R U MINE ? - Gernay | TERMINADA

19.

Dias después...

GERMAN POV.

— Oh baby, esto no era necesario - Lenay sostenía con una gran sonrisa el peluche de un mono que le había dado.

— Si lo es, acabamos de cumplir cuatro meses juntos - la tomé de la cintura acercándola - además, te tengo otra sorpresa.

— ¿Cuál? Yo estoy muy feliz con esto que me diste, aunque yo no tenga nada que darte.

— Tu ya me diste tu regalo, todos los días me los das al estar conmigo a mi lado, mi amor - sonreí mientras le daba un beso en la frente - no te puedo decir cuál es la otra sorpresa, pero te la daré cuando vayamos de viaje.

— Mañana vamos a ir a recoger a Diego, ¿verdad?

— Si, a las 8 de la mañana llega.

Me miró sorprendida y luego fastidiada.

— ¿Tan temprano? Pero yo deseaba dormir hasta tarde, hoy es mi primer día de vacaciones - protestó haciendo un puchero - pensé que llegaban en la noche.

— Se supone, pero el vuelo se canceló y vendrán más temprano - sonreí mientras la miraba con ternura por el gesto que hizo.

— Esta bien, pero pasado mañana si dormire hasta tarde

— Y yo te acompañare, pero por el momento vamos a comer que me estoy muriendo de hambre.

— Que exagerado - se separó dirigiéndose a la cocina.

— No exagero, siento que me puedo desmayar en cualquier momento si no como algo - dije con tono desesperado mientras entraba a la cocina atrás de ella.

— Qué dramático - negó riendo.

— Dramático pero aún así te gusto - susurré en su oído mientras la abrazaba por atrás.

— Hmmm, creo que tienes razón - se volteó para poder verme.

— Te amo - susurré cerca a sus labios.

— Yo igual te amo - me dio un tierno y lento beso para luego separase - ve eligiendo la película, yo enseguida voy con la comida.

Asentí y salí hacia el salón con una tonta expresión en el rostro sintiendo aún el beso que me había dado.

*        *        *        *

LENAY POV.

— Baby, alguna vez pensaste en tener una mascota - le pregunté mientras miraba por la ventana, estábamos de camino al aeropuerto.

— Si, a qué viene la pregunta.

— Nada, solo tenía curiosidad.

— Ahhh... - dijo no muy convencido por mi repuesta.

— Y qué animal te gusta... ¿Por qué no tienes?

— Los perros, los gatos - giro y estacionó él auto - ¿Cuál te gusta a ti? No pude tener porque estaba siempre en la oficina y no tenía mucho tiempo para estar en casa - volteó a mirarme.