John está en la entrada del hotel, con maletas en mano y la cabeza a punto de explotarle.
Tantas cosas en que pensar, su tía Mimi, la universidad y su hostigosa ex novia.Entra por las puertas giratorias, observa a su alrededor y antes de caminar deja salir un gran suspiro de puro cansancio.
Camina hacia el escritorio de la recepcionista.—buen día, ¿en que le puedo ayudar?—pregunta la señorita de cabello castaño.
—buen día. Tengo una reservación, soy John Lennon.La recepcionista busca en su lista de reservaciones y encuentra el nombre del castaño, toma las llaves de la habitación y se las entrega a John.
—que tenga una agradable estancia—sonríe la chica.
—gracias.John sube por las escaleras del hotel para llegar a su habitación, batallando un poco porque tiene dos maletas. Abre la habitación y la inspecciona con la mirada antes de entrar, cierra la puerta y deja las maletas a un lado de la cama.
Se tumba en el cómodo colchón y mira al techo, que por alguna extraña razón tiene un espejo, se mira a través de él y puede observar que tiene ojeras y se nota cansado.—¿que te pasa, Lennon?—se pregunta a si mismo.
Quiere dejar de pensar en sus problemas así que decide salir a pasear, vio una tienda de música en el camino. Ira ahí.
Se levanta con toda la flojera del mundo.Una vez en la tienda de música se dedica a pasar por los pasillos para observar que música hay. Pasa lo dedos buscando algo de buen rock 'n roll. Está tan concentrado en los estantes que no se da cuenta cuando choca con un chico.
—oh, lo siento—se disculpa el chico.
—no...—John levanta la vista—importa.El castaño observa que con el chico que acaba de chocar tiene una especie de diadema de brillos en la cabeza, no frunce el ceño ni nada, solo se le queda viendo.
—¿te gusta Elvis?—el chico apunta al estante.
—si, me encanta.
—a mí igual...John no puede dejar de ver el rostro de Paul y no sabe porque rayos, pero está seguro que no es por la diadema que tiene puesta él chico.
—no eres de aquí ¿verdad?—pregunta el chico.
—uhm, no. Solo vengo de vacaciones de verano, soy de Liverpool—responde John.
—¿y como te llamas?—sonríe el chico de la diadema.
—John Lennon.
—lindo nombre, yo soy Paul McCartney.John le sonríe a Paul, quisiera pasar más tiempo con él pero ahora si le preocupa su apariencia ¿que hace un chico con una diadema? Esa es cosa de chicas, no ha dicho nada porque es demasiado educado para hacerlo pero puede que Paul sea un enfermo o algo así. O podría ser una chico asombroso del quién podría ser su amigo, además vino a Blackpool a divertirse.
—¿quieres ir a tomar algo?—pregunta John por impulso.
—claro, pero yo te llevo porque tú no conoces aquí, vamos.Ambos chicos salen de la tienda de música, viendo hacia el frente y sin voltearse a ver. Siguen caminando hasta que llegan a un café muy pintoresco.
—te encantará este lugar—sonríe Paul entrando al establecimiento.
Toman asiento en una mesa al fondo. Rápidamente llega una chica de cabello negro con una gran sonrisa en su rostro.
—¡Paul! Hola.
—hola. Él es John Lennon—presenta Paul.
—hola—sonríe John.
—yo soy Freda ¿que van a pedir?.
—té—dicen los dos al mismo tiempo.Freda sonríe anotando la orden en una libreta.
—en seguida—se retira.—ella es dueña de este café—menciona Paul.
—vaya, debe de ser mucho trabajo.
—solo lo abre por las tardes pero como es verano abre todo el día.Freda trae las dos tazas de té y las deja en la mesa para luego irse a servir más mesas.
Paul toma su taza y la lleva a su labios, John nota algo aún más extraño que la diadema, Paul tiene las uñas pintadas de un color morado lila. Esto es demasiado y se asusta, lo que provoca que se ahogue un poco con té.
—¿estás bien?—pregunta Paul asustado.
—ajá—murmura John apenas deja de toser.Al terminar sus trazas de té, Paul insiste en pagar.
Caminan por las calles un poco húmedas por la lluvia de la tarde, ya que se pasaron la mayoría del día en el café de Freda.—¿y donde te estás quedando?—pregunta Paul.
—en un hotel.
—¿que? ¡No! Debes quedarte conmigo. No debes pagar nada, sólo ayudarme con la cena.¿Cocinar? Eso es para mujeres, pero por alojamiento gratis no importa mucho.
—¿en serio? No quiero ser una molestia—ríe John tímidamente.
—por supuesto, tengo habitaciones de sobra. Si quieres.
—de acuerdo.
—vamos por tus maletas entonces....
—¿eres rico?
—algo así.Paul y John están afuera de la casa de Paul. John está asombrado por lo grande que es la casa del chico.
Entran a la casa y John queda aún más asombrado cuando ve el interior de la casa: pisos de madera, un tapiz de flores y todo huele a fresas.—las habitaciones están arriba. Escoge la que quieras excepto la última del fondo, esa es mía.
John asiente y sube las escaleras, hay un pasillo demasiado largo con muchas puertas. No sabe cuál escoger pues tiene miedo de abrir una puerta y encontrar la colección de diademas de Paul o algo peor. Para no arriesgarse escoge la habitación que está a un lado de la de Paul.
Entra a la habitación y ve todo perfectamente acomodado, deja sus maletas y cierra la puerta para luego acostarse en la cama.
Este ha sido un día muy largo, pero sin duda uno de los más divertidos que ha tenido desde hace mucho tiempo.
Poco a poco se queda dormido.Paul se dirige a su habitación y no puede contener la curiosidad de abrir la puerta, toca algunas veces pero no recibe respuesta, abre un poco la puerta y ve a John dormido, tiene un buen perfil. Rápido cierra la puerta y se dirige a su habitación para dormir.
Sin dudas este fue un gran día para los dos.
===========================
¿Les gusto? Espero que si:D
Gracias por el apoyo🙏🏼❤
Cada capítulo será un día, entonces serán como 60 capítulos, porque serán dos meses de vacaciones, aveces pasara tiempo pero yo lo pondré.Sigan leyendo7u7
ESTÁS LEYENDO
McLennon-Verano En Blackpool
FanfictionJohn está cansado de todos los problemas que tiene en Liverpool, entonces decide irse de vacaciones de verano a Blackpool, para descansar un poco. Pero nunca imaginó que conocería una nueva forma de ser y ver 1964. -¿me entiendes?-sonríe Paul. -creo...