Capitulo 37

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Buenas a todos denuevo, aquí en este nuevo capitulo

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Buenas a todos denuevo, aquí en este nuevo capitulo. Se nos acaba el verano,empezamos septiembre y, con ello, una nueva etapa escolar o detrabajo (dependiendo de cada cual y lo que haga). Pero como no quierocomeros mucho la cabeza nada más al principio, me retirodiscretamente y os dejo con la historia. Nos leeremos después.


CAPITULO 37


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Aún cogidos de la mano, con los platos y copas olvidadas sobre lamesa de la azotea, bajaron por las escaleras en busca de un lugar másprivado, un lugar donde pudieran hacer desaparecer sus ropas sintemor a que alguien viera el espectáculo.


Lo malo de vivir en grupo bajo el mismo techo.


Tony iba en cabeza, sintiendo el calor que parecía haberse disparadopor el cuerpo de Steve a través de su mano, sabiendo que si no sedaban la suficiente prisa, no llegarían a ninguna habitación.Aquello se desataría antes de que ellos mismos pudieran serconscientes.


Afortunadamente, consiguieron llegar.


Tony pasó primero, pero Steve se encargó de asegurarse de que lapuerta estuviera bien cerrada.


Después de todo, ya habían vividos otros momentos donde se habíanvisto interrumpidos por una dichosa puerta abierta.


El multimillonario no pudo evitar con cierto nerviosismo y emocióncuando vio la mirada que Steve le dedicó tras cerrar la puerta,volviéndose hacía él, haciendo que hasta la mismísima atmósferade la habitación cambiara, como si alguien hubiera encendido unaestufa de repente allí dentro, elevando la temperatura. Eraimpresionante ver el cambio que sufría Rogers. Era como si emergierauna personalidad completamente diferente. O, al menos, una que nadiehabía visto aún.


-Ahora vas a hacer que me ponga nervioso yo- comentó Tony, dejandoescapar unas carcajadas nerviosas mientras veía como Steve caminabalentamente hacía él.


Aunque más que caminar, era como si lo estuviera cazando, como undepredador escapado de un documental.


-¿Por qué te ibas a poner nervioso?- susurró el capitán,deteniéndose ante él, alzando una de sus manos hasta que tuvo unade sus mejillas descansando contra su palma.


Aquel simple contacto hizo que Tony se estremeciera antes de quepudiera controlarse a sí mismo.

Después de una guerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora