Las Aventuras Del Bebé Dean.

43. Una mala noticia para Roman.

Después de la mala decisión de Seth, los pequeños Usos se encargaban de sanar las heridas del pequeñito samoano.

- ¿Chicos, pasa algo? – dijo Roman

- No primo, por qué lo preguntas – dijo Jey.

- Tienen cara de enojados. ¿Dónde está Dean?

- Ese traidor... - dijo Jimmy.

- ¿Jimmy por qué le dices eso a mi amigo?

- No lo entiendes Roman, ese loco es un traidor, él nunca te quiso, solo jugó con tu amistad, él no te quiere, no le importas y nunca le importaste. – gritó Jimmy al pequeño samoano – Ahora lo importante es curar estas heridas para que mi tía no te rete, después no te dejará jugar con nosotros.

- ¿Por qué eres tan cruel Jimmy? ¡Déjame! ¡No quiero que me toques, primo malo! Yo puedo sanarme solito y no quiero que vuelvas a hablar así de mi mejor amigo.

Reigns intentaba levantarse del lugar para retirarse.

- Primo, cuidado, te vas a lastimar más – dijo Jey.

- Roman, espera. Disculpa por gritarte, pero Dean dijo que tu caída fue un accidente. No le contó la verdad a Seth... Seth es su mejor amigo, no tú. – dijo Jimmy muy triste.

- No puede ser verdad. Tengo que hablar con Dean. – dijo Reigns.

- ¡No! Te prohibiremos hablar con él – dijo Jey.

- ¡No!! No pueden hacer eso, necesito una explicación.

- No queremos que regreses a ese lugar y te lastimen, por favor, haznos caso, nosotros somos familia, somos los únicos que de verdad te queremos – dijo Jay.

- En serio Romancito, si de verdad le importaras a Dean, no crees que estaría aquí, cuidando de ti.

- ¡Es que no lo puedo creer chicos! Me siento muy mal.

- Nosotros también – dijeron los gemelos.

El trio de samoanos se abrazó y lloraron en silencio. Sintieron que jugaron con ellos.

Luego se retiraron hacia casa. Roman entro a su cuarto y se sentó reflexionando sobre todo lo que sus primos dijeron que Dean había hecho. Él se sintió más lastimado emocionalmente que físicamente. Dean fue importante para él, lo valoró y apreciaba su amistad, lamentablemente él creyó que Dean no hizo lo mismo con él.