¿¡Hermanas!? ♦❇Yui Komori❇♦ Una Nueva Amenaza

Cap. #38 Origenes 4ta entrada

El salón estaba en completo silencio. Muchos sentimientos flotaban en el aire, haciendo un pesado ambiente. Las mellizas estaban estáticas, agradecían estar sentadas porque seguramente la impresión las derribaria, era algo muy increíble, escuchar lo que habían acabado de escuchar era alucinante. Bueno, no todos los días te enteras que tus padres pertenecían a un clan de míticos guerreros después de todo. Pero faltaba una parte de la historia. 

— ¿Entonces que pasó? — Preguntó Yui dando un profundo respiro — Después de que ellos escaparon ¿A donde fueron? 

— Fueron lo más lejos que les fue posible y gracias a un contacto en el exterior, lograron entrar a aquí a Japón — explicó Kannon serio — estaban decididos a comenzar de cero. Tendrían una vida normal, usarían el apellido de Bastian y vivirían bajo perfil, ellos junto a esos dos amigos que también habían escapado.

— Ustedes son esos dos amigos ¿Verdad? — Dedujo la castaña. 

— Así es. Conseguimos una casa vieja en la ciudad. Lo suficientemente grande y lo necesariamente alejada de la vida agitada. Era perfecta según tus padres — Lo último lo dijo acompañado de una sonrisa — No tardaron mucho en acostumbrarse al estilo de vida en ese lugar. Pacífica y ordinaria. A pesar de todo lo horrible que pasaron, parecían bastante felices en ese momento. — El pelinegro se tomó un momento para ver a ambas chicas — Y esa felicidad se colmó cuando Miyori se enteró que estaba embarazada.

— aún recuerdo esa noche — Intervino Kottan con la nostalgia invadiendole. 

— Entonces ustedes nacieron. Todo indicaba que las cosas estarían bien — entonces su sombrío rostro volvió, más malas noticias venían — Durante los meses del embarazo de su madre cosas extrañas comenzaron a pasar, al comienzo no quisimos creerlo, pero estaba pasando. De alguna manera nos habían encontrado y eso comenzó a afectarnos a todos — Dió una pausa para dar un suspiró cerrando con fuerza los ojos — y ustedes, como se esperararia de descendientes de Shingetsu, su energía era demasiado fuerte, a pesar de ser solo bebés. Kottan y yo sabíamos que eso los atraería como un imán.  debíamos escapar, dejarlo todo como estaba y huir lejos. Pero sus padres se negaron, ellos estaban seguros de que podríamos vencerlos si permanecimos juntos.

A las chicas no les estaba gustando por donde estaba yendo todo. Los recuerdos volvían a invadir su cabeza, aquella noche que lo atormentará por siempre estaba reviviendo en sus palabras.

•
•
•
•

Los padres de las chicas no pensaban seguir escapando para siempre ¿Qué clase de vida les darían a sus pequeñas? Siempre huyendo y con temor por algo de lo que ellas no tienes la culpa. No lo harían, para poder ponerle fin a aquella pesadilla lo enfrentarían de una vez por todas,
a diferencia de sus amigos que estaban seguros de que sus vidas corrían riesgo con cada segundo que se quedarán allí.

Aquella noche, como muchas veces antes, se había desatado una fuerte discusión, en la que se tomó una decisión que ambos hombres lamentarían por el resto de sus vidas. Unas cosas llevaron a otras, palabras hirientes venian de ambas partes, cosas que en realidad no pensaban salieron a la luz. Al final, Kannon y Kottan decidieron irse. Habían logrado escapar de aquel infierno donde lo habían perdido todo, no volverían a pasar por algo así por la terquedad se sus amigos.

Entonces solo salieron por la puerta y se fueron de allí.

A pesar de que los días pasaban, y pasaban y pasaban sin contemplación. Bastian y Miyori jamás perdieron la esperanza de que ellos volverían y así podrían arreglar todo lo que había pasado. Esperaban que en cualquier momento pasarán por la puerta para recibirlos con un abrazo y sinceras disculpas. Pero alguien se les adelanto.