Gemelos [EDITANDO]

Gracias

  Marcos miraba la ventana pensando en cuando  volvería ver a Natalia. Había pasado un año desde que no la vuelta a ver...estaba preocupado por ella. Miró sus manos que tenía marcas de inyecciones, el estrés lo invadía cada vez más y no quería que eso ocurriese. Miró la puerta donde su hermano menor corría para abrasarlo, no podía evitar sonreír por la ternura de su hermano menor. Los padres le dieron un papel para que dibujara mientras que ellos hablaban con Marcos.

  —Te hemos visto raro desde que conociste a esa chica.—contó su madre con un tono preocupante.

—¿Hubo algo entre ustedes?—preguntó su padre tranquilamente mientras se sentaba en el incómodo sofá.

—Solo quiero verla.—es lo único que respondió el chico.

—¡No me digas que tenías una relación con la pobre chica, Marcos!—decía su madre al borde de las lágrimas.— Desde que comenzaste a quejarte de dolor, tu padre y yo sabíamos que tenías Cancer pancreático.

—Mamá, tranquila.— dijo Marcos mientras tomaba la mano de su madre.

— Marcos, nos duele de que tal vez tenga pocos días de vida.—hizo una breve pausa mientras se limpiaba las lágrimas.— Pero lo más que me dolerá es saber que la chica sufrirá más que nosotros.

—Conozco a Natalia bastante.—dijo el chico de cabello rizado.— Ella es fuerte.

—¿ Porqué no las has llamado?— preguntó su padre.

                             🛡🛡

  Damian se limpiaba el sudor que tenía por todo su rostro, tomó su botella de agua y beber de esta. Un sonido lo hizo mirar hacia el celular de Natalia, este lo tomó para mirar el mensaje que provenía de Marcos.

  ¿Estás ocupada?...Necesitamos hablar.

El niño engreído miró a su gemela que estaba entrenado, dudó en contestar alguna grosería al tal Marcos pero lo dejó pasar solo por hoy. Una vez que terminó, la chica tomó su celular, miró el mensaje marcó el número y esperó hasta que él contestara.

  —¿Natalia?—preguntó Marcos con una voz débil.

—¿Ocurre algo?

  El pre-adolescente le explico sobre su condición terminal. Ella no sabía qué decir o reaccionar. Agarró sus cosas, fue a buscar su moto y fue directamente al hospital. Una vez logrado habló con una enfermera para informara donde se ubicaba el pobre chico.

  —¡Mami mira es la novia de Marcos!—expresó su hermano con una alegría en su rostro al ver la chica apuntó de abrir la puerta.

Los padres miraron el rostro serio de esta. No parecían convencidos de que su hijo tuviera una relación con una jovencita "amargada". No había tiempo de qué pensaran de ese modo de ella ya que estaban en una situación de vida o muerte. Marcos no podía dejar de sonreír al ver a la chica de ojos azules presente.

   —¿Dónde estuviste?— preguntó este mientras tomaba la mano de esta con firmeza.

  — Scotland—respondió sin mucha importancia.—¿Cuánto tiempo?— preguntó mientras miraba las máquinas que tenía en su alrededor.