Habíamos dormido como un par de bebés, Alice durmió todo el tiempo como nosotros, porque no la escuché ni una vez llorar. Me levanté de la cama para ver la cuna de Alice y mi alma abandonó mi cuerpo cuando vi el lugar vacío.
—¡Alice no está! —grite muy alarmada. Chazz se levantó rápido de la cama y se puso sus pantalones. Salimos lo más rápido que pudimos de la habitación.
Mi corazón estaba palpitando fuertemente y podía escuchar el de Chazz que estaba de igual manera. Nos detuvimos de golpe cuando por el pasillo de la cocina venía la señora Walker con nuestra hija en manos. Ambos respiramos profundamente y nos acercamos a ellas.
—Nos has dado un susto de muerte mamá. —murmura Chazz cuando estamos frente a ellas. Alice tenía un pequeño biberón en su boca, y lo disfrutaba tanto como si fuera de mí pecho. Acaricie su mejilla y ella me miro. Sus ojos azules me observaron, sin dejar de tomar su leche.
—Estaba llorando y pensé que ustedes necesitan un descanso, pero ahora tengo que salir así que..., es de ustedes de nuevo. —Chazz la toma mientras estabiliza el biberon de nuevo en sus labios.
Alice se quedo dormida de nuevo. Desde que nació no hace más que dormir, pero creo que es por sólo tener dos semanas, aún se está acostumbrando al nuevo ambiente que la rodea. Todos los que nos importan la conocen, mis amigas y los de Chazz, la familia más cercana y la manada.
La primera transformación de un hombre o mujer lobo es a los dieciséis, sólo que desde que eres pequeño te enseñan manera de controlate en la luna llena, porque sin transformación o no, los instintos asesinos crecen a medida que pasan los años y de igual manera quieres destruir algo o a alguien.
Por el momento, Alice sólo se sintió incomoda con su primera luna llena, quizás el próximo año empiece a querer gritar o romper algo. Cada año es más violento, por eso cuando ya se está grande no se puede descontrolar, porque sino, puedes matar a varios ánthropos.
Estaba en mi hombro, tratando de sacar sus eructos, que difícilmente lograba sacar y aveces le daban cólicos. Alice es lo que más amo en el mundo, y por ella me haría matar y mataría si fuera necesario, porque prefiero que me pase algo a mí antes que ella. Fue un proceso difícil el lograr traerla al mundo y ahora no quiero que se aleje. Ambos son mi vida ahora.
(•••)
Chazz dio un anuncio para una reunión con toda la manada. Estábamos todos en una mesa, a excepción de Alice y de la señora Walker que se quedo cuidandola, Chazz estaba dando la información sobre el tema con los vampiros. Yo soy quien da la aprobación de lo que se puede y no hacer.
—Hace unos días encontramos la guarida de los vampiros, ellos no lo saben, y estamos preparando una cruzada para reclutar a los que más podamos, necesitamos la aprobación de todos.
Todo el jurado dio un sí como respuesta. Todas las miradas se dirigieron a mí. Torci mi boca mientras miraba a Chase.
—La orden es concedida. —sentenció el anciano cuando di mi respuesta.
Las luces empezaron a parpadear cuando ya todos nos estábamos levantando para dar por concluida la reunión. Chazz me ayudó a levantar rápido para intentar salir, pero las luces se apagaron, dejando escuchar gritos y sonidos extraños en todo el lugar. Me asusté al no sentir la mano de Chase en la mía.
Una mano se envolvió en mi cuello y me jaló con una fuerza descomunal, su otra mano se posó en mi boca para evitar que pudiera hacer algún ruido. No pude soltarme de su agarre, ni siquiera enterrando mis garras y colmillos en las manos del tipo desconocido.
Cuando salimos a la calle pude ver que también arrastraban a mamá, la abuela y a Channel. Quienes intentaba soltarse inútilmente de las cosas negras que estaban detrás de nosotras. La voz de Chazz se escuchó en mi mente.
—¿Dónde estás, Be? —su voz retumbo y por un momento me sentí mareada.
—No te preocupes por mí. Necesito que vayas a la casa y cuides que a Alice no le pase nada. Encontraré una forma de escapar. Te amo. —cerré la conexión.
Nos subieron a las cuatro en una camioneta, todo era de metal y nuestras fuerzas no son del todo potentes, menos cuando están haciendo respirar un humo raro, que cuando menos pensamos, nos hizo caer inconscientes.
Mis ojos se abrieron con pesadez, por la luz que cegaba mi vista. Intente moverme pero mis manos estaban atadas, y mis pies no tocaban el piso. Levanté mi vista y pude ver a mi mamá, hermana y abuela. Ellas estaban igual de confundidas que yo. Las manos me estaban doliendo, en especial las muñecas. Mire hacia arriba e intente desatar la soga que me mantenía en el techo.
Un par de aplausos en seco retumbaron en el cuarto y gris, lleno de moho. Miré de donde provenían y gruñí al ver al tipo de hace unos meses con una sonrisa sinica y burlona en su rostro. Detrás de él venían otros seis vampiros.
—¡Miren a quien tenemos aquí! —dijo con fingida emoción—, ¡la mujer del alpha!
—¡Miren a quien tenemos aquí! —lo seguí—, ¡el jodida idiota de hace unos meses! —una corriente eléctrica recorrió todo mi cuerpo y simplemente pude reír mientras miraba al tipo ese—. ¿Es lo mejor que tienes? No creo que hacerme reír sea lo mejor que tienes, chupa sangre.
Un tipo intento acercarse pero él lo detuvo—. Aún no, Carl.
—Sí, Carl. Sigue obedeciendo al idiota de tu "líder".
—¡Behati! —las mujeres a mi lado me retaron pero no las mire, simplemente me quedé mirando esos asquerosos ojos negros.
—Lo olvidaba, Behati. Olvidé por un momento que eres más fuerte que ellas, tu evolucionaste antes, pero ellas no han logrado hacerlo. —apretó un par de botones y ellas empezaron a gritar de dolor.
—¡Bien, bien!, ¡me voy a quedar cayada! —él sonrió y ellas se quedaron cayadas, sólo con algunos quejidos.
El tipo empezó a caminar a nuestro alrededor, yo lo miraba furiosa. Nos dio la espalda y miro a su compañía mientras nos señalaba.
—Miren, queridos amigos —nos señaló con su mano—. Aprecien a las últimas descendientes de la manada originaria de Wilmors.
(***)
Espero que les guste este capítulo. Estoy tratando de actualizar lo más pronto que pudo. Quizá si no he terminado la historia para vacaciones pueda actualizar más de seguido. Los invito a pasarse por mi otra historia y no olviden darme su voto y un comentario si les gusta.
Los quiere.
Italia.
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Mi mate el alpha
WerewolfAdvertencia: Esta historia no está editada y la escribí cuando tenía unos catorce años, así que me disculpo de antemano por el final y la horrografía, espero tener pronto el tiempo de editarla y mejorar la calidad de la historia. • Simplemente sentí...