Sin Limites

Capítulo 13

El pent-house es hermoso, si la vista desde Quadrum es increíble esta no tiene comparación. Puedo ver toda la ciudad de Chicago en su versión nocturna. James me da un pequeño recorrido por la primera planta, la cocina es muy moderna con un hermoso estante de vinos importados.

– ¿Te gusta la cocina? – pregunto mientras salimos en dirección al comedor

– No tengo un gran menú – encogiéndose de hombros –. Pero no muero de hambre

– ¿Vives solo? – cuestiono

– La señora Greene viene un par de días a la semana para limpiar – dice con serio

Aun James diga que esto no él lo suyo se le da bastante bien, el comedor está decorado con velas y la mesa ya está servida.

– La señora Greene preparo algo especial – dice ofreciéndome tomar asiento

– Se ve delicioso – digo antes de sentarme

– Ella me enseño lo que se cocinar – sirve una copa de vino

Antes de sentarse en su lugar se quita el saco y se remanga su camisa. La comida que preparo la señora Greene estaba exquisita. Cuando terminamos de cenar dejamos los platos en la cocina para luego irnos a sentar en el sofá grande de la sala. La sala del penthose tiene un sofá gigante que queda al frente de un televisor plasma aún más grande y un chimenea.

James pone un documental sobre contaminación. Estoy recostada a su cuerpo, el hace pequeños círculos en mi hombro mientras que con su otra mano sostienen la copa de vino.

El documental es interesante pero James ha empezado a distraerme dejando besos en mi hombro, deja la copa en la mesa y se vuelve a acomodar para luego jugar con mi pelo.

– Si sigues no voy a ver el final del documental – digo mientras que en su rostro aparece esa sonrisa seductora que tiene.

– Te lo puedo decir después de que estés desnuda en mi cama – dice de forma tan natural que me río un poco

– No lo puedo creer – finjo sonar sorprendida y desilusionada –. Me has traído aquí solo para acostarte conmigo

– Ambos sabemos que es mucho más que eso – dice en mi oído

En un rápido movimiento estoy bajo su cuerpo, su labios encuentran los míos y su lengua empieza a torturarme. Sus manos acarician mi cuerpo, como estoy usando vestido tiene fácil acceso pero cuando creo que se va aprovechar hace todo lo contrario y después de unos intensos besos para.

– Aquí no – dice mordiendo su labio inferior

– ¿Qué? – pregunto un poco sorprendida

– No quiero que pienses que solo quiero esto de di

Se sienta y me ayuda a levantarme

– No te voy a negar que en estos momentos el único lugar en el que quiero estar es dentro de ti pero... – siento como mis mejillas se llenan de sangre y frunce el ceño –. Tú eres diferente, mereces más.

Sus palabras me toman por sorpresa pero me gustan, sus ojos aún están oscuros por lo que acabo de suceder.

– Ven vamos para que veas todo el lugar – me dice mientras se pone en pie y me ofrece su mano

Además de la sala, la primera planta tiene un estudio lleno de maquetas de edificios. Las escaleras llevan a un corredor con algunos cuadros, hay un par de habitación para invitados muy bien equipadas. Una de las puertas tiene un habitación con algunos peluches.

– Este es el cuarto de Lucy – dice mientras entro al cuarto

– No viene mucho – aclaro

El cuarto es muy parecido a los otros dos, el color de las paredes es un poco oscuro para ser la habitación de una niña de 10 años. Se diferencia de los demás porque hay un escritorio con un par de dibujos.