Dedicado a vaioletkiwii
— Chicos —llamé la atención de los hombres ahí presentes y por suerte funcionó— Iré a la casa de los señores Denovan ¿Vienen?
— No —contestó de inmediato Kian— Pero gracias por la invitación —siguió con su desayuno y miré a Jayden.
— ¿Y tú? —él dejó de comer y suspiró.
— Tengo que ir a ver una propuesta de trabajo, y aunque no tardaré mucho prefiero quedarme lejos de mujeres perfeccionistas y nerviosas. Tuve suficiente con nuestra boda —dijo divertido y lo miré muy mal.
— Entonces me iré sólo con los niños —me encogí de hombros y Kian me miró nervioso.
— ¿Y si dejas a ambos conmigo? Ya sabes, para que se diviertan —trató de ser convincente y lo miré suspicaz y Jayden sonrió burlón.
— Sí, deberías dejar a los niños con Kian —apoyó Jayden pero no estaba convencida— Además deben estar muy ocupados y estresados en ésa casa. No es la primera vez que Caleb se queda con Kian —me recordó y me rendí.
— Muy bien, vendré lo más pronto —le advertí y él asintió emocionado.
Después de eso le pedí a Jayden que me llevara hasta la casa de los padres de Kendall y al llegar también estaba llegando Riley por lo que le dije a Jayden que me iría con ella ya que no se veían señales de Logan.
— Nos vemos en casa de Kian —me dijo y asentí, le dí un beso en los labios y bajé del coche rápidamente para poder alcanzar a Riley, aún cuando su condición no le permitiera caminar rápido.
Riley tenía ocho meses y algunos días de embarazo estaba realmente feliz con ello y yo sólo me había emocionado por la noticia.
— Hey Riley —la llamé cuando tocó el timbre y ella me sonrió.
— Sky —se lanzó a mis brazos y ambas reímos al tiempo que la puerta se abría y aparecía Alanna.
— ¿Pasarán o se quedarán afuera riendo como maniacas? —preguntó burlona y entramos a la casa saludando a Alanna— Pasen chicas, Emma esta en la cocina.
— Vale —contestó Riley y comenzamos a caminar.
— ¡Mamá! —indudablemente era la voz de Aaron ya que en la cara de Alanna se formó una mueca y comenzó a caminar hacia la sala dejándonos solas.
Seguimos caminando hacia la cocina y de pronto salió la persona que menos creía ver... Kellyanne.
Miré a Kellyanne con nerviosismo dentro de mi.
¿Qué le diría si me preguntara por Adrien? ¿Me odiaría por dejarlo con Kian? ¿Cuál sería su reacción?
— Kelly, que cambiada estás —habló Riley y quise salir corriendo en ese momento de distracción.
— Igual tu Riley ¿Cuánto tiempo tienes de embarazo? —preguntó Kellyanne con curiosidad y sonreí por la felicidad de Riley al hablar de eso.
— Ocho meses y una semana —respondió mi hermana con una sonrisa.
—¿Y ya sabes que será? —preguntó nuevamente Kellyanne.
— Niña, será una hermosa niña, pero Logan no sabe —eso yo ya lo sabía, Riley había llegado con un pastel a casa para darnos la gran noticia a Caleb y a mi.
— ¿Y Adrien, Skyler? —me preguntó Kellyanne y me puse nerviosa, no sabía cómo contestar así que le dije lo primero que se me ocurrió.
— Amm, se quedó con Jayden y Caleb —respondí rogando que no se diera cuenta de que le estaba mintiendo— Kian debería de conocerlo algún día —quería quitarme un peso de encima, en verdad me remordía la conciencia.
— Lo sé, sé que no debo de ocultarle nada pero no tengo la menor idea de como reaccionaría Kian —me contestó con sinceridad y su respuesta me agradó.
— Sólo espero que él lo conozca —aunque ahora mismo este con él — Dale la oportunidad de conocer a su hijo —me dirigí a la cocina huyendo de ella antes de que le confesara absolutamente toda la verdad.
Al entrar a la cocina ví a Emmy quien también estaba entrando pero ella al parecer venía de la parte trasera de la casa.
— ¡Sky! —corrió hacia mi y la abracé— ¿Qué tal le fue a Jayden con la resaca? —me preguntó divertida y reí al recordarlo.
— No aguantaba ni que le hablara —contesté y ambas reímos hasta que escuchamos un golpe, al parecer venía del piso de arriba.
— Forma de levantarse nivel familia Denovan —murmuró Bradley quien pasaba por nuestro lado y no entendía por qué hasta que escuché algo más.
— ¡Eres una maldita hija de mi mamá! —en definitiva los ruidos eran en el piso de arriba y esa voz era de Kendall. Se escuchaban ruidos en la sala pero no les hicimos caso hasta que Kendall gritó de nuevo— ¡Y lo lograste maldita! —Emma y yo caminamos hasta la salida de la cocina y la escena en la sala era algo cómica: Kendall en pijama acorralando a Kellyanne quien estaba del lado contrario de un sillón— ¿Y si tengo problemas cardíacos? ¡Hubiera muerto el día de mi boda!
— Oh vamos... eres difícil de matar maldita suertuda —le respondió su hermana después de un ataque de risa.
Riley se unió a nosotras para ver la pequeña disputa entre mellizas.
— Pero como podías saber eso estúpida —le reclamó Kendall intentando llegar hasta ella pero su hermana también era inteligente.
— Estúpida es una mala palabra —mencionó el hijo de Bradley y Kendall lo miró.
— ¡Ése es mi hijo! —festejó Bradley pero Keller le pegó en la nuca.
— Lo siento amor, pero esa tonta se lo merece —Kellyanne aprovechó la distracción de Kendall y escapó pero no tardó en volver a ser perseguida.
La puerta se abrió y Kellyanne se detuvo pero Kendall no por lo que tres cuerpos colisionaron y calle ron bruscamente al suelo.
Eso hasta a mi me dolió.
Se escucharon las quejas de Kellyanne y Jake quienes estaban hasta abajo y Kendall se levantó, seguida de Kellyanne y su hermano.
Eso ya no llamaba mi atención por lo que volví a la cocina junto a Emma y Riley.
Además Kellyanne tenía que atender a las visitas que llegaban con Jake.
— ¿Necesitas ayuda con algo? —le pregunté a Kendall cuando entró a la cocina y ella se sentó frente a mi soltando un suspiro.
— No, sólo estoy nerviosa —confesó y le sonreí para intentar tranquilizarla— ¿Y si algo sale mal? —¡ay no! ¡Nada se crisis pre-boda. Por favor!— ¿Y si el vestido ya no me queda? ¿Si me caigo mientras camino al altar? ¿Si me quedo dormida en la misa? —Emma soltó una carcajada y miró a Riley burlonamente ganándose que la fulminará con la mirada.
Aquí vamos de nuevo.
ESTÁS LEYENDO
El Playboy De Mi Vida
Romance- Jamás creí lamentarme de mi niñez, más sin embargo, ahora lo hago -dije mirando al suelo. - Yo no lamento nada -él se acercó a mi y tomó mis manos entre las suyas- No me arrepiento de nada porque eres lo más importante para mí. Levanté mi cara y d...