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Instagram de Rose: lilianrose_w 

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Instagram de Rose: lilianrose_w 

Recuerden que el instagram será borrado una vez termine la historia.

(He subido otra vez el capítulo, porque algunas personas se quejaron de que no podían comentar, o votar... Espero que ahora si se pueda :c)
***

Hundida en sus pensamientos y con la mirada fija en la ciudad, Rose no paraba de analizar todo lo que había pasado aquella mañana.

La mamá de Austin estaba viva, y por alguna razón, había llegado a Nueva York en busca de él. Todo parecía sacado de alguna mala película de Hollywood, pero era realidad. La señora Athenea había fingido su muerte y la muerte de su pareja, el padrastro de Austin, con tal de su libertad.

Austin, notando la extraña conducta de Rose, posó su mano en el muslo de la castaña, llamando así, su atención.

-¿Estás bien? -Preguntó él, cuando Rose lo miró.

Rose asintió con la cabeza, dando un falsa sonrisa.

>>Te conozco lo suficiente para saber que no estás bien.

Austin miró al frente, viendo como el semáforo cambiaba a verde, puso en marcha el auto nuevamente, conduciendo por las calles de Manhattan, directo al colegio de Oliver.

-Estoy bien -Insistió Rose una vez más, mintiendo.

-¿Estás segura? Te ves distraída.

-Cosas del trabajo, tuvimos grandes problemas hoy -Y no era mentira, Rose estaba, además de confundida, muy cansada.

Austin se estacionó a las afuera el enorme colegio donde Oliver asistía. Volteó su mirada, viendo a Rose con una mueca en su rostro. Tomó la mano de la chica y depositó un beso, haciendo sonreír a Rose, en medio de un suspiro.

-Tenemos que hablar... -Dijo ella, casi arrepintiéndose de abrir su boca.

Austin sonrió apenado, asintiendo con la cabeza lentamente, antes de poder decir algo, Oliver se introdujo en el auto, saludando con una sonrisa a su padre y a Rose.

La castaña y el adolescente se mantuvieron hablando todo el trayecto, de vuelta a casa. Y Austin, por otro lado, temía enormemente ante la frase que Rose acababa de decirle "tenemos que hablar". Aquello jamás llega a un buen puerto. Era algo serio y lo sabía.

Su imaginación voló por los aires, pensando escenarios horribles. ¿Es que quería terminar la relación? ¿Ha encontrado alguien mejor que yo? Pensaba Austin, haciéndole perder la cordura.

Al llegar a casa de los Warren y buscar a Hope, Austin condujo en un completo silencio, hasta casa. Oliver fue el primero en bajar y correr hacia la puerta principal. Rose abrió la puerta del copiloto, para poder bajar a la pequeña Hope, pero antes de salir por la puerta, Austin la tomó del brazo. Ella lo miró, levantando una ceja.

TREINTA Y UN ROSAS PARA ROSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora