---Hiroki---
Empecé a guardar todas mis cosas puesto que las llevaría a la casa que me dejaron mis abuelos, no lo he ocupado puesto que no me gusta obtener las cosas fáciles, prefiero ganármelo con mis esfuerzos, pero ahora creo me vendrá muy bien, así no seguiré pagando un departamento.
Aparte las cosas que me iba a llevar a Londres, he leído mucho de la Universidad a la cual iré a trabajar, su programa de estudio me enamoro por completo, es tan grandioso, me alegra trabajar en ese lugar.
Han pasado dos días, mañana por fin es viernes, ya he llevado todas mis cosas a la casa y tengo mis maletas listas, le he dejado a la encargada de los departamentos la llave y una carta dirigida a Akihiko, sé que me buscará y mejor dejarle una carta despidiéndome.
Aunque en estos días me he comunicado con Akihiko mediante mensajes y llamadas cortas puesto que las horas son diferentes, aquí es de día y allá de noche, por eso no hablamos mucho porque a mí me encanta dormir.
No le he contado nada acerca de que me iré, no quisiera que él tratará de detenerme, aunque es muy estúpido pensar eso, ya que solo soy su mejor amigo.
Salí a dar una vuelta por los alrededores para despejar mi mente, mejor dicho, para despedirme de este gran país, lo extrañaré, aunque no del todo.
Digamos que yo solo me enfoque en mis estudios y no disfrute la vida como se debía, excepto mi niñez con Akihiko, fue divertido mientras
duro.
Y sobre esta persona del presente, quien solo fue un remplazo del amor platónico de Akihiko, es tan deplorable, no puedo seguir así, no quiero ser solo la descarga sexual de un hombre que no me ama, que solo me ve como un remplazo como un objeto.
"No quiero esto"
"Estoy harto de todo..."
Sé que yo empecé esto y seré el que lo termine, tal vez ahora él me haya mentido y se fue con Takahiro a otro lugar para disfrutar de su amor.
Pues felicidades, les deseo que sean felices...
-¿Hiroki?
Levante la mirada y me encontré con el hermano de mi amigo.
-Haruhiko, -me sorprendí- que sorpresa.
-Eso mismo digo yo. –se acomodó sus lentes- Hace días que no nos vemos.
-Sí, he estado ocupado.
-Me imagino, alguien tan inteligente y lindo como tú ha de tener muchas personas cautivadas.
-No es para tato. –reí.
-Es cierto, -sonrió- me gustaría invitarte a comer, ¿aceptas?
-Claro. –suspire.
-Entonces, -coloco su brazo- vamos.
Suspire profundamente y coloque mi mano en su brazo. Me llevo hasta un restaurante elegante y le pedí que ordenará por mí ya que no sabía mucho de esos platillos.
-¿Y cómo van las cosas con mi hermano?
-¿Por qué me lo preguntas? –me sorprendí.
-Por la actitud que tuvo ese día, se veía molesto y más conmigo.
-No lo creo.
-Es verdad, -sonrió mientras daba otro sorbo a su copa- pensé que salías con él.
-No, -reí- somos mejores amigos.
-Vaya, entonces eso es más conveniente.
-¿Eh? –me sonroje.
-Hiroki te lo diré sin rodeas, -tomo mi mano- me gustas.
Me quede paralizado por sus palabras y por la mirada seria que me dedicaba, nunca imagine que me dijera esas palabras, mejor dicho, no recuerdo que alguien se me declarara, y si lo hicieron tal vez lo rechace porque mi amor a Akihiko es tan inmenso.
-No sé qué decirte. –lo mire.
-Déjame enamorarte, -beso mi mano- salgamos juntos todos los días, se mi pareja y...
-Lo siento Haruhiko, yo no puedo.
-¿Alguien se interpone?
-Haruhiko yo me iré del país.
-¿Qué? –se sorprendió.
-Lo siento, -quite mi mano- me ofrecieron un trabajo que no podía negar.
-Quédate conmigo.
-No puedo corresponder a tus sentimientos.
-No me rendiré.
-¿Eh?
-Te esperare.
-Haruhiko por favor no...
-Lo siento Hiroki no voy a cambiar de parecer.
-Eres tan obstinado.
-Solo por ti. –sonrió.
Terminamos de comer y me llevo hasta mi casa.
-Espero que encuentres la felicidad.
-Solo sí es contigo.
-No sé cuándo regresaré, así que busca tu felicidad por favor.
-No te aseguro nada, -suspiro- cuídate.
Entre a mi casa y me recosté en la cama.
"Mañana empieza mi nueva vida... Mañana todo cambiará..."
Me quede dormido esperando por un nuevo día, ya que mi avión saldrá a medio día. Mi alarma sonó a las 8 de la mañana, tome mi muda de ropa y me bañe. Me coloque unos jeans y una camisa blanca.
Prepare un rápido desayuno y comí tranquilamente dejando que las horas pasaran. Al terminar tome mi maleta y mi mochila.
Tome mi celular y lo apague, lo guarde en un cajón, tal vez él me llame pero es mejor terminar toda relación que me até a él.
Salí de la casa y la mire por unos momentos.
-No sé cuándo regresaré, pero estoy seguro que todo cambiará a mi regreso.
Tome un taxi hasta el aeropuerto donde me encontré con el director, su hijo y Miyagi que no paraba de abrazarme. El director se tuvo que disculpar ya que se fue antes de que mi avión llegará, tenía un compromiso.
Así que me quede con el niño y el profesor.
-Hiroki-kun te extrañare tanto.
-Deje de fastidiarme. –masculle.
-Es que yo te quiero tanto.
Pude ver a ese chico cruzar sus brazos y mirar a otro lado.
-Eres lo que más me importa. –dijo el profesor.
Aquel chico chasqueo la lengua y se fue a la cafetería.
-Ah, -suspiro el profesor- creo que lo encele.
-¿Qué quiere de ese niño?
-Me gusta pero es imposible lo nuestro, ya le he dicho que le doblo la edad y que es el hijo de mi jefe.
-¿Y por qué lo quiere encelar?
-Porque ayer ese chico fue al cine con otro tipo y los encontré riéndose y ese tipo lo abrazaba.
-Pero usted lo rechazo ¿no? Debería dejarlo en paz.
-Lo amo, pero...
-Solo se está complicando las cosas, -suspire- no siempre lo van a esperar, debería arriesgarse.
-Seguramente soy algo pasajero.
-No subestimes mis sentimientos. –comento el chico.
-Shinobu-chin... -murmuro el profesor.
-Pero tal vez si lo pienso así me olvide de todo.
-Eso...
Empezaron a anunciar mi vuelo y me despedí de ellos.
-Espero arreglen sus diferencias.
-Suerte en su viaje. –comento Shinobu.
-Cuídate my sweet honey.
-Algún día lo golpearé.
-Eso espero. –rio.
Camine por los pasillos hasta llegar al indicado, entregue mi boleto y mi maleta- me dirigí al avión y me subí.
Debí hacer esto hace tiempo, iniciar de nuevo, alejarme de lo que me lastima, aunque alejarme también me hace daño...
Lo amo, jamás podré olvidar a Akihiko ya que ha sido mi primer amor, mi todo, mi vida entera, aunque yo no sea la suya...
Supongo que así es la vida...
A veces se gana y otras se pierde.
Y esta vez, me toco perder a mí...
Solo espero que Akihiko puede ser feliz...
---Akihiko---
Desde que he llegado aquí no dejo de pensar en Hiroki, en su dulce voz, sus lindos ojos, su bella sonrisa, el aroma de su pelo, su sinceridad, sus sonrojos, sus gemidos cuando lo hago mío...
Todo de él lo extraño tanto, deseo poder tenerlo de nuevo en mis brazos y decirle cuanto lo amo, ser felices los dos sin que nadie nos interrumpa.
Falta una semana más y terminaré toda está tortura...
Maldito Isaka que hace lo que quiere, ya le he dicho miles de veces que no me interesa nada de firmas de libro o conferencias, es lo que más me molesta.
Lo malo es que mi Hiroki no está a mi lado.
-Sensei, deje de fantasear y siga con las firmas.
-Bruja.
-Ya lo oí.
-No trataba de ocultarlo.
-Ah, -suspiro- algún día renunciare.
-Sí claro.
-No pensé que fueras tan testarudo.
-Ijuuin, -sonreí- Cuanto tiempo sin verte.
-Lo mismo digo. –rio- Desde que nos vimos en Alemania ya no hemos coincidido.
-No es como si fuéramos los grandes amigos, te recuerdo que nos conocemos por mi hermano.
-Sí es verdad, -suspiro- lamento haberlo interrumpido, nos vemos después.
-Así será, -se detuvo- por cierto...
-¿Sí?
-Nada...
Siguió su camino hasta salir del lugar.
-No sabía que se hablaba tan bien con el mangaka. –comento Aikawa.
-Solo un poco.
Mire mi celular, no tenía algún mensaje de Hiroki, así que le mandé otro y le deje un mensaje de voz.
-Espero estés bien, te extraño tanto en verdad, sé que soy egoísta y un alzado pero esto es realmente lo que siento... Te amo Hiroki...
---Miyagi---
17 años de diferencia son muchísimos...
Me enamore de un chico de 18, tan lindo y tierno, aunque también es muy directo con sus sentimientos, me confeso que me amaba pero lo rechace.
Él es joven y su padre es mi jefe.
¿Qué más puede pasar?
Aún hay más...
Es un chico tan popular que tiene pretendientes tanto hombres como mujeres.
No sé qué fue lo que me enamoro de él, pero quisiera estar a su lado, aunque esos tabús de la edad y el sexo están muy presentes.
Cuando rechace a Shinobu ese día en la noche lo vi salir con un mocoso más grande que él, su compañero de clase, los he visto trabajar juntos, me molesto que rieran y estuvieran tan cerca.
Por eso decidí darle celos, quiero besarlo y abrazarlo pero no sé.
Cuando Hiroki abordo el avión vi a mi terrorista caminar a la salida.
-Shinobu-chin, -comente cuando lo alcancé- sí quieres puedo llevarte a tu casa.
-No es necesario. –dijo sin verme.
-Insisto yo...
-Lo siento sensei pero, -suspiro- ya llegaron por mí.
-¿Quién?
-Un amigo.
-Shinobu...
-Ah, -me miro- y sobre mi confesión del otro día, solo era una apuesta, una pasada, ya sabe lo que hacen los chicos.
-¿Qué?
-No me gustan los hombres y si me llegarán a gustar, no me fijaría en alguien tan viejo como usted.
Me quede pasmado ante sus crueles palabras, lo vi subirse a una moto con el mismo chico de la vez pasada.
¿Qué está pasando?
---Hiroki---
He llegado a Londres y busco a la persona que me indico el director, vi a un peliazul y un rubio sosteniendo un cartel con mi nombre.
Me acerque a ellos y ese peliazul sonrió.
-Bienvenido Hiroki.
-¿Quiénes son ustedes?
-Mi nombre es Kusama Nowaki y soy el doctor de la universidad. –comento el peliazul.
-Y yo soy Tsumori profesor de administración. -dijo el rubio.
-Un placer. –hice una reverencia.
-Bienvenido. –comentaron los dos- Te llevaremos con el director de la Universidad, Shinoda.
-Muchas gracias.
Ambos sonrieron ampliamente.
"Este es el inicio de un nuevo futuro..."
Pase lo que pase te seguiré amando Akihiko...
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Lucha Contra el Destino (Akihiko x Hiroki)
FanficA veces el tiempo es el peor enemigo del hombre, ¿Por qué siempre nos damos cuenta de lo que teníamos hasta que lo perdemos? Akihiko y Hiroki se vuelven "amigos del sexo" cuando el peliplata se entera del compromiso de la persona a la cual ama, o es...