Entre las sombras (Alec Lightwood)

La rescaté entre una montaña de libros

(Perspectiva Ani)

-Bien- dijo antes de lanzarme otro golpe- no solo bloquees el golpe, trata de atravesarlo.

-¿Atravesarlo?- dije agachándome cuando uno de los golpes se acercó demasiado a mi cabeza- ¿quieres decir utilizarlo contra ti?

-Inténtalo- dijo lanzando un golpe a mi costado.

Utilicé la fuerza de su golpe que impactó en mi vara para impulsarme y dar una voltereta cayendo detrás de él, traté de golpearle la parte de atrás de las rodillas, pero fue más rápido y bloqueó el golpe.

-¿Qué ha sido eso?- preguntó refiriéndose a la voltereta, pero sin dejar de lanzar golpes.

-Una simple pirueta- dije consiguiendo golpear su costado en mi vara, hizo una leve mueca, pero se recompuso y me tiró al suelo golpeándome en la parte trasera de las rodillas- que no podré volver a hacer si me rompes las piernas.

Le golpeé en las piernas haciéndolo caer a mi lado, estaba enfadada porque me hubiese tirado de esa forma, así que me subí sobre él poniendo mi vara en su cuello,  me miró con los ojos muy abiertos.

-¿No sabes que no puedes lesionar a una bailarina?- dije enfrentándolo.

-Ahora eres una Shadowhunter, no te habría hecho ningún daño que no curase una runa- dijo girándose y quedando sobre mí- ¿así que bailarina?

-Así es y estoy a un examen de ser graduada y profesora- dije con la respiración acelerada- ¿podrías quitarte de encima? No eres lo que se dice precisamente ligero.

Alec se puso en pie y me tendió una mano para ayudarme a levantarme.

-No lo has hecho nada mal para ser la primera vez- dijo Alec colocando las dos varas en una estantería- mañana seguiremos.

-Gracias por la clase- dije con una pequeña sonrisa.

-Ahora que estás aquí eres mi responsabilidad, así que es mi deber enseñarte al menos lo básico para que puedas defenderte- dijo encogiéndose de hombros- ¿quieres que te lleve a la biblioteca?, tengo que irme a hacer una ronda por las afueras.

-Claro- dije asintiendo.

Lo seguí en silencio hasta llegar a una doble puerta de madera. Alec la abrió y quedé impresionada, había cientos de estantes repletos de libros, algunos se notaba que eran realmente antiguos.

-Puedes leer lo que quieras, pero te recomiendo que empieces por la historia de los Shadowhunters y las runas- me dijo señalando uno de los estantes- son de los primeros libros que todos debemos leer durante nuestro entrenamiento.

-Está bien- dije acercándome al estante que me señalaba.

-Tengo que irme, si necesitas algo pregunta a cualquiera del instituto- dijo Alec a mi lado- diles que te he traído yo y no harán preguntas.

-Muchas gracias- dije cogiendo uno de los libros antes de girarme a verlo- suerte en esa ronda por las afueras.

Por un impulso le di un beso en la mejilla antes de sentarme en uno de los sillones. Cuando fui consciente de lo que había hecho, elevé la vista para encontrarme a un Alec mirándome con los ojos muy abiertos y algo sonrojado antes de que se girase para salir de la biblioteca. No pude evitar reírme por su reacción, parecía un chico duro y se sonrojaba por un simple beso en la mejilla, realmente era muy lindo.

No sé el tiempo que estuve leyendo pero los libros que consultaba se comenzaron a amontonar en la mesita que había junto al sofá, había leído la historia de cómo nacieron los Shadowhunters, la organización dentro de los Shadowhunters, otro libro que trataba sobre sus armas y que debían poseer el nombre de un ángel, también leí a cerca de la unión parabatai y me quedé impresionada, me hubiese gustado encontrar una o al menos tener esa oportunidad, pero según el libro esa ceremonia solo se llevaba a cabo cuando eras un niño.