Capítulo 40 (Yixing)

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No tengo perdón, tardé como un año en actualizar y aún no acabo con el fic. Si todo va bien, quedan entre uno y dos capítulos. Sé que no tengo muchos espectadores pero no quería dejar a los que sí me leen con un final, se lo merecen así que voy a acabarlo cueste lo que cueste.


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- ¿Qué haces levantado, Xing? - Me pregunta en un susurro Layla, quien me ha rodeado el cuello con sus delgados brazos.

- No podía dormir, simplemente eso. Anda, vuelve a la cama. - Le digo mientras me desprendo de su agarre. Quiero estar solo y ella no se merece mis malos tratos.

- Son las tres de la mañana y en unas horas debes volver a trabajar. - Me susurra al oído mientras acaricia mis brazos con suavidad.

- Layla, quiero estar solo. - Interrumpo mientras me levanto bruscamente y dirijo mi mirada hacia ella.

- Sigues pensando en él ¿cierto? - Aparto la mirada sin saber como responderle, ya que ella está en lo cierto. No puedo dormir porque mis pensamientos no dejan de dar vueltas sobre el mismo asunto, mi relación inexistente con Minseok. - Lo sabía, no puedes olvidarlo y concentrarte en mí ¿cierto? - Guardo silencio y eso provoca que ella estalle del enfado. - Han pasado dos meses, Yixing, dos putos meses Súperalo ya de una maldita vez.

- No te metas en donde no te llaman, Layla. Te dije la primera vez que anduvimos juntos que mi corazón le pertenecía a otra persona.

- Una persona que se besó con su ex después de dejarte, vaya persona. - No puedo responder a eso porque es cierto. Los vi, Minseok y JongDae se estaban besando cuando fui tras Min para arreglar las cosas. De verdad que he sido muy ingenuo al pensar que Minseok me estaba diciendo la verdad. - Xing...ya es hora de que lo dejes ir. Venga, ven. Te haré olvidar por un rato tus preocupaciones. - Susurra mientras me agarra de las mejillas dirigiendo sus labios hacia los míos para besarlos, pero yo no se lo permito y me aparto.

- Ahora no, por favor. - Comento mientras le doy un beso en la frente. - Vuelve a la cama, yo iré a hacer algo de trabajo atrasado. - No dejo que me conteste y me giro para caminar hasta mi despacho, donde me encierro sin esperar una contestación de mi amiga con derecho a roce. Me quedo ensimismado en el papeleo del trabajo. Odio admitirlo pero desde que Minseok entró en vacaciones...el rendimiento de todos ha menguado y el papeleo se ha atrasado tanto...esto se debe a que era él quien se encargaba de todo este trabajo, bueno de la mayoría.

No me había dado cuenta de la hora que se había hecho hasta que el teléfono que está en mi despacho empieza a sonar. Esa llamada matutina me está mala espina, ya que esta línea solo se usa cuando era una emergencia del trabajo así que no tardé en reaccionar y contestar inmediatamente.

- ¿Diga? - Pregunto una vez descuelgo el teléfono reconociendo inmediatamente al dueño de la voz que me habla a través del teléfono.

- Jefe, soy James. - Dice el hombre al identificarse. - Llamo para decirle que el hospital central nos ha llamado y nos ha avisado de que uno de nuestros agentes se encuentra allí por herida de bala. - Solo con escuchar eso me empiezo a preocupar pero no fue hasta que escucho el nombre de la persona que está ingresada que se me cae el mundo. - Según los datos, el teniente Kim Minseok se vió envuelto en un tiroteo y recibió dos disparos. No sé mucho más pero creo que no está en muy buen estado. - La línia se queda en silencio durante unos segundos hasta que James vuelve a abrir la boca. - Pensé que querría saberlo.

- Sí, muchas gracias. - Poco después cuelgo y me quedo paralizado. De un momento a otro, todo se ha venido abajo. Sinceramente, no sé qué hacer. La persona que más amo en esta vida se encuentra en un hospital acompañado de otro. Pero, en cuanto mis pensamientos se ordenan y vuelven a su sitio, me levanto con rapidez, me visto correctamente y cojo mis cosas para irme de la casa, ignorando los gritos de Layla. La única cosa que hay en mi mente es Minseok y el deseo de que esté bien. No puedo quedarme de brazos cruzados. Necesito estar con él, estar a su lado.

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