Entre las sombras (Alec Lightwood)

Te preocupa ¿verdad?

(Perspectiva Ani)

Entré en la cocina y me bebí una taza de leche con cereales, no me apetecía gastar mucho tiempo en prepararme un buen desayuno, tras terminar, fui a la sala de los monitores y a la de entrenamiento pero no había rastro de Alec o Izzy así que decidí ir a la habitación de Alec y comprobar si ya había vuelto.

-¿Alec?, ¿puedo pasar?- pregunté dando unos leves golpes a la puerta.

No recibí respuesta así que decidí abrir poco a poco la puerta, no había rastro de Alec aunque por el olor a su gel de baño había estado aquí hace relativamente pronto. Su estela estaba en la mesita de la cama así que debía volver a por ella, decidí esperarlo tumbada en la cama, estaba realmente cansada.

No supe en qué momento el sueño me venció, lo siguiente que supe fue que Alec estaba tumbado a mi lado en la cama, sabía que era él sin necesidad de abrir los ojos.

-Hola- dije acurrucándome contra su pecho.

-Hola- dijo Alec con su voz dulce antes de darme un beso en la cabeza.

-¿Todo bien?- pregunté medio dormida.

-No del todo, pero hablemos de ello por la mañana- dijo atrayéndome más hacia su pecho- ahora solo quiero descansar.

-Está bien- dije sin querer agobiarlo, se notaba que quería descansar y pensar tranquilamente en lo que fuese que le rondaba la cabeza.

Ambos nos quedamos dormidos en los brazos del otro.

Me desperté con unos golpes en la puerta, Alec estaba a mi lado y me dio un beso en la cabeza antes de levantarse para abrir, estaba tan a gusto que no quería mover ni un músculo.

-Alec, ¿has visto a Ani?- la voz de Izzy se escuchó desde el marco de la puerta.

-Está aquí Izzy- dijo Alec con una voz ronca al acabar de despertarse.

-¿No vais muy rápido?- preguntó Izzy con un tono burlón.

-No digas tonterías, solo hemos dormido- dijo Alec, no me hizo falta abrir los ojos para saber que se había sonrojado.

-Izzy- dije tratando de llamar su atención y evitar que torturase a Alec - ¿qué ocurre?

-Solo estaba preocupada- dijo Izzy entrando y sentándose en la cama junto a mí- no estabas en tu habitación, pensé que te habías ido.

-No lo haría sin despedirme y por lo que sé ahora este es mi hogar- dije para tratar de calmarla- ¿por qué me iría?

-No lo sé, pero nunca se sabe- dijo Izzy- vamos, levántate y cámbiate, quiero presentarte a Max y debes entrenar.

-Está bien- dije sonriéndole- ¿pero dónde está mi beso de los buenos días?

Izzy sonrió y me beso en la mejilla antes de salir de la habitación.

-Buenos días- dijo Alec sonriéndome- ¿qué tal has dormido?

-Como un bebé- dije devolviéndole la sonrisa - buenos días.

-¿Dónde está mi beso de buenos días?- dijo imitando mis palabras mientras se acercaba a mí y se sentaba a mi lado.

-Creo que, está muy cerca- dije acercando mi rostro al suyo lentamente.

Cuando estaba a punto de besarme me aparté y le sonreí divertida antes de lanzarme a su cuello y besarlo en el haciéndole reír.

-Buenos días, buenos días- dije besándole en el cuello y en la mejilla- buenísimos días.