Consecuencias | Christopher Vélez ©

Capítulo 12: Despedirme de ti

Luego de llegar, bajamos y estábamos por entrar. Mi mama estaba a mi lado.  Todos notaron que estábamos nerviosas pero no dijeron nada. Yo ya quería irme, cuando intente huir la madre de Chris salió de la casa y fue directo a abrazarlo.

Al soltarlo se percató de mi presencia y me miró extrañada, como si sintiera que me conociera. Miro ahora a la persona que estaba a mi lado y sus ojos se aguaron. Corrió para abrazar a mi mama y yo solo miraba la situación sorprendida al igual que los demás.
Yo porque creí que Yenni se enojaria y la echaría, los chicos porque no sabían que  eran hermanas.

-Laura, no puedo creer que seas tu, ¿como puede ser que estés aquí? Te extrañé tanto hermana- dice Yenni secándose las lágrimas de sus mejillas.

Mis ojos picaban, mire a Chris y él no podía creer lo que había escuchado.

La verdad se supo, él ya sabia que eramos familia. Puedo ver en sus ojos culpa; culpa porque me beso y se que él piensa que yo tampoco sabía todo esto.

No podía ver más esa mirada llena de arrepentimiento, así que hice lo que mejor se hacer.

Sali corriendo, huyendo de mi realidad.

{...}

No sabia donde me encontraba, lo único que se es que salí corriendo de la casa de Christopher, llorando y con el corazón roto.

Miraba a mi alrededor y pensaba que esta sería mi ciudad si no me hubiera llevado a Argentina. Me encantaría conocer cada parte de ella y conocer mas a mi familia.

Como a Chris... Ahora Chris se alejara más aún de mi, o tal vez quiera conocerme más y podríamos ser los mejores primos. *¿A quien engañas?* pensé. A Christopher lo veía como algo más que un primo o un amigo.

Sentí pasos detrás mío,  me di la vuelta asustada.

*¿Por qué no salí corriendo?*

Él estaba ahí, mirandome con lágrimas en los ojos. Se sentía tan roto como yo.

-Chris... yo... - trate de explicarle pero simplemente no me dejo.

-No me digas nada. Sólo abrázame por favor.- dice con la voz rota.

Trate de olvidar el lío en mi cabeza e hice lo que me pidió.

Estábamos los dos en silencio, disfrutando de este abrazo aunque sea unos minutos.

-Yo lo sabia todo, pero no sabia como hacer para sobrellevar todo esto. Luego de que supe la verdad, solo salí corriendo y te encontré en el parque. Tu sólo me besaste y me sentí peor, me sentí una completa zo.rra porque deje que mi primo me besara- un sollozo salió de mi, apreté más el abrazo por miedo a que él se alejara de mi.

-No tienes la culpa, yo te bese y apenas te conocía, fui un idiota... lo siento- dice soltando el abrazo. Ahora me tenía agarrada de la cintura.

-Se que no debería haber esto,  pero si vamos a ser primos ahora quiero despedirme de ti con un... con un beso- dice muy cerca de mis labios. Suspiró y su aliento a menta inundó mis fosas nasales.

-Pero Chris, nosotr...- no pude continuar porque me interrumpió.

-Shh, solo será un beso- No pude negarme ya que me callo con un beso suave, de esos en los que no hay apuros y solo te dejas llevar. Tan dulce y perfecto.

{...}

-Y este será tu cuarto a partir de hoy.- dice Yenni enseñandome el cuarto de huesped -Aún no puedo creer, cada vez más grande y más hermosa; y por lo que escuche muy inteligente. Ven aquí princesa- lo único bueno de todo esto es que tenía a Yenni a mi lado, la persona a la que solía llamar mi suegra ahora era mi tía. Que locura.

Me abrazo y no pude aguantar más hacerme la fuerte. Lágrimas rebeldes caían por mis mejillas, no podía contener más el nudo en mi garganta, simplemente me desahogué en sus brazos. Ahora era mi familia.

-Estoy feliz de que hayas conocido a Chris, si no fuera por eso no estarían aquí ahora- dice sonriendo.

*Y tal vez no tendría el corazón roto* pensé. 

Omiti decir algo y empecé a acomodar la ropa, pero mi tía me detuvo. Se sentía raro decirlo.

-Deja que yo arregle esto, ¿si? Ve a ducharte- dice cariñosamente.

Ella era tan dulce conmigo y hacia un buen tiempo que no me veía, pero el amor que tenía por su sobrina seguía.

-¿Tanto apesto?-  digo bromeando. Ella se río un poco y hablo.

-Solo un poco- dice frunciendo los labios para después reírse. -Anda, ve que te hará bien despejarte- dice y da un beso en mi mejilla.

Suspiro y agarro una remera básica, un short de mezclilla, ropa interior y tenis.

Me dirijo hacia el baño, me doy una ducha rápida y cuando salgo y ato una toalla a mi cuerpo, alguien entra al baño haciendome gritar.

Rápidamente entro a la regadera cuando note que la toalla al estar mal atada se me cayó al piso. Mis mejillas ardían y no pude evitar gritar de la sorpresa.

Christopher me había visto desnuda.

*Qué la mala suerte siempre este de mi lado*