Segunda Parte
- ¿Qué sucedió ahí dentro?
Patrick llevaba varios minutos a mi lado intentando sacarme información, pero solo podía pensar en lo tonta que había sido allí dentro. No contaríamos todos los detalles, prometimos mantener en secreto muchos de los hechos que habían ocurrido, cómo el dueño de la voz, era algo que no podíamos revelar, no aún. Lo importante ahora era saber que haría con los cuerpos, no sabía precisamente que hacer con ellos, pero había que intentar algo.
- Partiré con Amy -dije mientras me levantaba del suelo y me arrodillaba nuevamente al lado del cuerpo de Amy.
- ¿Por qué no con Caden? -fue Olivia la que hablo.
- Nada en especial.
Nadie crítico mi decisión por lo que me dispuse a partir. Necesitaba espacio, mucho espacio, por un tema de confianza, no quería sentir presión más de la que ya existía. Hice un gesto con mis manos para que todos retrocedieran varios metros para sentirme segura.
Llevé mis manos al suelo donde crecía una fina capa de pasto, el cual para mi sorpresa era mas duro de lo que esperaba. Nunca lo había intentado antes, pero dentro de las cosas que Melanie narraba sobre la Prueba de Fuego, decía haber absorbido energía de cuerpos a su alrededor.
Mis manos se internaron en la tierra húmeda, permitiéndome un mejor alcance. Cerré los ojos y apreté mis manos formando puños con la tierra. Al principio no sentí nada, pero con el paso de los segundo un hormigueo poco agradable comenzó a tomar forma en mis dedos y posteriormente en mis brazos. Un leve corriente recorrió todo mi cuerpo, era una sensación gratificante, me hizo sentir liviana y fresca, algo diferente, pero sentía la fuerza nacer en mi.
Ya pasado varios minutos decidí sacar las manos y posarlas sobre el estómago de Amy. No quise abrir los ojos para mantener aún la energía en mis manos.
- Bajo la sombra caminas, temiendo a lo inevitable. Estuviste entre los nuestros, pero caíste lejos -comencé a recitar según lo que me acordaba-. Nada podría salvarte excepto luz de este poder. Contra las fuerzas lucharemos, sobre la tierra te pondremos.
Mis manos comenzaban a doler en donde mantenía contacto con Amy. Ya no era un dolor propio de Deshabitado, era un dolor diferente. Su pecho se infló solo una vez, provocando que alguien soltará una exclamación, a quien no vi, ya que debía mantener mis ojos en Amy.
Mi cabeza comenzó a doler más de lo habitual, el mareo era más fuerte que nunca y amenazaba con dejarme inconsciente un buen rato. Mis extremidades comenzaron a temblar de agotamiento, la respiración me fallaba a ratos. Era más difícil de lo que esperaba. Tenía que esforzarme en mantenerme consiente y en salvar a Amy, solo tenía una oportunidad.
- Solo necesito callar este mal y poderte levantar de la densa niebla que te ahoga para que vuelvas a respirar.
Fue demasiado rápido. Mi cuerpo cayó de espaldas contra el suelo en el momento en que ella llenaba exageradamente sus pulmones con aire con una gran bocanada. Llevó sus manos a su pecho y comenzó a toser intentando no ahogarse. Ahora venía la tercera fase: Sobrevivir.
Su brazo se giró en el mismo ángulo que vi la primera vez en que nos encontramos, el día del choque. Su cabello blanco se transformó en un rubio demasiado brillante, lo que fue acompañado de un breve crecimiento de este. En su frente, antes pulcra, apareció un tajo que emanaba suficiente sangre. Su ropa comenzaba a rasgarse y tomaba una apariencia sucia, algo de tierra y sangre la enmarcaba.
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Deshabitados
Ficțiune adolescențiTodo cambió, sin derecho a reclamar. Para Alexa ya nada a sido lo mismo después de cuatro años del accidente, incluso no le importó tener que vivir con lo que le tocó. Pero las cosas siguieron, y seguirán, cambiando y ahora muchos dependerán de ell...