Hay Que Darle Placer Al Placer

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Era un lugar oscuro, había un largo camino, que guiaba a un trono, donde un hombre con una armadura metálica se encontraba sentado..

Por la gran puerta ingresó una chica de cabello negro y rubio, con ojos color ámbar y un maquillaje peculiar al igual que una armadura de metal..

Al llegar frente al hombre, le hace una reverencia y dice.. -Padre.. Todo va de acuerdo al plan.

-¿Ya se han revolcado aquellas alimañas?

-Así es, el kraang esta seguro de que pronto tendrán un bebé

El hombre comienza a reírse -Perfecto, Hamato Yoshi jamás aceptó aquel tipo de relaciones, y ahora que sus hijos ya han tenido sexo y tendrán seguramente un bebé...

La chica sonríe.. -Todo gracias a Rocío..- Dijo al notar la presencia de la chica detrás de ella

-No se si esta bien que hagamos esto, maestro.. Dejen que sean felices.

El hombre, disgustado por haber oído lo que dijo, se puso de pie y camino hasta ella. La tomo del cuello y la elevó..

-Em.. Padre, ¿que hace?

-Dime donde están..

-Las alcantarillas.. En la estación abandonada..- Dijo perdiendo el aire..

El hombre sonríe bajo su casco, y saca las garras metálicas. -Arigatou- Agradeció antes de mover su mano libre..

Frente a la kunoichi, cayó la cabeza de la adolescente, esta se toco el cuello ante la impresión que le daba haber presenciando eso..

El hombre mira a su hija y suelta el cuerpo sin vida -¿Y que es lo que debes hacer tu, Karai?

-Acabar con ellos..

Continuará...