Tentación criminal #1

Capítulo 5.

Le paso la brocha a Ronan y me mira como si tuviera un tercer ojo.

-Hay que pintar un poco la recámara donde te quedarás, yo la mitad y tú la otra - asiente con algo de pesadez y empezamos a pintar.

Mi departamento es blanco, por lo tanto siempre está iluminado y bien ordenado.

-Oye, cuando termine de pintar la mitad que me toca iré donde mi mejor amigo por algo de ropa y dinero.

-Vale, iré contigo, y no quiero que protestes.

Bufa pero sigue pintando, la verdad la recámara no es grande y ya estaba medio pintada, solo nos toma poco tiempo dejarla lista. Me mira al dejar la brocha en el bote de pintura vacío.

-Deberías ponerte algo cómodo, de donde soy no hay muchas chicas como tú - me dice mientras vuelve a sentarse en el sofá.

-¿Qué quieres decir con chicas como yo?

-Bueno, allá no son finas y refinadas, lo mejor será que yo vaya solo.

-Yo no soy así, he pasado por muchas cosas y aprendí a formarme sola. Iré contigo, no está en discusión, vuelvo en cinco minutos.

Enciende la televisión y mientras me voy hacia mi cuarto. Elijo unos jeans oscuros, una chaqueta blanca y unas zapatillas deportivas blancas. Tomo las llaves del departamento, las del auto y mi móvil con algo de dinero.

-Listo, ¿nos vamos? - me mira de pies a cabeza y sonríe.

-Claro, no sin antes decirte que estás hermosa vestida así.

Le sonrío como agradecimiento por el halago y bajamos hasta el estacionamiento del edificio.

-¿Puedo conducir ésta vez? - su pregunta me pilla desprevenida.

Me lo pienso unos segundos, nunca dejo conducir a nadie mi auto pero esta vez haré una excepción.

-Está bien - le doy las llaves y me abre la puerta del copiloto en un acto caballeroso.

Entra al auto y después de ponernos el cinturón lo arranca. Pongo algo de música y empiezo a tararear una canción que sale por la radio.

-Grace, ¿porqué la habitación donde me quedaré no tiene baño?

Me río por su pregunta.

-Los antiguos habitantes eran una pareja de recién casados, y bueno, obviamente se duchaban juntos o por lo menos en el mismo baño, y mi habitación es la que lo tiene.

-¿Eso quiere decir que me ducharé en tu habitación? - su sonrisa pervertida no decía nada bueno.

-Supongo, pero habrá horarios para que lo hagas.

-Podríamos tomar la ducha juntos, ya sabes, para ahorrar agua.

Me da una mirada rápida antes de volver a mirar al frente.

-En tus sueños, Davis.

Sonríe socarronamente.

-Cierto, tú siempre estás en mis sueños.

Ignoro lo que dijo y me volteo hacia la ventana, eso hasta que llegamos a un fraccionamiento algo normal, por así decirlo. Bajamos del auto y Ronan me guía hasta una de las pequeñas casas de color beige. Mi acompañante toca el timbre y cuando la puerta se abre aparece un chico muy atractivo del otro lado.

-¿Bro? - pregunta el chico con algo de sorpresa.

-Soy yo, hermano - ambos se dan un abrazo muy afectivo y al separarse me miran.

-Hola - el chico se dirige hacia mí y le sonrío amablemente.

-Hola - contesto con simpleza.

-Ella es Grace, mi abogada - habla Ronan y el chico sonríe. - Y bueno, él es Derek, mi mejor amigo.

Pasamos a la casa y ahí dentro los chicos empiezan a charlar mientras yo observo a mi alrededor. Al parecer ellos vivían juntos, pues hay varias fotos donde están los dos y todo se ve muy masculino.

-Preciosa, ven con nosotros - asiento y los tres subimos las escaleras hasta llegar a una habitación con la puerta gris.

Platico un poco con Derek mientras Ronan mete algo de ropa y otras cosas en una valija.

-Eres muy linda, Grace.

Le sonrío con algo de pena, pocas veces los chicos son tan directos conmigo.

-Gracias, Derek.

-Hey, hermano, estoy en plan de conquista con ella, no empieces.

Reímos y le niego a mi compañero de piso.

-Pues vas muy mal, cariño - le respondo con una sonrisa.

-Venga, me has dicho cariño, eso no es ir mal, según mi criterio.

Después de pasar unos minutos más en casa de Derek, decidimos volver al departamento. Subimos por el ascensor y al salir abro la puerta de la entrada.

-Prepararé algo para cenar, mientras puedes ducharte, si quieres - le digo y asiente.

-¿Puedes venir un momento? - me acerco lentamente a él y saca un sobre del bolsillo de sus jeans.

Me lo extiende y lo tomo algo confundida.

-¿Qué es esto?

-Es dinero, por lo de la fianza y una parte de tus honorarios. Oh, también hay algo extra para los gastos que genere en mi estancia aquí.

-Ronan, no es nece... - me interrumpe antes de que termine de protestar.

-Sólo acéptalo, no me sentiré bien si no lo haces.

-Vale, gracias entonces.

Realmente me parece un acto muy dulce de su parte al pensar en darme dinero por todo lo que he hecho últimamente, eso es algo que no me esperaba.

-Iré a desempacar y después me doy una ducha.

-Adelante, estaré en la cocina por si necesitas algo.

Camino hasta la puerta de la cocina y me detengo al oír que me llama:

-Grace, podemos ducharnos juntos, preciosa.

Suelto una risita y seguido le muestro mi dedo del medio.

-Ganas tienes.

-Y muchas - responde con una mirada pervertida.

Le lanzo un cojín que estaba tirado en el piso y lo esquiva con una agilidad impresionante.

-Púdrete.

Entro a la cocina y alcanzo a escuchar como suelta una carcajada desde el living.

Bueno, acepto que tal vez he pensado mal al creer que sería difícil vivir con Ronan, creo que más bien será divertido.

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¡Hola!

Sé que es algo tarde, pero no las quería dejar sin su dosis diaria de Ronan.

Espero que les haya gustado el capítulo, voten y comenten, sin miedo. xD

La cosa se va poner buena de ahora en adelante, así que estén preparadas para lo que pueda pasar.

Ya nos leemos.

¡Besos!