¿¡Hermanas!? ♦❇Yui Komori❇♦ Una Nueva Amenaza

Cap. #11

Hikari se la paso leyendo el diario en su habitación, toda la noche, sin sentir sueño alguno. Totalmente concentrada en las letras escritas en aquellas páginas amarillentas, sintiendo que leía algún tipo de novela de ficción por su fantasioso contenido y Desconectandose del resto del mundo. sin darse cuenta cuando el sol había salido.

Sonó su puerta, más ella no se tomo la molestia ni para responder o preguntar quien era. Por lo que uno de sus chaperones.

— Hey, Desde que llegaste ayer no te haz delega de ese libro—

La chica se quedo en silencio.

—¿por no te haz empezado a arreglar todavía?—

Dijo algo molesto el hombre de rasgos delicados al verla en sus ropas cómodas.

—¿arreglarme... Saldremos a algún lugar acaso?—

Respondió ella distraída, mientras pasaba la página y seguía leyendo con detenimiento, a lo que este respondió.

—¿de que hablas? No me dirás que lo olvidaste ¿o si? —

Dio un gran suspiro, fue hasta el armario de la chica y de allí saco un atuendo colgado en un gancho. Hikari se giró, abrió los ojos como platos y se levantó rápidamente.

—¡es verdad! ¿Como pude olvidarlo?—

Dijo bastante emocionada, tomando el uniforme, luego su chaperón salió de la habitación para dejarla vestirse.

Se puso poco a poco su camisa Blanca, manga larga y de botones; una corbata negra; una falda de tablilla del mismo color, hasta unos 6 dedos más arriba de las rodillas; medias blancas hasta el borde de la flada; unos mocasines escolares de cuero negro y por último una hermosa chaqueta carmesí que combinaba con su mochila.Con su cabello semi-rrecogido.

Se vio al espejo y después de dar un par de vueltas para asegurarse de la buena impresión que daba su apariencia, vio el reloj que marcaba la [1:30 p.m] bajó las escaleras corriendo, y salió de la casa para subirse al auto de su otro chaperón, y luego arrancar.

Después de un rato llegaron a una institución muy lujosa a simple vista. Al bajarse, se despidió y entró al edificio, caminó por los pasillos ni había nadie en ellos, todo el mundo estaba en sus salones, eso le permitió apreciar mucho mejor los pasillos impecables de aquel lugar.

Después de ir a su nuevo salón y presentarse con todos sus compañeros. las clases comenzaron, pero a pesar de ser su primer día, la chica no pudo prestar atención en ningún momento al estar pendiente de seguir leyendo.

"Desde este momento en adelante deben estar muy alerta de todo lo que les rodee, recuerden que nada es lo que parece"

En ese momento le llego a la cabeza el momento justo en el que aquella cosa salió de la muñeca de porcelana, estremeciendola .

"todas las cosas por indefensas que parezcan, pueden esconder su verdadera naturaleza.

Con esto, puedo comenzar a explicar el problema más grande te todo esto"

Paso la página para encontrarse con un dibujo, era extraño: una silueta negra y la misma en blanco al otro lado, con una mujer en medio con ambos brazos estirados unidos a cada una de las mismas.

"Desde comenzamos a descubrir el mundo, nós han hablado sobre un cielo y un infierno y todos los individuos que estos poseen.
aunque no lo parezca todos estamos conectados entre sí. Nuestra alma se encuentra en un punto medio, un punto medio que nos mantiene entre el descanso eterno y el abismo. Y nosotros somos al final, los que deben elegir cual de ambos senderos tomar"