Confesión de un simio (Maratón 1/3)

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-¿Por qué estás tan pensativo?-me preguntó Daehyun mientras se sentaba en mi cama.

-Estoy cansado, sólo es eso...-respondí tratando de sonar convincente.

-No me mientas. Sé que te hizo algo _____-dijo mirandome mientras alzaba la ceja izquierda.

-No me hizo nada...

-Zelo, las cosas en este lugar se esparcen tan rápido como la espuma.

Sentí mi cuerpo helarse de inmediato.

-¿A qué te...te refieres?-dije con dificultad.

-Todos saben lo de la rosa.

Tomé mi cabeza con ambas manos y posé mis codos en mis rodillas, Digamos que lo que más quería en este momento era que me enterrasen vivo.

-Debes decirle algo a Kimye para que deje de esparcir esa estupidez.-frunció el ceño-de verdad me molesta que haya llegado en tan mal momento.

-¿Por qué mal momento?-pregunté atontado.

-¿Y lo preguntas?-rió con sarcásmo- te enamoraste de nuevo Jun Hong, y sabes muy bien que eso no le gusta para nada a Kimye.

-No me interesa si le gusta o no. Aparte no me he enamorado.-dije con voz firme- y nunca lo haré.

-La boca castiga-advirtió Daehyun algo irónico.

-Y Zelo también si no lo dejan tranquilo-sonreí con molestia y me cubrí la cabeza con una almohada.

-¿Te acostarás de nuevo?-me preguntó enojado.

-No quiero que nadie me vea.

-Eres tan estúpido-murmuró alargando la ''o'' final, para luego quitarme la almohada de la cabeza-te paras en este momento de este lugar y vas a enfrentar a Kimye.

-No eres quien para decirme que hacer...es más ni siquiera mi ma...-me interrumpió.

-¡Dije AHORA!.-gritó Dae, perdiendo por completo la paciencia.

-Esta bien.

Me paré enojado de mi cama y salí al pasillo, desafortunadamente era día Domingo, todos vagaban por los pasillos sin nada que hacer así que no se entretuvieron en nada mas que en mirarme y murmurar a mis espaldas. 

No encontraba a Kimye en ningún lugar. Las cosas se me estan haciendo difícil.

-¡Zelo!-escuché a mis espaldas mientras iba pasado por la puerta de salida del instituto.

Volteé y tras de mi estaba Kimye con los brazos tras su espalda. Todos miraban con gracia esta escena, sé que no terminará bien.

-Contigo quería hablar-dije con desagrado.

-Querido, creéme que yo también. Es más, quería darte un regalo-sonrió con fríaldad.

Se acercó a mi con lentitud observando a la multitud que estaba tras de ella y les asintió haciendo que ellos sonrieran con maldad.

-Supe que ayer alguien te rechazó y que le regalaste una rosa-sonrió- Y una rosa bastante bella. Y bueno, como no quería que ese bello obsequio de la naturaleza muriera podrida en una fuente,te la traje. Puedes enmarcarla y ponerle como título; ''Día en el que fui rechazado''.

Miró hacia atrás y sonrió haciendo que todos estallaran en carcajadas, ella lanzó al aire los petalos de la rosa roja que el día anterior había sido despedazada, ni mas ni menos que por la persona que de verdad había arruinado mi reputación. 

Sólo me retiré del lugar y me dirigí hacia el árbol del final del patio. En donde soñé por primera vez con ______. En donde comenzó mi maldita obsesión por llamar su atención... en donde comenzó todo este alboroto.

La Nerd y El Popular [Zelo | B.A.P ] »Dos Temporadas«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora