31. "Problemas de pareja"

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Me encontraba en la última clase de matemáticas. Hoy acababa oficialmente el año escolar en Londres. La preparatoria me esperaba, al igual que las universidades. El tiempo había transcurrido demasiado rápido y muchas cosas habían sucedido en un solo año. No sabía lo que el futuro me deparaba, lo cual lo hacía aún más difícil. Tenía que encontrar algo que lograra apasionarme, algo en lo que pudiese ser buena sin sentirme rechazada. Desde que era una niña mis padres solían preguntarme ¿Qué es lo que quería ser cuando fuese adulta? y extrañamente lo sabía, pero a medida que  transcurrió el tiempo acabe por olvidarlo.

Me levante de mi asiento y me dirigí hacia el escritorio de la señorita Winslet para entregarle mi examen. Esta al verme levantó la vista y me observó por un momento, luego sostuvo el examen entre sus manos y lo recorrió con la vista, lo cual me hizo sentir nerviosa.

Entonces me volteé dispuesta a salir del salón, pero su voz me detuvo, lo cual me hizo tensarme. Esto no era bueno.

—Señorita Campbell—dijo seriamente.

— ¿Sucede algo? —me volteé.

—Nada por lo cual deba preocuparse. Créame—me aseguro.

— Entonces no lo entiendo.

—El examen, se encuentra totalmente respondido.

— ¿Y eso tiene algo de malo?—Le pregunte nerviosa.

—En absoluto, solo me ha sorprendido. A decir verdad, usted no suele destacar en esta asignatura, y a simple vista se puede apreciar que realizo todos los ejercicios, paso a paso, como correspondía. Lo cual no significa que estén correctos, por supuesto. De todos modos, valoro su esfuerzo—esbozo una sonrisa.

—Gracias—dije un tanto desconcertada, sin saber si esto se trataba de un cumplido o de una forma de decirme que no era buena en matemáticas sin importar cuánto me esforzara.

—Puede retirarse—me dijo finalmente, por lo cual salí del salón y me quede parada junto a la puerta. Recargue mi espalda contra la pared de cemento y deje escapar un suspiro.

—Espero que hayas obtenido una buena calificación—escuche decir de pronto.

—Lucas—dije algo sorprendida, al ver que se trataba de él.

—Tranquila, solo vine a despedirme—se llevo las manos a los bolsillos de su pantalón.

—A despedirte—repetí extrañada.

—Me iré de viaje, durante las vacaciones—le explico.

— ¿Adónde irás?

—Aún no lo sé.

—Ya veo.

Nos quedamos en silencio por unos segundos, sin saber que decir. Estar juntos se sentía extraño, era como si hubiesen pasado años, pero en realidad solo habían pasado un par de semanas desde nuestra última discusión, cuando le confesé la verdad. Desde entonces Lucas no había vuelto a asistir a clases, por lo cual no nos habíamos visto hasta ahora.

— ¿Por qué no has venido a clases Lucas? —me atreví a preguntarle al rato, rompiendo el silencio.

—Necesitaba alejarme—respondió.

— ¿Alejarte?

—No podía seguir aquí después de...—guardo silencio.

—Te perdiste los exámenes finales—le dije bajando la mirada, puesto que sabía lo que iba a decir.

—No Jessie, no lo hice. Mis padres se encargaron de hablar con la directora para que me permitiera rendirlos sin tener que asistir a clases—le explico.

ARCADIA: La Guerra por el EquilibrioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora