrices? ¿También se alejaría?

No quería imaginar que esa dulce niña pudiera alejarse de mí pero era una posibilidad, tenía que estar preparada para cualquier cosa que pudiera pasar cuando ella creciera, pero si estaba en mis manos nunca le enseñaría mis cicatrices, no era algo de lo que estuviera orgullosa.

Mi celular sonó estrepitosamente provocando que se me cayeran las cosas que tenía en las manos.

-¿Jeff?- pregunto al contestar. Por favor, que no sea lo que estoy pensando.

-Brooklyn, sé que prácticamente te acabas de ir de aquí pero te necesito.

-¿Otro asesinato?

-No, llegaron más pruebas, específicamente un testigo, y necesito de tus habilidades para sacar información, ya entró Granger y no pudo sacarle nada.

-¿Y esperas que yo le saque algo? Granger es la persona más ruda que conozco, la primera vez que lo vi casi me orino en mis pantalones.

-¿En serio?- podía detectar la diversión en el tono de voz de Jeff, creo que no debí de haber dicho eso.

-Que eso no salga de esta llamada, pero sí. Dime, ¿cómo una persona que ya estuvo con el detective más rudo de Michigan va a decirle algo a una embarazada?

Hold OnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora