C a p í t u l o 2.

6K 243 19
                                    

Actualidad {10 de marzo de 2007}

Ahora era cuando los nuevos alumnos y alumnas entraban a la institución, el señor Dunoff, o más bien el chancho estaba dictando su discurso de principio de año, las mismas reglas de siempre, la misma mierda de siempre. Me dispuse a sentarme en una esquina, mientras colocaba mis auriculares y alguna canción triste de Snow Patrol. Veía como las barbies de tercero y tal vez alguna de mi curso entraba al gran hall, mi mirada se desvio hacía el grupete de los piratas donde estaban integrados Guido o Café como le decimos todos, Tomas y... Pablo. Los tres eran iguales, a estos se les caía la baba por cada rubia que entraba al colegio, y tal vez si me sentía mal porque justo a él no se le estaba cayendo la baba por mí. Ahí fue cuando me despabile de todos y también de él cuando vi entrar a Manuel y Mía, la pareja estrella, pero los dos eran grandes amigos. Me arranque los auriculares y guarde el celular para correr a abrazar a Manuel ya que Mía había desaparecido con Vico y Feli.

— ¡Hey! ¿Cómo has estado? ¡Tanto tiempo! Debemos ponernos al día con la banda eh, mira que este año tenemos que triunfar. — Reí al escuchar el acento mexicano de mi amigo.

— Fue difícil el verano, pero estoy bien supongo. — Hice una mueca— Y sobre la banda...

— ¡Manuel! — Escuché la voz de Pablo diriengose a abrazar a Manuel. Quería decir que dejaba la banda, que no podía seguir yo estando Pablo ahí. Pero este llego interrumpiéndome.

— ¡Pablo! ¿Qué onda güey? —  Habló Manuel con sus apodos mexicanos, correspondiendo el abrazo de Pablo —  Como le decía a Marizza, debemos comenzar a ensayar para la banda, con Mía escribimos varias canciones, son algunas ideas. 

— Sí obvio, mientras más ideas mejor, yo también escribí algunas cosas, podemos empezar ahora mismo.

— ¿Ahora mismo? — Reí irónica—  Para nene, ni siquiera los dejaste desempacar, no siempre todos van a hacer lo que queres por más que seas el hijo del Intendente.

— Cállate la boca pelirroja, no estoy hablando con vos.

— ¿Pueden dejar de pelear? Somos una banda ¿Lo saben no? Voy a desempacar y ordenar mi cuarto. Luego los busco ¿Ok? — Asentí con la cabeza y Manuel se retiro.

— ¿Ves? Arruinas todo. — Le dije fulminándolo con la mirada.

— ¿Yo? Para nena, vos fuiste la que saltó mal, siempre lo mismo con vos Marizza, no vale la pena seguir discutiendo. 

— ¿Y que haces ahí parado? Andate, que corra el aire.

El puso sus ojos en blanco y se retiro de frente mío. Tome un largo suspiro y salí del hall para dirigirme a mi habitación.

— No lo superas ¿No? — Voltee al escuchar que Mía me hablaba.

— Sí lo supere — Ella alzó su ceja— Bueno no. Dos meses y medio no es suficiente para superar tantos meses de mentira y engaño. 

— ¿Lo extrañas? — Asentí y mis ojos se cristalizaron— ¿Y por qué no vuelven a estar juntos? Míranos a mí y a Manuel, tuvimos idas y vueltas pero acá estamos.

— Manuel te quiere Mía, te ama. Pablo a mi no me quiere ni ver, además no soy capaz de perdonarle jamás que me haya mentido. Anda a acomodar tus cosas barbie, no te voy a dar el gusto de verme llorar. — Ella rió y fingí una sonrisa.

— Podes estar mucho más madura pero nunca vas a dejar de tratar mal a la gente que más queres.

— ¿Lo decís por vos? ¿Quién dijo que te quiero princesa trucha? — Soltamos ambas una carcajada.

Asignatura pendiente. [Pablizza]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora