45. Verónica

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Nos bañamos juntos luego de tanto sudor, y al bajar para que Jeremy me lleve a casa el juez Ross me invita para que me quede a cenar con ellos, con una cara a la que no le pude decir que no; por lo que tuve que avisar en casa; y papá creo que echó chispas por eso. Después de todo lo que hemos pasado, he empezado a encariñarme con él, es extraño; pero el padre de Jeremy es una linda persona. Él preparó la cena mientras nosotros ayudamos a poner la mesa. Preparó para nosotros pizza casera deliciosa. Eso hizo del tiempo de la cena un momento muy agradable. Vi durante ella esa faceta de hijo orgulloso y admirador de su padre que me hizo estremecer. Sobre todo después de ver como renegaba de él influenciado según Coleen por su madre; y eso es algo que aún me resigno a creer. Natalie Ross no parecía mentir con su situación. Ella sufre al igual que él también lo hace por tener que dejarla allá.

―¿Entonces todo eso va hacer el padre de Mia? ―Jeremy pregunta a su padre, y yo siento que por andar sumida en mis pensamientos, me he estado perdiendo parte de la conversación.

―Disculpen. ¿Qué cosas? ―Me dirijo a ambos.

―Intento de violación, secuestro, posesión de drogas, difamación. Y etc. Papá puedes hacer algo; para que no sea tan drástico.

―Hijo, sé que suena terrible; pero el propósito de Nick es que Jay reciba una lección ejemplar, y en eso estoy de acuerdo.

―¿Y si hubiera sido yo papá? ―Jeremy toma a su padre por sorpresa.

―También lo haría, hijo ―responde sin dudar―. Sí eres capaz de hacer todo eso; también tendrás suficientes pantalones para afrontar las consecuencias de tus actos ―añade sin ninguna dilación.

Sí, definitivamente es un juez todo estricto. Terminamos de cenar y en vez de ir casa, el juez me pide que nos quedemos un rato más con él y empieza a sacar los álbumes de los recuerdos bochornosos de Jeremy cuando era pequeño. También me enteré del porqué del raro gusto de Jeremy por la banda de Poison; y es que su padre es un gran fanático y seguidor y le inculcó sí gusto por su música. Fue un momento confortable, y una vez más me di cuenta de lo mucho que Jonathan Ross, el juez estricto ama e idolatra a su hijo. Finalmente salimos y Jeremy me lleva a casa. Lo molesto todo el rato hasta que se desquita agarrándome a besos. En casa papá me espera aun despierto, no dice nada cuando entro solo me da un beso y me desea las buenas noches.

∞∞∞

Mi sueño dura lo que dura un suspiro; y lo cierto es que tengo mucha ansiedad. Cuando mamá toca mi puerta ya estoy despierta. Me alisto y bajo, no desayuno y eso le preocupa, y para que no lo siga haciendo le digo que comeré algo en la escuela. Al rato llega Jeremy. Hoy cojea menos, lo que hace que mi padre antes de subirse a su camioneta y nosotros al Camaro, le pregunte que le sucedió. Él le cuenta, y al igual que con Jacob le dice lo mismo. Tiempo inactivo, tiempo perdido; sin embargo, la diferencia es que Jeremy no tiene necesidad de una beca universitaria, Jacob sí.

Desde que llegamos a la escuela no suelta mi mano ni un instante, y solo lo hace cuando yo entro a mi clase, y a él le toca irse a la suya. Phi está esperándome; y no sé por qué; pero su semblante no luce tan feliz como antes; en serio estará teniendo problemas con Max. Exhalo.
En el descanso vamos todos a la cafetería. Jeremy también porque está temporalmente fuera del equipo debido a lesión de su rodilla, Nat si sigue entrenando. Jay también está en la cafetería, lleva la nariz vendada después del golpe que le propinó Jeremy. No está tan animado como siempre, parece preocupado. Ni siquiera los que le rodean se ríen, y eso incluye a Kate, que solo hace caras serias con pose de reina.

―Pasaremos la tarde con Cheryl, ¿de acuerdo, Em?

―Si claro ―respondo automática a Phoebe y Jeremy me mira triste; porque eso significa que no voy a pasar la tarde con él. Y es una pena, quiero estar con él todo el tiempo; pero el asunto es que Cheryl es mi amiga y ella ahora necesita más que nunca todo nuestro apoyo.

Antes del fuego✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora