Al despertarme vi a Nathan aún durmiendo por lo que comencé a caminar hacia el baño sin hacer ni un ruido.
Al llegar al baño llevé ropa conmigo y una toalla, me di una ducha rápida, me cepille los dientes y me vestí. Después de salir del baño confirmé que Nathan seguía dormido.
Me acerqué hasta la puerta pegando mi oído en ella ya que había comenzado a escuchar algo detrás de ella, intenté identificar las dos voces, una era de mi mamá y la otra era una voz la cuál añoraba. Abrí la puerta de mi cuarto y ahí estaba, sentado en el mueble a lado de mi mamá hablando.
-Papá..- Los ojos se me llenaron de lágrimas ya que tenía varios años que no hablaba con el en persona, sólo por celular.
Mi padre reconoció mi voz y llevó su mirada hacia donde yo estaba mientras se levantaba del mueble.
Sin darme cuenta ya estaba caminando hacia él hasta estar lo suficientemente cerca como para poder abrazarlo.
Padre: Hola hijo, puedo ver que estás más alto que antes -Decía mientras también me abrazaba-
-Si..y tu sigues igual de alto que antes..-
Padre: Te eh extrañado Jackson, tanto a ti como a tu hermana.
-Nosotros también te hemos extrañado mucho- Poco a poco me separé de él mientras secaba mis ojos.
Padre: Estaba por salir a comprar el desayuno, me acompañas? Diría para ir junto a tu hermana pero al parecer aún está dormida.
-Si claro, vamos, ya regresamos mamá-
Mi papá y yo salimos del departamento, bajamos las escaleras y salimos a la calle.
-En dónde lo compraremos?-
Padre: Donde sea, cualquier lugar cercano puede ser.
-entonces sigueme-
Mi padre y yo nos encaminamos por la calle hacia el pequeño local que yo conocia para comprar el desayuno.
Padre: Tu mamá me dijo que Nathan se está quedando aquí en la casa.
-Si, así es, mi tía tenía trabajos o cosas que hacer y no tuvo más opción que dejarlo con nosotros-
Mi padre estuvo lejos de nosotros por motivos de trabajo, en la ciudad en la que vivimos la cuestión en trabajos está muy fea, tienes suerte si te graduas y logras conseguir uno rápido. Las características de mi padre son, su altura, mide más o menos 1.78, yo le llego casi por la quijada. Tiene cabello negro al igual que yo, ojos color café obscuro como yo. Mi mamá dice que yo soy la viva imagen de mi papá cuando era más joven, una vez me mostró una vez de él y decían que el parecido era impactante.
Padre: Y Jackson, que tal la has pasado este tiempo, tienes algo que me quieras contar?
-Bueno...la verdad no tengo nada que contar, sólo que eh mejorado en mis estudios-
Padre: Me alegra saber eso hijo y que tal la novia?
- N-no tengo novia..- Desvíe la mirada respondiendo a su pregunta.
Padre: -Soltó una pequeña carcajada- Ánimo muchacho, aún eres joven, ya encontrarás a alguien.
-Cambiando de tema, ¿te quedarás a vivir con nosotros?-
Padre: Bueno..ya hablé con tu mamá y ya conseguí un trabajo aquí apenas vine, así que la respuesta es si
-Que feliz me hace esa respuesta- Dije mientras volvía a abrazarlo
-Vamos rápido-Mi padre y yo seguimos caminando hasta llegar al pequeño local de comida donde compramos el desayuno y volvimos rápido al departamento.
Al llegar mi hermana y Nathan ya estaban despiertos, estaban junto a mi mamá sentados en el mueble, cuando mi hermana me vio llegar junto a nuestro papá se levantó del mueble y se tiró sobre él abrazandolo.
Kristel: Papá...No sabes cuánto te eh extrañado -Decía casi llorando-
Padre: Si lo se hija, si lo se -abrazó fuertemente a su hija- Tu también has crecido mucho
Dejé la funda que contenía las tarrinas con el desayuno sobre la mesa, mi madre lo vio y enseguida se levantó para servir.
-Oye mamá, más tarde saldré con Nathan, está bien?-
Madre: Si claro, pero no se vayan a tardar mucho.
-Entendido-
Mi madre sirvió nuestro desayuno sobre la mesa, todos nos sentamos a desayunar, pocos minutos después Nathan y yo terminamos de comer y nos levantamos de la mesa para dejar los platos sobre el fregadero.
Después de hacerlo me metí en mi habitación cambiandome de ropa poniéndome una camiseta roja con capucha y un pantalon Jean de color negro.
Nathan también se cambió de ropa, se puso una pantaloneta café de cuadros y una camiseta blanca con la imagen del rostro de un toro de frente.
-Vámonos-
Nathan asintió y salimos de mi habitación.
-Ya nos vamos, regresaremos más tarde-
Madre: Tengan cuidado y no regresen tarde, puede ser peligroso.
Ambos asentimos y salimos del departamento.
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Atrapado entre dos mundos
Science FictionJackson, un chico al que toda su vida le interesó todo aquello que todos consideran imposible. Pero nunca imaginó que él se convertiría en lo imposible.