treinta

6.5K 280 31
                                    

Maratón 3/3.

Paris's Point of View.

Terminé de colocarme mi vestido de playa color blanco y sonreí emocionada. Justin me dijo que me preparara porque iríamos a pasear en su yate privado. Nunca había subido en uno y estaba emocionada por hacerlo. Me coloqué un sombrero que quedaba bien con mi outfit y tomé mi celular para sacarme una foto.

-Está hermosa, dama de la casa. -Dijo Justin detrás mío haciéndome sobresaltar.

-Gracias. -Sonreí y me acerqué a él.

-¿Estás lista? -Preguntó.

-Creo que sí. -Respondí dudosa.

-¿Tienes bikini, protector solar, lentes de sol y condones? -Preguntó y solté una carcajada.

-¿Para qué quiero condones? -Pregunté.

-Para no quedar embarazada cuando te folle. -Respondió divertido y puse mis ojos en blanco.

-Agárralos tú. No es mi deber ponérmelos.

-Sólo estaba bromeando, o quizá no. -Se colocó una mano en el mentón y reí.

-Cállate. Tengo todo lo que has dicho, menos los condones. -Respondí.

-No te preocupes, yo tengo. -Me guiñó un ojo y negué con mi cabeza.

-¿Será una salida para follar? -Pregunté levantando una ceja.

-Si se da tenemos que aprovechar. -Respondió y colocó una mano en mi trasero. -¿Vamos? -Preguntó.

-Sí. -Respondí y me separé de él para tomar mi bolso donde había guardado todo.

Una vez lista, Justin me tomó de la mano y salimos de la habitación, bajamos hasta la sala y Justin asintió con su cabeza hacia dos hombres vestidos de negro que nos estaban esperando. Ellos comenzaron a caminar hacia la cochera y nosotros los seguimos. Uno de ellos abrió la puerta trasera de una gran camioneta negra y nos indicó que nos subiéramos. Justin se subió luego de que subí yo y me colocó el cinturón.

-Sé hacerlo sola. -Dije entrecerrando mis ojos.

-No importa. -Me guiñó un ojo y bufé.

Los hombres vestidos de negro, los cuales daban bastante miedo, se subieron en la parte delantera y pusieron en marcha la camioneta para luego empezar a andar por las calles de Mónaco. ¿Todo esto era por Granger? Maldición, ese hombre era una mierda.

-Hay una camioneta siguiéndonos. -Le dije a Justin asustada cuando miré hacia atrás y él rió también mirando. -¿Qué es lo gracioso?

-Son guardaespaldas míos también Paris. -Explicó y largué todo el aire. -No tienes que preocuparte por Granger, él no se acercará. -Besó mi mano y asentí no muy segura.

Después de unos largos minutos de viaje, pude ver como nos acercábamos a un puerto, el cual estaba lleno de yates privados extremadamente grandes.

-¡Wow! -Exclamé al ver el lujo que había aquí.

-¿Te gustan? -Preguntó Justin.

-S-si. -Respondí sorprendida.

Los hombres bajaron de la camioneta y nos abrieron la puerta para que bajemos. Una vez que lo hicimos, Justin se acercó a mí y me tomó de la mano para comenzar a caminar hacia unas rejas por donde podrías entrar al puerto y subirte a uno de los yates. Al llegar, un seguridad abrió rápidamente la reja al ver a Justin, supongo que él venía muchas veces aquí y lo conocían.

-¿Los hombres que dan miedo vendrán con nosotros? -Le pregunté a Justin cerca del oído y éste soltó una carcajada.

-¿Te dan miedo? -Preguntó y asentí. -Vendrán con nosotros, pero no temas, sólo son malos si es necesario.

Seducción y Pecados. ➵ j.bDonde viven las historias. Descúbrelo ahora