16.- Promesas incumplibles.

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Narrado por Corey.

No la he visto en todo el día y me empiezo a preocupar. Al llegar a la escuela Patrick, Mark y Austin me preguntan que ¿qué pasó? pero lamentablemente no tengo respuesta y me siento sin ánimos, ojalá y haya venido.

Al final del día seguimos sin noticias y Austin que está igual de preocupado que yo decidimos ir a buscarla a su clase siguiente mientras que Patrick y Mark van por otro lado. Cuando llegamos al laboratorio de química ella todavía no llega pero alcanzo a distinguirla de lejos y me siento tan aliviado de ver que está bien pero Austin se adelanta y va con ella antes que yo pueda siquiera decir que la vi.

Narrado por Julieth.

Después de toparnos con Patrick y Mark nos damos cuenta de la hora y tenemos que irnos pues tenemos práctica de química y ellos tienen clase en uno de los salones que están por ahí así que nos acompañan y al acercarnos más logró ver cómo Austin se acerca y Corey está parado enfrente del laboratorio.

Austin me toma de los brazos y me pega a la pared, me levanta las mangas para revisar pero no encuentra nada nuevo, las mismas cicatrices de antes.

Yo.- ¿Se puede saber qué haces?
Austin.- Pues te dije que me preocupas, quería ver si habías hecho algo.
Yo.- Corey te dijo algo ¿cierto?
Austin.- No, solo tenía miedo de que hubieras hecho algo.

Él sigue insistiendo pero sé que me miente, él me escondía cosas todo el tiempo, así que sigo preguntándole si Corey le dijo algo hasta que lo admite.

Austin.- Okey, si, me dijo de lo que hablaron ayer, que tenias esa idea de acabar con todo y anoche también, por eso las llamadas.
Yo.- Pues, ya viste, estoy bien y no hice nada, dile a Corey que no se preocupe, que estoy bien—trato rodear a Austin he irme pero pone su brazo delante de mí y me lo impide.
Austin.- Te dije que me importabas, no quiero que te pase nada, no sabes cómo me carcomió el no saber si habías despertado.
Yo.- Pues ya te dije que estoy bien, aquí estoy parada frente a ti, además de que tú ya no tienes nada de qué preocuparte, me tengo que ir—justo cuando suelto esa oración las lágrimas empiezan a acudir a mis ojos.
Austin.- Sabes que te sigo queriendo y no me vas a dejar de importar.

Por fin quita su brazo y me deja ir, entro al laboratorio y me topo con que Ane estaba apunto de salir a buscarme, me siento en un banco en nuestra mesa y Terra y Yuni se me quedan viendo, no necesito verme en un espejo para saber que tengo los ojos rojos.

Después de la práctica salgo y en el camión me siento con Rachel, atrás de nosotras va Austin pues Patrick, Mark y Corey se fueran a comer a otro lado después de la escuela así que solo vamos nosotros 3. Rachel y yo venimos jugando y diciendo cosas que a nosotras nos hacían gracia tal y como lo hacíamos en la secundaria, procuro tratar de reprimir las ganas de llorar que tengo, pero ella le marca a un amigo que teníamos en la secundaria (que por cierto es su ex) y aprovecho para mandarle un mensaje a Corey.

Yo.- Perdón por el susto de anoche, enserio lo siento mucho.
Corey.- Me preocupaste mucho, debes de tener el coraje para vivir, sabes ya te tengo mucha confianza y enserio no quiero que te pase nada.

Cuando estoy a punto de responder Rachel cuelga y ve el mensaje por accidente, justo lo que me temía, veo la preocupación en su cara y empieza a cuestionarme.

Rachel.- Julieth, ¿que significa ese mensaje? déjame ver.

Trato evitar que tome mi celular pero lo lee y no me queda más que explicarle todo y cuando termino de contar me mira a los ojos reflejando mucha tristeza e igual que antes preocupación.

Rachel.- Julieth ¿cómo pudiste?, otra vez, ¿por qué lo hiciste?—revisa mis muñecas.
Yo.- Tú sabes todos los problemas que he tenido, ya no soporto más todo esto.
Rachel.- Pero tú sabes que yo estoy para apoyarte en todo, eres mi baby, promete que no te volverás a cortar, prométeme que no te irás y que te quedaras conmigo.
Yo.- Prometo que no me cortare más pero respecto a lo otro... Prometo que no me iré todavía.
Rachel.- Quiero que me lo prometas, ¡hazlo!
Yo.- Está bien—suspiro—lo prometo.

Rachel me envuelve en un gran abrazo y cambiamos de tema.
Seguimos hablando hasta mi parada primero se baja ella y después yo, ya que ella vive a unas cuadras de mi casa, entro a mi cuarto y empiezo la conversación con Corey  hasta la noche y a él también termino prometiéndole que no lo haré aunque en realidad no me lo puedo prometer ni a mí misma.

Amistades eternas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora