Tentación criminal #1

Capítulo 17.

Le doy una mordida a la manzana que tengo en la mano y camino hasta sentarme al lado de Ronan.

-Ro, estaba pensando en ir al centro comercial, mi armario está algo pasado de moda y creo que necesito más vestidos, ¿vienes conmigo? - toma la manzana de mi mano, dándole una mordida también y luego me la devuelve.

-Claro, igual yo también necesito algo de ropa, así aprovechamos - me besa la mejilla y sonríe.

Voy por mi bolso y luego ambos salimos hasta el estacionamiento. Conduzco a velocidad normal, mientras Ronan rapea algo de Eminem. Suelto una carcajada al ver a unos niños hacer muecas ante la voz del chico.

-Cariño, estás arruinando la canción, todo el mundo se puede dar cuenta de eso - finge llorar y hacerse el ofendido.

-Qué aburridos - dice y vuelvo a reír.

Llegamos al centro comercial y luego de estacionar el auto empezamos a ver todas las tiendas. Ronan entrelaza nuestras manos, un pequeño gesto que hace que mi corazón se pongo a latir a tal grado de querer salirse de mi pecho. Seguimos caminando y optamos por ir a la tienda de hombres primero.

-Hola, ¿buscan algo en especial? - la chica pelirroja que atiende le sonríe a Ronan.

-Realmente sólo quiero unos cuantos cambios de ropa, algo con estilo - asiente y le guiña un ojo.

-Sígueme - el chico me observa.

-¿Vienes? - me pregunta y rápidamente me afirmo a su brazo.

-¿Crees que te dejaré solo con esa chica que parece que te está desvistiendo con la mirada? No, gracias, nadie se queda con mi chico.

Sonríe abiertamente.

-Diablos, ese lado tuyo de Grace celosa-posesiva como que me excita - reímos y avanzamos detrás de la chica.

Le pasa una cuantas remeras, jeans y chaquetas oscuras para que se las pruebe, le asiento para que vaya.

-¿Sabes si el chico tiene novia? - me pregunta la chica y me sorprendo un poco.

<<Qué zorra>> pienso, pero por ser respetuosa no lo digo.

-Sí tiene, de hecho, estás hablando con ella - le sonrío con suficiencia, ella aprieta la mandíbula.

-Bueno, pues no dudo que teniéndome enfrente ya no quiera seguir estando contigo - señala su cuerpo con una sonrisa asquerosa, así que me acerco a ella hasta quedar justo frente a frente.

Bien, ya fui bastante considerada, es hora de sacar a la Grace perra.

-Aléjate, zorra, él no es para ti - escupo las palabras y ella se da media vuelta, sacando chispas de lo furiosa que está.

Me siento en un sofá que hay cerca para esperar a Ronan, justo unos segundos después sale vestido con un conjunto gris deportivo.

-¿Te gusta, preciosa? - se gira hacia atrás, dándome una perfecta vista de su bien formado trasero.

-Me encanta - respondo con una sonrisa pícara.

-Luego dices que soy yo el que te ve el trasero - reímos. Vuelve al probador y luego de unos minutos sale con toda la ropa en manos.

Pasamos a pagar a la caja y seguido de eso entramos a una de mis tiendas favoritas de vestidos.
Marlene, la chica que atiende y es mi amiga, rápidamente se acerca a saludarme.

-Grace, qué gusto tenerte acá, veo que vienes bien acompañada - sonríe y Ronan le saluda con la mano.

-Ya vez que sí, necesito vestidos nuevos y qué mejor que en mi tienda preferida - reímos y nos adentramos en la tienda.

-Tengo unos modelos sencillos y elegantes que te van a encantar, vamos a verlos - la sigo por el pasillo y bueno, me he enamorada de todo lo que hay aquí.

Toma unos cuantos vestidos y los lleva hacia el probador. Me acerco a Ronan y le sonrío.

-Precioso, iré a probarme los vestidos, ya vuelvo - sonríe y me toma de la cintura.

-Eso de 'precioso' me gusta. - me besa dulcemente y luego se aparta para guiñarme un ojo. - Si necesitas ayuda me avisas.

Me voy al probador entre risas y veo que Marlene escogió como diez vestidos. Empiezo a ponerme cada uno, apartando los que me gustan y los que no. Justo cuando estoy por probarme el sexto, la puerta de la pequeña habitación se abre y me cubro con uno de los vestidos. Ronan sonríe y me toma de la cintura.

-Tranquila, soy yo. Tú amiga es difícil de alejar, tuve que decirle que le conseguiría una cita con Derek, estoy seguro que va matarme cuando se entere - me río contra su pecho.

-¿Para qué querías entrar? - le pregunto.

-Preciosa, estás en bragas y todavía lo preguntas - empieza a besar mi cuello, haciendo que me aferre a sus hombros.

-Davis, espera a que lleguemos a casa, aquí no - niega mientras sigue besando esa zona sensible de mi cuerpo.

-No, quiero hacerlo aquí, y sé que tú también, hay que aprovechar, no tenemos mucho tiempo.

Tomo el cuello de su camisa y lo atraigo hacia mí para besarlo. Sus labios se mueven con fiereza sobre los míos, haciendo que ambos queramos más del otro. Se deshace de mi sujetador, luego se da gusto masajeando mis pechos, haciéndome jadear con deseo. Quito su camisa y la dejo en el piso, acariciando con mis manos su abdomen, llegando hasta el botón de sus jeans. Él termina de quitarse el pantalón y se lleva al bóxer en el camino, quedando totalmente desnudo frente a mí. Me quito mis bragas y paso mis brazos por su cuello.

-Preciosa, no tendré compasión, así que intentaremos no ser tan ruidosos, ¿vale? - suelto una risita traviesa contra su cuello.

-Vale.

Me levanta del piso, poniendo sus manos en mi trasero desnudo, mientras que yo lo rodeo por la cintura con mis piernas. Me besa lenta y apasionadamente, y sin decir más, se adentra en mí de una sola estocada. Ahogo un grito sobre sus labios, mordiendo su labio inferior. Entra y sale de mí con rudeza, causando que ambos jadeemos de placer. Seguimos disfrutando de lo bien que se siente tener sexo de esta manera, con mi espalda contra la pared de la habitación y con sus susurros en mi oído.

-Joder, se siente tan bien estar dentro de ti - murmura y como no confío en la estabilidad de mi voz, simplemente me limito a besarlo.

Siento los espasmos apoderarse de mi cuerpo, así que me aferro a los hombros de Ronan. Vuelve a moverse contra mí cada vez más rápido, mi cuerpo tiembla y tengo que morder uno de sus hombros para no gritar. Después de unos segundos él también alcanza el orgasmo, acabando dentro de mí, luego se sienta en la pequeña banca que hay en el probador, conmigo a cuestas. Su piel ligeramente cubierta por sudor y su delicioso aroma varonil lo hacen ver demasiado sexy.

-Ro, esto fue genial, no sé, deberíamos experimentar en más lugares y en otras posiciones - ríe y esconde su cabeza en mi cuello.

-Ves, te dije que contigo iba aprender muchas cosas, hasta ahora no me he equivocado - reparto besos por su mandíbula.

-Te quiero - murmuro contra su oído.

-Y yo a ti.

Lo abrazo por el cuello, sintiendo los acelerados latidos de nuestros corazones.

Es difícil admitirlo, pero creo que me estoy enamorando.

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¡Woola!

Dios, son tan lindos, y amo tanto a Ronan. Preciosas, sé que es algo tarde, pero aquí está su dosis de Gronan.

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Ya las leo. Recuerden que las loveo.

¡Besos!