Este par de días mis ideas han estado volando y no logro conectarme en el trabajo, no puedo sacar de mi cabeza la frustración que me produce todo acerca de Hardy. Aunque sé que no le gusta que lo llamen así la costumbre no se me quita, y lo que es peor es que sus amigos lo llaman Jaime.
Es miércoles y como es regular John me espera en la entrada de gimnasio con su cara de hoy vas a sufrir Sophie.
– Hola Sophie – me dice mientras me muestra cada uno de sus dientes
– Buenas noches John – digo mientras pongo mi cara de seria
– Hoy sufrirás – me dice mientras cruza sus brazos
– Yo también te quiero John
Esto a punto de caer en suelo, lo que decía John sobre sufrir era verdad. Me ha dado una rutina de crossfit como para atletas de alto rendimiento, no puedo creer que por más rutinas exigentes que haga mi físico no mejora o bueno si pero es que John cree que voy a ir a competir a los juegos olímpicos.
Cuando salgo del gimnasio entre risas levanto la mirada y él está ahí, después de cuatro días de tenerme es la oscuridad esta recostado en la parte delantera de mi carro con los brazos cruzados y su mirada desafiante en mí. Me acerco un poco y él le para en sus pies.
– Buenos noches Sophie – me dice mientras se acerca un poco a mi
– ¿Qué? – aclaro mi voz –. ¿Qué estás haciendo aquí?
– Vine a verte – se encoje de hombres –. No es eso obvio – se para enfrente de mí y una pequeña sonrisa de asoma en su rostro y abre su boca en busca de la mía
– Te vas por cuatro días – me libero de su mirada y me pongo en marcha hacia la puerta del auto –. No me llamas, no me escribes, no das señales de vida – intento abrir la puerta pero él está justo detrás de mí y lo impide – siento su respiración en mi cuello, y sin más giro para tener su hermoso rostro de frente al mío –. No puedes solo venir y hacerme esto
– ¿Qué te estoy haciendo? – se acerca cada vez mas
– James para por favor – pongo una mano en su hombro para intentar alejarlo de mi pero es demasiado fuerte y no logro moverlo ni un minutos
– Parar ¿Qué? – su palabras llegan a mis oídos en forma de reto – pone una mano en mi cadera y la otra acaricia mi rostro –. ¿ Quieres que pare? – niego con la cabeza y sin pensarlo dos veces me empuja con su cuerpo contra el auto y su lengua se abre en mi boca, explora en territorio conocido – pierdo el aire con su imponente beso y cuando se separa muerde su labio –. Se ve usted hermosa después de hacer ejercicio – toma las llaves del auto que estaban en mi mano –. Nos vamos señorita Woods, hemos dado un gran espectáculo esta noche – señala su cabeza y me doy cuenta que John y las chicas están mirando.
– Es mi carro – pongo mi mirada nuevamente en el
– ¿Quiere manejar?
– Me encantaría – extiendo mi mano para que el me entregue las llaves
– Pensé que después de todo esa ruda y exigente rutina le gustaría descansar mientras llega a su casa – toma mi mano pero no me da las llaves
– ¿Ruda y exigente rutina? – cuánto tiempo lleva este hombre aquí afuera
– Ese hombre no tiene piedad de ti – señala a John con su cabeza y después regresa a mí con una sonrisa
– Le parece muy gracioso mis esfuerzos físicos Sr. Hardy – camina hacia el otro lado del coche y me arrastra hasta junto a él, abriendo la puerta para mí me da otra sonrisa y entro al auto
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Sin Limites
RomanceSophie es una mujer exitosa que a sus 25 años esta a punto de iniciar hasta ahora el proyecto más importante de su carrera, donde conocerá a el empresario James Hardy. Él no le tiene miedo a decir lo que piensa provocando en Sophie todo tipo de emo...