Capítulo 12

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Llevo un día de mierda. Cuando me he levantado Xiumin no estaba, me vestí rápidamente al ver la hora y al desayunar me derramé el café caliente en mi camisa haciendo que me quemase el pecho. Me volví a cambiar rápidamente y por poco llego tarde el primer día de trabajo. Y para variar un cliente no deja de molestarme.

- Chen, la mesa 5 te llama. - Me dice mi compañero Luhan haciendo que mire la mesa con fastidio. " No otra vez.." suspiro y pongo una sonrisa falsa.

- Señor, ¿me ha llamado? - digo suavemente al llegar a la mesa indicada.

- Si - sonríe - es que se me han caído los palillos junto al tenedor. ¿Podría recogerlos y cambiarlos?

- Claro señor, ahora lo hago. - Me agacho, cojo lo que se le ha caído y me levanto para cambiarlos pero antes de marcharme siento como una mano me roza el trasero. Me giro y veo que está con el móvil así que decido dejarlo pasar mientras voy a la cocina. Una vez he cogido los cubiertos limpios vuelvo a ir a la mesa y los coloco encima de la mesa. - Aquí tiene, disfrute de su comida. - Empiezo a retirarme cuando el cliente me coge de la mano haciendo que me gire a verlo. - ¿Desea algo más?

- Si, a ti en mi cama. - Me estira hacia él sin darme tiempo a reaccionar hasta que tiene la otra mano encima de mi culo.

- Quite su mano de mi trasero, señor. - Digo educadamente empezando a cabrearme.

- No lo haré hasta que aceptes una noche de sexo conmigo, nene. - Con la mano libre me quito la suya de mi culo a la vez que sacudo mi brazo haciendo que me suelte el agarre de mi mano.

- Preferiría mil veces estar muerto a dejarme tocar por un viejo verde, señor. - Digo suavemente.

- ¡Qué acabas de decir! - Se levanta de la silla gritando, me alza la mano y yo, por acto reflejo, cierro los ojos encogiendome esperando el impacto de su mano en mi cara, la cual nunca siento así que abro un ojo y veo a un hombre agarrandole la mano evitando que me golpee.

- No ha escuchado al señorito decirle que no quiere ser tocado por usted, señor. - La cara del cliente se tuerce en una mueca del dolor y es en ese momento que veo la mano del señor siendo apretada fuertemente.

- Suho, suéltalo. - Escucho una voz a mi espalda.

- Bueno vale. - Lo suelta mientras lo fulmina con la mirada. - No quiero que vuelva a molestar al señorito ¿entendido? - El señor asiente y se gira a mi, mejor dicho a la persona que hay detrás de mí quien se pone a mi lado.

- No veréis ni un duro de mi parte. - Dice el cliente.

- No se preocupe, señor. No queremos dinero contaminado. - El hombre que está a mi lado señala a la puerta. - Me haría el favor de irse y no volver. - Lo miro de reojo y veo que sonríe. "Su sonrisa da miedo" pienso. Después de eso el cliente se va de la cafetería.

- Vamos Sehun, quita esa sonrisa. Das miedo. - El señor que habla finge estar asustado causando que yo sonría ante su actuación.

- Si si, lo que tu digas Suho. Vuelvo al trabajo, si me necesitas ya sabes donde estoy. - Se gira a mi y me acaricia el pelo. - Ten cuidado la próxima vez. - Dice y se va a su despacho.

- ¿Estás bien? - Me pregunta el desconocido aunque mirándolo de cerca me resulta familiar, pero ¿de dónde?

- ¿Eh? Ah, sí. - Hago una reverencia. - Gracias por su ayuda, señor.

- No me trates de usted. - Me levanto mirándole a los ojos. - Soy Kim Junmyeon, pero llámame Suho. - Me extiende la mano.

- K-Kim JongDae - Le aprieto la mano formando un saludo.

- Bueno, voy con Sehun. - Me sonríe y luego me revuelve el pelo. - Encantado de conocerte pequeño, espero volver a verte. - Dicho esto se va hacia el despacho de mi jefe y desaparece de mi vista al entrar.

- ¡Chen, vuelve al trabajo! - Me grita Luhan haciendo que vuelva a atender las mesas hasta que llega la hora de mi descanso y voy al cuarto de atrás donde los empleados descansa. Pero en el camino me caigo haciéndome daño en el tobillo, me levanto y camino mientras cojeo hacia una silla. Cojo mi móvil notando que mi prometido me ha mandado un mensaje "oh, ya ha contestado a mi mensaje" pienso mientras me ilusiono, pero esa ilusión desaparece cuando leo que me ha puesto que no vendrá a dormir. El enfado que tengo desde la mañana aumenta así que marco a KyungSoo.

- Venid Baek y tú a la cafetería, ahora. - Digo molesto para luego colgar y esperar a que mis mejores amigos vengan.

LiarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora