70. 'Lemon Especial'

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La familia se encontraba en el puerto de Nueva York, despedian a la pareja que se encontraba sobre el bote.

-¡Adios! ¡Los extrañaremos!- Exclama Rafael saludandolos.

-¡Tambien te extrañaremos Rafi!- Exclama Micky.

-¡A ti no te decia enano!- Leo ríe. -Niñas, cuiden bien de Ryan.

-¡Si mamá!- Exclaman al unísono.

El barco comienza a avanzar, la familia sigue despidiéndose mientras avanzan hasta el final del muelle.

-¡Adios!- Exclaman Himari y Ryan.

El barco se aleja de la costa, sale de Nueva York y mas tarde de Estados Unidos.

-Escucha, este viaje sera de un día, tal vez dos, pero ahora podemos tener tiempo sólo para nosotros.- Dijo Leonardo acabando su frase con un tono seductor mientras lo tomaba de la cintura para acercarlo a el.

-¿A dónde iremos?- Pregunta con una sonrisa mirando las aguas oscurecidas reflejar la luz de la luna y las estrellas.

-Por ahora es un secreto.. Pero sabras que lugar será cuando lleguemos al puerto.

-Okey...- Ríe tiernamente. -Que ansias.

Pasaron varias horas, el bote seguía rodeado por agua, se escuchaban las lentas olas desde dentro del bote.

-Mn.. Leo.. El bote me marea..- Dice somnoliento Rafael mientras descanzaba a un lado de su pareja.

-Tranquilo, falta poco para llegar.. Debemos de estar casi por África.

-¿Cuanto falta entonces?

-Un día.. Supongo..- Rafael resopla y se sienta en el colchón.

-Es mucho..- Frota sus ojos y lo mira. -¿No podemos hacer algo como para pasar el tiempo?- Leonardo, que tenia los ojos cerrados, sonríe con picardía.

-¿Quieres jugar Rafi?

-Eso y más..- Susurra colocándose sobre su pareja.

Leonardo abre los ojos y observa a su pareja, éste se encontraba con un abundante sonrojo en su cara. Ambos se encontraban sin bandana, por lo que podían observarse sin necesidad de quitarse mutuamente la cinta.
El líder le besa tiernamente los labios de su ahora esposo, sus labios se separaban y volvían a juntarse mientras resonaba un leve sonido húmedo. Tras casi un minuto, ambos se separan con un hilillo de saliva entre sus labios, el lider se acerca a Rafael y lame sus carnosos labios para despues lamerse los suyos.

-Ahora no Rafi.. Cuando lleguemos y logremos ubicarnos.. ¿Si?- Algo desanimado, el temperamental asiente y vuelve a colocarse a un lado de su esposo. -Perdón si tú realmente querías.. Eso..- Se sienta y lo mira. -Pero no creo que estando en un bote con los hombres escuchandonos, sea un buen momento como para tener intimidad.

Lo mira con una tierna sonrisa. -Lo se.. Lo entiendo.. Sólo necesitaba un poco de tus caricias.

Leonardo lo mira atentamente y se coloca sobre él. -Si asi quieres..

El ninja de ojos zafiro dirige sus labios al cuello del temperamental, donde comienza a besar y a rasgar con sus dientes, causando leves suspiros en su pareja.

[...]

A la mañana, la pareja desayuno y esperaron la proxima llegada a su destino de viaje.

Estando cerca del puerto, Rafael observaba atento sus alrededores notando donde estaban.

-Japón...- Leo sonríe.

Ambos observaron las costas japonesas, mientras en parques cercanos muchos árboles Sakura adoraban con belleza el antiguo hogar de su padre, quien le habia sugerido al líder tener su luna de miel allí.

Al ya haberse detenido el bote, la pareja desciende con un maletín cada uno. -Splinter nos consiguió un lugar donde podemos quedarnos, queda cerca de un parque con un arrollo muy bonito, rodeado de Sakuras.- Rafael le mira y sonríe con entusiasmo. -Adivino.. Quieres ir a verlo rápido ¿verdad?

-Shi~- Leonardo ríe.

-Te amo..- Le besa tiernamente.

-Yo también Leito.

Ambos comienzan a caminar por la costa sin personas. Al llegar a la ciudad, suben a las azoteas para no ser vistos. Ya estaban sumamente agotados, llegaban a las afueras, cuando lograron ver un parque enorme, desde su punto de vista.

Se asentaron en una cavaña cercana al arrollo. Al atardecer, la pareja salió para realizar un picnic.

Tras acabar, ambos se recostaron a un lado del arrollo, observando las estrellas que comenzaban a aparecer y las luciérnagas que ascendían, junto al cantar de los grillos y el tranquilizante sonido del agua corriente.

-Leo...- El nombrado lo mira. -Me haz hecho muy feliz.. Has estado alli cuando mas te necesitaba.. Te lo agradezco mucho..

Le toma de la mano. -No me lo agradezcas.. Yo siempre te he amado, nunca pense en estar a tu lado...- Sonríe. -Y mirame ahora.. De luna de miel contigo, con 3 hermosos hijos.

-¿Nunca te lo imaginaste?

Niega aún con su sonrisa. -Nunca.. Rafael, me haz hecho la tortuga mas felíz tras aquel 'Yo tambien te amo.'- Se coloca sobre el. -Y sólo nos queda disfrutarnos, sentirnos y amarnos al máximo en esta noche para nosotros dos..- Su pareja le sonríe con sus mejillas adornadas en un tono carmesí.

-Hazlo, temerario líder..

Leonardo comienza a besar los carnosos labios de su hermano, baja su boca hacia su cuello donde comienza a descender, dejando un rastro de saliva. Al llegar a su entrepierna, comienza a masajear mientras vuelve a ascender para seguir besando aquellos deliciosos labios. Al cabo de un rato, el miembro erecto del menor se hace presente, ocupando las manos del mayor, que al tener aquel poder en mano comienza a manosearlo a su gusto.
Al poco tiempo, su miembro sale a la luz, al mismo tiempo en que Rafael se corría.

Leo se coloca entre las piernas del menor y apoya su miembro duro en la entrada de su pareja. -Te amo ¿sabes?- Rafa asiente. -No sere muy gentil esta vez..- Se acerca a su oido. -Quiero que ambos disfrutemos al máximo del otro..- Comienza a empujar su pelvis, mientras su gran miembro erecto, ingresaba en la vagina de Rafael.

Al entrar ya por completo, Leo comenzo con las embestidas, que no eran como Rafa se las esperaba, sino de un ritmo término medio, aunque eran constantes. Con el paso de los segundos, los gemidos y suspiros comenzaron a aunmentar al compás de las embestidas que rápidamente fueron salvajes y muy duras. Tras un buen rato, Rafael se corre, apretando su interior causándole mayor placer al portador de las katanas, haciendo que éste se viera obligado a salir de su interior para correrse en el vientre de su pareja..

Ambos acabaron rendidos uno a lado del otro, jadeando por la intensa actividad, Leo lo carga de forma nupcial y se lo lleva a la cabaña para allí pasar su primer noche de Luna de Miel..

Continuará...

Hay Que Darle Placer Al PlacerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora