11

9.2K 630 74
                                    

No podía dejar de pensar en la extraña respuesta de Damian, eso me tenia realmente desconcertada e intrigada.

-Tengo hambre - dijo Damian e interrumpió la plática que Daniel y Diego tenían acerca de las personas.

-Ven, vamos a ver que hay en la cocina- dijo Daniel y se puso de pie.

-¿No quieren?- pregunto Damian antes de salir.

-No, gracias hermano- dijo Diego, voltee a ver a Damian y negué con la cabeza.

"oh no" pensé cuando me di cuenta que me había quedado sola con Diego. Solo había un par de velas al rededor del pequeño lugar para alumbrar un poco, sentía que me estaba viendo pero no quería voltear a ver para asegurarme. "¿Qué voy a hacer? me puedo levantar e irme como si nada o quedarme aquí totalmente incomoda..."

-Oye- escuche que hablo Diego. No sabia que hacer, odiaba que esto me pasara.

-¿Que?- respondí tratando de sonar indiferente.

-Estas bien?- "¿Qué demonios le pasa por la cabeza a este? "

-Si, muy bien...- me levanté del sillón y caminé hacía el pasillo. Cualquier otro lugar era mejor que este.

Antes de salir, me tomó del brazo, fue un poco rápido y me dolió. Me quejé y justo en ese momento Daniel salió de la cocina.

-¿Qué pasa?- se acercó y Diego me soltó. -¿Estas bien?- pregunto cuando vio ese movimiento.

-Si, iba con ustedes - intenté disimular con una sonrisa.

-De acuerdo, ven - Me tomo del punto donde estaba mi piel lastimada, no pude aguantar y volví a soltar un quejido de dolor. -¿Qué te paso?- Me soltó y comenzó a levantar la manga de mi sudadera, me quedé congelada sin saber que hacer, era incomodo. Los tres vimos el moretón, estaba ligeramente de color morado con verde y dolía mucho... "Mierda, así no estaba"
Diego regreso a la sala en silencio.

-¿El te hizo esto?- preguntó preocupado. -¿Cuándo? ¿Es de esta tarde?- recordar me molesto. Yo no conocía a ese chico, en absoluto y parecía odiarme, como si lleváramos mucho tiempo de conocernos.

-Si, pero no importa- Jalé mi brazo, ignoré el dolor y salí de la casa rápido.

No se veía nada, me daba miedo pero no pensaba regresar. E

Estaba a un par de casas y salieron algunos zombies, uno se abalanzo contra mi y caí sobre mis brazos lastimados. Me dolió tanto que grite, mal hecho por que todos se empezaron a acercar...

-Daniel- intente gritar pero no pude ya que tuve que evitar que acercara su boca a mi mano.
-¡DANIEL!- volví a gritar, escuche que se abrió una puerta -Daniel - volví a gritar, lo ultimo que vi antes de perder la conciencia fue que se estaban acercando mas...

¿El fin? CorrigiendoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora