Narra Hélade
Mi mirada estaba fija en la de Ángel. No entendía por qué tendrían que matar a mi padre cuando llevaba desaparecido cinco malditos años. Mi madre no quería que lo buscáramos pero yo no pensaba igual, lo busqué durante un año y medio y nada.
Quería una explicación que mi madre no podía darme y para eso lo necesitaba a él.Enterarme así como así de que es el objetivo de mi novio me hace pensar que se fue por algo realmente malo. Sino, ¿por qué un mafioso querría matarlo?
Está la parte de ser Federal...pero no por eso se mata a alguien que lleva lejos tanto tiempo, ¿no?-Hélade, ¿estás bien?-Acarició mi mejilla y pestañeé varias veces, volviendo al mundo real.
-¿Por qué a él? ¿Qué hizo? ¿Por eso se fue? ¿Por eso dejó a su familia? ¿Por qué ha vuelto?-Las preguntas comenzaban a llegar a mi mente e instantáneamente salían por mi boca mientras las lágrimas salían descontroladas, reaccionando por fin.
-Cálmate, no sé las respuestas, pero prometo que intentaré averiguarlas, ¿vale?-Asentí. A la vez que mi mente le daba vueltas al tema de mi padre no podía evitar pensar que estaba dejando pasar algo por alto, pero no podía recordar qué. Digo, ¿cómo pensar en otra cosa cuando el hombre que te abandonó vuelve?
-Quiero verle, Ángel. Necesito hablar con él.-Dije mientras escondía mi rostro en su pecho. Me acarició la espalda.
-Está bien pero para ello tendrás que verme trabajar.-Lo miré asustada.
-¿Lo vas a matar? ¡¿Delante de mí?!-Me separé y él empezó a negar rápidamente con la cabeza.
-No, claro que no. Pero sí tendré que matar a sus hombres, guardias o a quien lo acompañe. Tiene que parecer que estoy trabajando, Hel. Sino Baggio no me dejará volver a verte.-Asentí más calmada y dejé que volviera a abrazarme.
-¿Ya podemos volver?-Ambos nos giramos hacia los chicos, quienes estaban aglutinados en la puerta de la cocina. Sonreí y asentí hacia Cristian estando completamente segura de que no violaría a Ángel sobre la encimera.
-¿Por qué lloras, Hel?-Alex frunció el ceño mientras se acercaba a mi. Me separé de nuevo de Ángel y negué con la cabeza.
-Nada importante.-Sin pensar miré a Cristian. Él me dijo que mi hermano sabia algo sobre mi padre. ¿Y si Isma había descubierto qué había pasado con él? ¿Y si sabía qué había hecho y dónde había ido? Pero... él no me ocultaría algo así, ¿no?
Te ocultó lo de Ángel. Te ocultó que era bisexual. Te ocultó que estuvo saliendo con Cristian y el porqué de odiar a Ángel. ¿De verdad preguntas eso?
-Mierda.-Todos me miraron. ¿Lo había dicho en voz alta? Genial.
-¿Qué pasa por tu cabecita loca?-Xavier se puso a mi lado y golpeó ligeramente mi frente. Lo miré raro. ¿Desde cuando él me tenía tanta confianza? Creo recordar que la única conversación que hemos tenido ha sido la de Doraemon y su gorrocóptero. Al menos la más larga. Y no recuerdo que fuera más civilizado que un cavernícola.
-Quiero pizza con mi chico.-Dije rápidamente y todos volvieron a mirarme, pero mal.
-¿Y si la tomas con tus chicos?- Julio apareció con cuatro cajas de pizza familiares. ¿Cuándo se había ido?
-Mmm... está bien.-Sonreí y me senté junto a Ángel.
-Mañana iremos a buscarlo.-Me susurró. Asentí sintiendo los nervios recorrer mi cuerpo. Mañana volvería a ver a mi padre, si Lucifer conseguía encontrarlo, claro. Digo, yo estuve año y medio buscando para darme contra una pared tras otra.
Isma lo consiguió.
Porque es un suertudo idiota
Y tú una celosa. Tu hermano es más listo que tú.
Y tú más imbécil.
¿Te repito que somos una?
Agggh. Púdrete.
-¿Hel? ¿Dónde estás?-La mano de Ángel se movió de arriba a abajo frente a mí. Sonreí avergonzada al ver que todos volvían a mirarme divertidos.
-En un puerto...italiano...
-Al pie de las montañas...Vive nuestro amigo Marco...En una humilde morada...-Cantaron todos a coro. Sonreí y comenzamos a comer las pizzas como si dependiéramos de ello para sobrevivir.
-¿Marcos vive en Italia?-Preguntó Damián, quién no había empezado a comer ni había cantado la canción. Lo miramos cómo si fuera un bicho raro y reímos a carcajadas mientras él sonreía desconcertado.
Esa noche...
-Tengo que irme ya, nena.-Se apartó de mi, separando nuestros labios.
Estábamos en mi habitación, tumbados en la cama mientras hablábamos de todo un poco. Él se había quitado la ropa hasta quedarse con los bóxer y yo me había puesto una de sus camisetas, vamos que tenía un camisón muy masculino y sexy. Jejé.
-No quiero que te vayas.-Rogué mientras gateaba hasta el borde de la cama, donde estaba sentado poniéndose los pantalones.
-Debo hacerlo. ¿O no quieres que vuelva a verte otro día?
-No quiero que te vayas ahora.-Lo besé y tumbé en la cama mientras me sentaba a horcajadas sobre él.
-Hélade...-Rogó una vez que mis labios bajaron por su pecho.-Si empiezas no podré parar y llegaré tarde...
-¿Es qué nunca has llegado tarde a clase? Es excitante.-Volví a besarlo sabiendo que no se iría. Quizás llegar tarde a clase no fuera excitante pero esta situación si lo era.
En un giro rápido se puso sobre mi y volvió a quitarse los pantalones para después besarme el cuello. Lo siguiente en desaparecer fue su camiseta de mi cuerpo, dejándome completamente expuesta ante él pero obviamente era lo que menos me importaba en este momento.
Abracé su espalda mientras lo rodeaba con mis piernas para acercarlo más a mi y poder notar como realmente era fácil de excitar.
La ropa interior desapareció en cuestión de segundos entre besos y mordidas, gemidos y gruñidos.
Sus labios se encontraron con los míos y se apoderaron de mi labio inferior haciéndome gemir levemente, lo que hizo que él sonriera antes de penetrar mi intimidad.
Notarlo de nuevo dentro de mí tras una semana sin verlo fue como subir al cielo y bailar con Michael Jackson, grandioso.Nos quedamos dormidos en cuestión de minutos, de lo que me arrepentí demasiado al despertar una hora después y encontrarme con su lado de la cama vacío. Lo que sí me encontré fue una nota con su letra:
Lucharé por tu padre como lucho por ti.
Te quiero, Hel.
No lo olvides nunca.Y, ¿cómo olvidar esto si era la primera vez que me había dicho esas dos palabras? ¿Cómo olvidar que me lo había dicho (o escrito) antes que yo a él?
Mi corazón estaba como loco y una sonrisa de idiota apareció en mi rostro. Me quería, Ángel me quería.***
Heeey! ¿Cómo estaiiis? Espero que bien 🙈
Bueno, decir que es la segunda parte de tres y que espero que la tercera tenga más "chicha" jajajaLa canción que cantan es la de una serie de dibujos de hace años en la que un niño se va de su país para buscar a su madre. ¡Y el niño tiene un mono! 😍😍
Si mis lectores fantasma se animan a votar o comentar lo agradeceré, y sino pues disfrutad igual 😂
Hasta el próximo cap!Xoxo😘💕💕
![](https://img.wattpad.com/cover/80505893-288-k918857.jpg)
ESTÁS LEYENDO
~Ángel~
Romansa-Eres el diablo con un nombre irónico.-Me burlé mientras él mordía mi cuello haciéndome suspirar. Noté su sonrisa y sonreí. -Tú me diste permiso para introducirte en mi infierno, no te arrepientas.-Dijo segundos antes de besar con avidez mis labios...