Capítulo 68

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TRIS'POV

-¿Está todo claro, entonces?- Preguntó por tercera vez Cuatro.

Todos asintieron con conformidad. 

Estos tres últimos días habían transcurrido rápido, Cuatro no ha podido recibir más información por parte de Arian y Peter, Chris y yo habíamos dedicado el tiempo a entrenar aún más a los iniciados para que estuvieran preparados para cualquier cosa.

Solo faltaban dos días para la bienvenida a los nuevos osados, y los pobres no podían estar más nerviosos. No por su nueva vida, si no por lo que podía avecinarse.

Realmente los compadezco a cada uno de ellos.

-¿Mañana a la misma hora?- Preguntó Zack con ojos cansados al igual que el resto de sus compañeros. Ninguno había podido dormir mucho estas noches, incluyéndome.

Cuatro iba a responder, pero di un paso adelante con una sonrisa relajada. Se quedó callado al ver que iba a hablar.

-No, mañana no hace falta que vengáis, no habrá entrenamiento.

-Pero, Tris...

-Ellos están preparados y necesitan descansar. No queremos a unos guerreros ojerosos y con falta de sueño, ¿verdad?- Me acerqué a Cuatro.- Además, nosotros también necesitamos un descanso.- Le susurré para que solo él me escuchara.

Finalmente, asintió.- Me parece bien.

-Sí, fantástico.- Apoyó Peter. Christina por su parte, ya se estaba yendo de la habitación con un bostezo poco disimulado.

Sonreí mientras negaba con la cabeza.- Tener una buena noche. Descansad.

Todos se despidieron y salieron en grupos silenciosamente para dirigirse a los dormitorios.

-Voy a recoger esto, ¿me esperas en la habitación?- Le pregunté a Cuatro.

-Claro, prepararé la cama.- Se acercó y depositó un lento beso en la frente.-Te quiero.

-Te quiero.- Le respondí con los ojos cerrados, deleitándome en sus labios sobre mi piel.ç

-¡Asco!- Exclamó Peter poniendo una mueca dramática que me causó gracia.- ¡Demasiado asco! Creo que voy a vomitar.

-Cállate.- Le respondió Cuatro.

-Hasta luego.- Me despedí de todos y me dispuse ha recoger todas las armas.

Cogí armas de fuego que había por varias mesas para guaradarlas en los compartimentos correspondientes. Proseguí recogiendo cuchillos que había dispersos por el suelo y en las dianas.

-¿Te ayudo?

No me sobresalté al escuchar su voz.- Deberías estar durmiendo.

-Lo sé.- Respondió encogiéndose de hombros. Después se agachó a mi lado y recogió cuchillos.

-Gracias.

-No hay de qué.- Se quedó en silencio, tratando de decirme algo que por alguna razón no se atrevía a decir.

-Cam.

-¿Sí?

-Suéltalo.

-¿El qué?- Preguntó confuso.

-Sé que quieres decir algo. Dilo.-Le animé.

-Bueno...- Vaciló antes de hablar.- Quería pedirte un favor.

-Adelante.- Dije dejando la tarea que hacía para mirarle.

-Pues verás...


**********

Despojé mi cabello de la toalla negra que mantenía mi pelo húmedo recogido. Sacudí mi cabeza, las gotas de agua cayendo por todos lados.

-Me acabas de recordar a un perro.- Dijo Cuatro sonriente, quien ya se encontraba tumbado en la cama, con los brazos cruzados tras su cabeza.

-Es lo más bonito que me han dicho en la vida.-Ironicé cogiendo carrerilla para así lanzarme a la cama con impulso, provocando que Cuatro casi se caiga.

-Y una bruta también.-Añadió riendo.-La bruta que me encanta.

Rodeó mi cintura con sus brazos y pegó nuestros cuerpos. A continuación, escondió su cara entre mi pelo.

-Mmm...que fresquito.- Murmuró, su cara ahora mojada por mi pelo húmedo.

Solté una pequeña risa.- Tonto.

-Hermosa.

-Infantil.

-Te quiero.

-Te quiero.-Le respondí mirando sus ojos, esos que tanto me fascinaban.

-Bésame.-Pidió acercando nuestros rostros.

Es solo un beso, pensaba, pero sabía perfectamente que ese no era su propósito. No se quedaría satisfecho con el beso. 

-Tengo sueño.- Le dije poniendo morritos.

-¿Y? Solo es un beso.

Alcé una ceja.-Ambos sabemos que no es solo un beso.

Tardó específicamente treinta segundos en no poder aguantar la risa.

-Sabes leerme tan bien...

-Que puedo decir, dejé de leer poniendo el dedo debajo de las letras muy temprano.-Dije fingiendo un tono de voz de orgullo propio.

El comentario causó gracia en Cuatro, quien volvió a reír, apretando más su agarre en mi cintura. Escondió el rostro en el hueco de mi cuello y aspiró notablemente antes de depositar un recorrido de besos húmedos por mi piel.

-¿De verdad...-Hizo una pausa para depositar otra ronda de besos.-...tienes sueño?

Asentí.- Y sé que tú también. Debemos dormir.

-Hay veces que lo que debemos hacer no coincide con lo queremos.-Alzó la vista, su nariz rozó la mía con tentación.

Tragué saliva.-Que poético. No sabía que se te daba tan bien.

-Sí, y también se me dan bien otras cosas...

-¿Qué estás insinuando?- Alcé una ceja,  divertida.

-Nada.-Fingió inocencia.

Reí antes de lanzarme a sus labios con ansia, mis manos se fueron a su nuca y él me arrastró hasta ponerme encima de su regazo, sentada a horcajadas. 

-Ya no tengo tanto sueño.-Le susurré al morder el lóbulo de su oreja.

Gruñó por lo bajo y me empujó hacia atrás, su cuerpo quedando encima del mío sin llegar a aplastarme. No perdió el tiempo en fusionar nuestras bocas.

Podría decir que esa noche solo fuimos él y yo, en la cama sin ropa, llenando la habitación de gemidos y caricias. No obstante, todas las horas de sueño acumuladas durante la última semana nos pasaron factura y antes de que nos percatáramos de ello, ambos caímos rendidos sin remedio.


*****

Lo sé, capítulo corto, cortiiiisimo.

Quedan alrededor de cuatro o cinco capítulos y ya sé que voy a escribir en cada uno de ellos, por lo que he tenido que cortar este aquí para que quede más ordenado.

He escrito este capítulo el día de mi cumple :D (02/09) A nadie le importa, pero bue xD. Aunque seguramente lo suba días después.

¡Espero que os guste! ¡Ya queda poco!

-Luuh

Divergente (Sin Guerra)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora