Ryan

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Coño ¡¿que he hecho?! No he podido resistirme, tenerla tan cerca ha sido insoportable y cuando nos hemos caído no he podido controlarme, sentir su cuerpo junto al mío, poder oler su colonia fresca con un toque dulce, en el momento en que sus ojos se han puesto fijado en mis labios, sabia que no iba a poder controlarme.

Sus labios son suaves y demasiado perfectos, en un principio esta sorprendida, pero después se va relajando, habre un poco sus labios lo que aprovecho para profundizar el beso ¡Dios me va a volver loco! Sus manos buscan mi pelo, lo acarician pero nuestros labios no se separan, su lengua juega con mi piercing. Es tan inocente y a la vez malvada que es imposible no fijarse en ella, sé que no voy a dejarla escapar después de esto. Necesito relajarme, pensar, esto no esta bien, nada bien. Me separo.

- Lo siento- La ayudo a levantarse y salgo de la habitación, tengo que salir aquí lo antes posible o volveré a esa habitación y solo dios sabe que puede pasar. Se a quedado de piedra, se que me va a odiar después de esto, pero es lo mejor, así será más fácil mantenerla alejada de mí.

Me despido rápido de Sus, subo a mi moto y me dirijo a casa de Emma, tengo que sacarmela de la mente como sea y ella es la mejor opción.

Llamo al timbre, cuando abre la puerta va en pijama, no le doy tiempo a decir nada, la beso fieramente mientras la levanto en brazos y la llevo a la habitación, ella responde a mis besos y rapidamente nos desnudamos, he visto su cuerpo muchas veces, és como una diosa griega, me apoderó de ella fuertemente, el beso de Alyssa aún esta presente en mi mente, cuando por fin estamos saciados, nos tumbamos en la cama, ella suspira y se coloca encima de mi, me mira con deseo y se desliza hacia abajo, su boca se cierne sobre mi pene, no puedo evitar gemir de placer, se le da demasiado bien, mientras me corro en su boca no me doy cuenta de lo que digo hasta que ella me diga que lo repita.

-¡Joder Alyssa!

-¿Que has dicho? - Levanta la cabeza y me mira fijamente.

- Ee esto... nada, tu sigue- Mierda, ahora si que la he cagado pero bien.

- ¿Asi que Alyssa he? - Se tumba a mi lado- Dime que no és la torpe de la bolera.

- ¿Porque tiene que ser ella? - ?La gente tiene telepatia?

- Vamos que sí, haber cuentame, ¿porque has corrido a mis brazos? Osea no esque me moleste que sea tu segundo plato pero cuenta- Le cuento y ella escucha callada, analiza la situación y a continuación dice- Vamos que te gusta, pero no quieres nada con ella ¿no?

- Mas o menos, bueno ella no me gusta o eso creo, pero esque no quiero que espere cosas de mí que yo no puedo ofrecerle. No quiero una relación, es lo menos que necesito ahora mismo, y ella tiene a sus amigos, he visto como la miraba uno de los chicos que fue con ella, obviamente esta loco por Alyssa y yo no podre competir con ese- Me tapo la cara con las manos.

-¿Como que no puedes competir con él? Eres Ryan Price, todas te aman- Me da un beso, y me arregla el pelo.

-Porque él la conoce y yo casi no se nada de su vida- Ese capullo save donde vive y yo no, puede ir a visitarla o llevarla de compras a cualquier parte y yo no.

- Pues preguntaselo, mira Ryan si a ella le gustara el chaval ese no te hubiera besado, esta claro que al menos le atraes físicamente- En eso tiene razón.

-No creo que quiera saber nada de mí, después de lo de hoy, seguro que me odia.

-Nunca digas nunca, ademas de que seguro que no te odia, alomejor solo te coje mania y no quiere volver a acercarse a tí, quien sabe- Le doy un codazo y ella se ríe.

-¡ Callate!- Nos reimos juntos, eso es lo que me gusta de Emma, con ella te puedes desahogar porque te escuchará siempre. Sin darme cuenta me quedo dormido, pensando en que quien estoy abrazando es Alyssa.

De pleno en el corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora