Acepto la video-llamada de Aiden y enciendo la luz para que pueda verme. Pero no quiero que note que he llorado, por lo que dejo caer la bata de baño y me coloco crema corporal bajo su atenta mirada, para luego vestirme con ropa interior y un vestido con cierre al frente.
-Lo haces a propósito- lo oigo hablar entre dientes y sonrío viéndolo con los ojos cerrados- ¿Cómo está todo por allí?
-De...- aclaro mi garganta al darme cuenta de mi ronca voz- Deberías estar durmiendo- suspiro- Todo sigue igual que cuando te fuiste- lucho contra mi voz que quiere quebrarse- ¿Quieres verlas?
-Muero por besarte, por tocarte, por oírlas llorar y cargarlas... el concierto de hoy fue... rayos esos fans me hicieron emocionarme, casi lloro en el escenario y no fui el único... esas chicas quería violar a mi bajista- río divertida ante su comentario, acomodo las almohadas en la cama para acostar entre ellas a mis dos pequeñas- Quisiera que pudieran estar aquí conmigo, verme y... nena ¿Por qué lloras?
-Solo sigo sensible- suspiro limpiándome mis lágrimas- Estás muy cursi y esto de cuarenta días sin orgasmos tampoco es fácil- cambio de tema y creo que funciona porque él suelta una carcajada- Mañana vas a Cambridge- él asiente- mañana es su primer control- me levanto de un salto para salir de la vista de la cámara para dejarme caer abrazando mis piernas y llorando en silencio porque no quiero que me oiga.
Él me llama durante varios minutos y no es hasta que dice que puede verme en el reflejo del espejo que levanto mi vista notando que así es. Me adentro en el baño para lavarme la cara y limpiar mi nariz antes de volver frente a la cámara.
-Dime que ocurre nena ¿Desde cuándo me ocultas las cosas? ¿Desde cuándo empecé a perderte?
-No te oculto nada, es solo que hace unos días conocí a Ginger, ella está mejorando pero Ryan se está cayendo a pedazos- me excuso- la sensibilidad pos-embarazo, la idea de tenerte lejos, ver como mi hermano se está derrumbando y la ausencia de la danza me están alterando un poco, pero trato de tranquilizarme, Richard dice que si no tengo cuidado podría darme una depresión, pero lo único que me tiene mal es no saber que hacer con Ryan, él está delgado, ojeroso, débil y Ginger está mejorando... empiezo a creer que se está rindiendo y no puede dejar que ella luche sola, si ella no aguanta ¿Qué será de él?
>>Se que se siente que tu estado de ánimo dependa de otra persona. Esa puede ser la conexión más bonita y jodida al mismo tiempo que puede existir... solo quiero que él esté bien.
-¿Prometes que no hay nada más?
-Eso y el hecho de que mi novio está del otro lado del mundo y mi cuerpo ya está empezando a reclamar por el suyo- él sonríe, no percatándose de mi omisión de información.
No quiero preocuparlo, en cuanto vuelva se lo diré, se que tiene derecho a saberlo pero no es el momento.
Continuamos hablando por bastante tiempo hasta que decide que es hora de que descanse, aunque en realidad Julián lo obligó a despedirse para que él descanse. Dejé la computadora a un lado y opto por un capuchino, no creo que sea hora de dormir.
A las ocho de la mañana llega Efraín quien me saluda y se queda junto a la puerta.
-¿Cómo va la búsqueda?- pregunto.
-Ya averiguamos el nombre de la chica, Soraya Oxford, averiguamos que si tuvo una hija, ella... ella falleció Señorita- escupo mi desayuno y toso, asustado se acerca a palmear mi espalda- Sabemos en qué cementerio está, tenemos su certificado de defunción, a la niña la están buscando.
-¡Rayos! Debiste empezar por allí, creí que falleció la niña me quejé- él bajó la mirada- lo siento... ¿De qué falleció? ¿En los papeles no figura algún padre?
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El Baile de mi Perdicion
RomansUna noche... Un baile... Un enmascarado... Muchos misterios... Un amor... Una nueva historia...