Enemistad a flor de piel

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—Te has ganado a tu primer enemigo, sabelotodo—dijo Zelo mientras se ponía la capucha de su sudadera.

—Ja. No temo ni pierdo nada al tener un enemigo ignorante como tú—lo adelanté y este me jaló desde la manga de mi sudadera.

—NanHee, te lo estoy advirtiendo—me dijo abriendo los ojos con notable ira—No es bueno tenerme como enemigo. Si no me crees, preguntáselo a cualquiera quién haya estado bajo mi enemistad—dijo y me soltó con brusquedad, haciendo que me estrellara con los casilleros que estaban cercanos a la pared.

No dije nada y seguí su pista hacia la oficina del director, en donde fuera nos esperaba una señora de cabello rojizo y de cuerpo muy delgado. Nos dio la pasada hacia nuestro destino y nos dio la orden de que nos sentáramos en las sillas que estaban en frente del escritorio de madera en donde estaba sentado el director, con una cara de enojo que quizá era típica de él.

—Señorita Park, puede retirarse—indicó el director y esta salió de inmediato.

Fijó su mirada en nosotros y frunció el ceño, supuse de inmediato que esto no le gustaba en absoluto.

—El profesor me contó la situación. Y créanme, estoy inmensamente indignado porque dos alumnos de este establecimiento pueden llegar a desprestigiar nuestro instituto. Ambos alumnos van a estar condicionales en este lugar, o sea, con otro encontrón entre ellos, se irán de este establecimiento, ¿entienden?

—Sí señor—dijimos ambos al unisono.

—Ahora vuelvan a clase. Pero recuerden, el estar condicional no es un juego, eh—sonrió con ironía y nosotros salimos  directamente al salón para poder empezar las clases.

*

—¿Es verdad de que Zelo te declaró la guerra?—me dijo Lynn, mientras mascaba el pan y tomaba un poco de café.

—Sí, pero eso no logra asustarme—dije y le sonreí.

—NanHee, Zelo no es una persona que olvida todo fácilmente. A mi me persiguió dos años para poder realizar su venganza y fue en el baile de graduación en donde me tiró un balde con agua y me dejó en vergüenza frente a todos—se encogió de hombros y miró al chico que se acercaba a nuestra mesa, sonriente—¡Youngjae!—gritó, mientras movía su mano como bienvenida.

—Lynnatica—le dijo con entusiasmo y la abrazó—Hasta que te encontré. Te busqué por muchas clases y mira tu, quedar en la misma clase de  la niña que entró con una de las mejores calificaciones—me miró y sonrió.

—Hola—le dije moviendo mi mano con timidez.

Se acercó a mi lado y me besó la mejilla. El chico era muy lindo, bastante diría yo. Tenía una piel blanca y el cabello de color negro, sus labios parecían un corazón y su dentadura era casi perfecta. Sus ojos los cubría un par de lentes redondos, los cuales le entregaban un toque intelectual. Bastante interesante.

—Así que eres la nueva presa de Zelo—me dijo frunciendo sus labios—debes tener cuidado.

—Lo tendré, gracias.

—Tienes mala suerte, justo la próxima semana comenzamos a vivir en el campus. Reza porque no te toque con alguien cómo ese idiota.

¡¿VIVIR EN EL CAMPUS DEL INSTITUTO?!

no tenía idea de que eso se hacia. Había leído el reglamento del colegio muchas veces, pero nunca me fije en eso del campus. He estado muy desatenta con las cosas últimamente.

—No importa, sobreviviré—sonreí.

—Recemos porque así pase—dijo Lynn y terminó de comer su pan.

*

Jun Hong:

Esa chica realmente me cansó. Nunca me habían tocado la cara y ni menos con agresión cómo lo hizo. Declarar la guerra en tan poco tiempo y perder la cabeza solamente en un día era un nuevo récord.

—Hey, Jun Hong. La cachetada que te dio la nueva, te dejó una marca—dijo uno de mis amigos.

—Daehyun, esa chica no me causa ninguna gracia. Realmente me molesta que haya llegado y se haya tropezado conmigo.

—Fue un accidente, ella intentó disculparse...pero tú...—no alcanzó terminar y lo interrumpí.

—¿Eres amigo mío o de ella?—dije alzando una ceja.

—De ti, pero...

—Pero nada, deberías apoyarme a mi.

—Puede que seas mi amigo, pero no siempre te voy a encontrar la razón.

—Idiota—le dije, y lo dejé hablando solo para irme donde JongUp.

Ese chico debe saber mucho sobre ella. Por lo que me contó, estuvo un tiempo con ella solo por una apuesta. No debió haber sido algo muy agradable el estar con ella, con esa idiota.

—JongUp—dije sonriendo, mientras me acercaba a su lado para comer mi desayuno.

—Zelo—dijo sonriendo también y luego le dio un sorbo a su café—¿Que ocurrió con Nanhee?, he escuchado varios rumores de que ya le declaraste la guerra.

—Que rapidez—dije riendo— y sí, ahora solamente esperaré a que estemos en el campus para comenzar con mis planes.

—¿Serás tan extremista?—dijo él, entrecerrando los ojos.

—Si la situación lo amerita, claro que lo seré—le guiñé un ojo y comí mi desayuno.

*

Después de clase, me fui directo a casa. Mamá estaba preparando una cena para una visita que según ella era una amiga de su época de instituto. Excelente, tendré que comportarme frente a gente como ellos.

Cuándo ya estuve en casa, estuve más menos cuatro horas sentado en el sofá esperando a las visitas y mamá sintió el timbre. La señora habló con mi madre y luego entró a sentarse junto a una chica. Debía de tener mi edad por su aspecto juvenil.

No pasó ni un minuto cuándo mama me hizo acercarme a ellas, saludé a la mujer mayor y al mirar a la otra chica mi corazón dio un vuelco y mis venas comenzaron a arder con un poco de rabia. NanHee estaba sentada en mi sofá, haciéndose la santa. Vi como su cara se deformó de la sorpresa al darse cuenta quién era.

La madre de Nanhee y la mía eran amigas. Tendré que estar cerca de esta idiota. Maldita sea.

La Nerd y El Popular [Zelo | B.A.P ] »Dos Temporadas«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora