Capítulo 46

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En el capítulo anterior:

Mi Tris...

-Sin embargo, después de varias pruebas hemos  encontrado algo inusual en su organismo.

Mi cuerpo se puso alerta.

-¿El qué?- Susurré.

- Parece que en los últimos días ha ingerido una sustancia tóxica en grandes cantidades que estaba escondida en alimentos. Su organismo esta completamente intoxicado.

Las palabras me cayeron como un balde de agua fría.

******

Salí de la sala como un alma endemoniada en busca de la responsable de toda esta mierda, ella fue la que estropeó todo desde un principio y ella pagará las consecuencias de haberse metido en mi vida.

No sabía donde esa... innombrable podría estar, pero eso no me hizo no buscarla hasta la última habitación de la sede osada.

《No puede estar muy lejos》

No me di por vencido cuando me puse a buscar por todos lados debido a la impotencia que me recorría y me susurraba que actuara de inmediato.

Una silueta femenina salió de las sombras a mi espaldas y tardé unos segundos en reconocerla para lanzarme hacia ella como un tigre enfurecido.

La enganché del cuello con fuerza y la estampé sin piedad contra la pared al igual que hice con el médico anteriormente. Su mueca no me produjo satisfacción en absoluto.

La mataré con mis manos si hace falta.

-Hey, menudos reflejos.-Fue lo que salió de su boca entrecortadamente.

-También soy bueno en cortar la respiración , ¿quieres comprobarlo?-Dije entre dientes.

-Estoy bien así.-Se quedó callada para recuperar aire.-Aunque si me sueltas podríamos...

La apreté con más fuerza aún. Ella apretó los ojos.

-No volveré a caer en tu estúpido juego. Dime que le hiciste a Tris y puede que sea piadoso contigo.

-¿Puedes refrescarme la memoria? No recuerdo haber conocido a ninguna Tris...

La separé de la pared para a continuación apretarla de un golpe fuerte contra ella de nuevo.

-No estás en posición de hacerte la tonta.-La miré con una fría mirada.-Dimelo. Ahora.

-¿Qué te hace pensar que he sido yo la que he envenenado a tu noviecita?-Cada vez se quedaba más sin aire.

Sonreí. Por fin.

-Me lo acabas de confesar.¿Realmente es tu facción erudición? No es que honres mucho su nombre, ya sabes, la gente de allí suele ser lista.

Me molesté en explicarla cuando vi su cara de confusión.

-Yo nunca te he mencionado nada de que ella esté envenenada.-Casi vuelvo a sonreír por observar su rostro contraerse en el momento en el que se da cuenta de que había metido la pata.- Mira, no sé por qué demonios me hiciste mentir a la persona que amo, no se con que fin quieres herirla, pero te aseguro y juro por la facción que como te pille la próxima vez asumirás las consecuencias y probarás el polvo del fondo del abismo.-Le dije lo más rudo posible.

A continuación la solte y esta calló sujetandose el cuello mientras con los dedos pulgares se lo masajeaba para calmar el dolor.

Aspiró muy fuerte antes de hablar.

Divergente (Sin Guerra)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora