A la Medida.

Capítulo 55.

NICK.

Todo sucede tan rápido, las imágenes del auto se repiten. Cuando me logro dar cuenta estoy corriendo hacia mi pequeño que yace en el suelo, las personas se amontonan en un circulo a nuestro al rededor, mi pecho sube y baja mientras estoy tirado en el asfalto con Tommy en brazos, doy unos golpes en su rostro pálido para que despierte y al mirarme lo hace viendo a todos lados.

—Campeón, vas a estar bien, lo juro...no te duermas, Tom. —susurré con los dientes apretados.

—Papá, ¿dónde esta mi balón? —preguntó con una voz baja.

—No lo sé, vamos...—con toda mi fuerza lo levanto, aunque no pesa casi y las personas comienzan a hablar mientras llevo a mi niño al auto, Tommy se queja y sus ojos empiezan a cerrarse.

Entro al vehículo lo mas rápido, piso el croché y manejo por las calles como si no tuviese alma alguna. El terror me invade, que algo le suceda a Tommy me come vivo, no entiendo porque cruzó la maldita carretera, el tipo del auto no hizo nada por detenerse, la desesperación se adueña de mí, mientras manejo fijo mis ojos en como la pierna del pequeño comienza a sangrar, las malditas lágrimas bajan como si fueran a ayudar mucho, el volante dentro de mis manos es apretado por mí mientras maldigo mentalmente lo que esta sucediendo.

—Campeón no te duermas —intento sonreír —, ¿sabes quien ganó el partido ayer? —busco un tema para que no se duerma, mis palabras suenan tan temblorosas.

—No...no sé, ma...má no dejó que... —su voz sonó en un hilo, de pronto se calló.

—¿Tommy? ¿Hijo? ¿qué mas? —las luces de un auto me encandilan y escucho el pitido de éste, por poco chocamos. El hospital se encuentra frente a mi y no me preocupó en estacionar mi coche —. ¡Demonios, no Tommy! —exclame.

Bajo del auto con gritos de ayuda, mientras cargo al que es mi hijo en brazos, sus ojos se encuentran cerrados y empiezo a correr por todo el lugar cuando una camilla con dos hombres se apresuran hasta mi y un doctor lo sigue, los dos hombres que supongo que son enfermeros me quitan a Tommy ya que no se los quería dar, el doctor me mira.

—¿Nombre?

—Tommy, Tommy Parker —logro decir —. Por favor doctor salve a mi hijo, por favor. —suplique.

—Haremos lo que este a nuestro alcance, señor. —dicho aquello se alejaron de mí dejandome en estado de shock.

Con todas mis fuerzas desee que nada malo fuera, porque ese niño es parte de mi vida y si algo llegase a pasarle no sabría que seria de mi.

***

Nos encontramos en la sala, esperando que dicen pero ningún bendito doctor nos dice nada de hace una hora y media que estoy aquí. Fue una tortura decirle a mi novia lo sucedido, y en el estado que se encuentra no puede recibir fuertes emociones. Scott se encontraba con Lyla y Thiago en el instante que llame, el rubio calmó a mi novia y la trajo hasta aquí, cuando llegó comenzó a gritarme en pleno lugar como si tuviera culpa, la verdad me hizo quebrar mas pero ella esta dolida y a los minutos se disculpó, su mirada esta vacía y sus ojos rojos.
Caleb esta de pie con Will en sus brazos intentando que le digan algo mientras que Scott habla con Thiago que no para de decir que no quiere que nada malo le suceda a su hermano, Molly abraza a Lyla mientras yo tengo mi cara entre mis manos.

—¡Nicholas! —mi padre camina alarmado hasta mi, viene con Calvin a su lado —. ¿Qué han dicho del niño?

Ya que mi voz no sale mi amigo se atreve a responder.