¿¡Hermanas!? ♦❇Yui Komori❇♦ Una Nueva Amenaza

Cap. #35 Origenes 1era entrada

Pov Kannon.

El momento había llegado. El momento que por años espere que no llegara, él lo había predicho desde el comienzo y estúpidamente pensé que podría... Cambiar las cosas. Evitar que ocurriera. Pero valla que estaba en un error. Esa noche me atormenta cada uno de los días de mi existencia y ya me habia acostumbrado de huir de mis memorias. Pero... Tal vez Kottan tenía razón, ya era hora de liberarme de este peso. Ahora que estás niñas estaban en nuestras manos. No esxistia otra salida.

Pasamos por el portal hasta el templo y en silenció nos dirigimos a la habitacion de las armas. Siempre he detestado está maldita parte del templo, totalmente destruida tu vieja, casi podría escuchar los gritos y ver el fuego y la sangre ante mí.

- ¿Que es este lugar? - pregunto el pequeño chico con grandes ojeras a mis espaldas.

- Después habrá tiempo para más preguntas. A lo que vinimos - Corto Hikari, mientras la puerta se cerraba detrás de sí.

Con un suspiro estado comencé a hablar tal y como los recuerdos me lo dictaban.

- Esto no será nada fácil de oír. Así que deben prestar mucha atención...

•| ⊱✿⊰ |•

Esto comienza desde mucho antes de que cualquiera de nosotros siquiera pensará en existir. Desde el inicio de todo, cuando aun el tiempo era nuevo, la batalla del bien contra el mal ya había iniciado. Los más antiguos libros de historia cuentan el como fue librada la mayor de las batallas que alguna vez la humanidad podría presenciar "La guerra santa" Dónde el futuro de la humanidad sería debatido entre los que deseaban verla arder y los que juraron protegerla.

Pero hay algo que los libros nunca mostraron. En está batalla, hubo tres ejércitos fuertes involucrados: Los ángeles. Los desterrados. Y el ejército del hombre, dónde guerreros de todo el mundo lucharon lado a lado, la única vez en que todas la naciones se unieron en armonía por un bien común. muchas vidas se perdieron, lo que resultó en un número ridículamente pequeño de sobrevivientes.

Luego de largos años de miseria y dolor. Por fin la guerra había culminado y la humanidad, aliada con los guerreros del cielo, habían logrado una amarga victoria. Cualquiera creería que la paz había vuelto al mundo, pero durante la batalla, muchos de las bestias liberadas del inframundo escaparon y esparcieron el caos por el mundo.

¿que pasaría si un infierno así volviera a desatarse? ¿Podían confiar en que el cielo volveria a luchar por ellos? No podían esperar para saberlo. Entonces, esos pocos miles de sobrevivientes concordaron en hacer lo necesario para prepararse. Ellos estarían listos cuando llegara el momento, debían estarlo. Y así se forjó una alianza, la más fuerte jamás creada, que se encargaría de los espectros fujitivos y de entrenar a los guerreros más poderosos. Está alianza recibiría el nombre de "Shingetsu" el clan de la luna nueva, en honor a un nuevo comienzo. Levantando sus cimientos en donde sería invisible al resto del mundo y así permanecer en paz: El campo de batalla, que seria olvidado por el pasar del tiempo.

El clan prosperaría con el pasar de los siglos, bajo el mandato de una larga línea de grandes monarcas, fuertes y justos. Quienes heredarían el poder a sus hijos, a los hijos de sus hijos, repitiendo el ciclo una y otra vez. Entonces paso lo que nadie esperaba...

Un gran día se avecinaba para el clan. el entonces monarca, último en la línea esperaba un heredero. Llevándose una gran sorpresa al darse cuenta de haber recibido a la primera niña nacida en el linaje. Miyori Shingetsu, un rayo de luz para la vida de sus padres y para cualquiera que la conociera. Aunque esté hecho representaba algo delicado para el consejo; al hija única y gracias la ley. Está niña al crecer se convertiría en la primera matriarca que el clan conocería. Y eso los preocupaba ¿Ella daría la talla?

Con el pasar de los dias Miyori fue creciendo. Y soprendiendo una vez más a todo el mundo, la pequeña poseía una innata habilidad para el arte del combate y sin que le afectarán la críticas o los límites que constantemente todo el mundo le marcaba solo por su genero; entrenada por su padre, con solo quince años de edad se había convertido en la mejor de su categoría; a los dieciocho ya era la capitana de su propio escuadrón de cazadores.

Sin lugar a dudas, ella estaba preparada para su destino, después de todo era la única opción que conocía ¿Pero que pasaría si alguien le mostrara que existía algo más? Algo más allá de el deber y la responsabilidad. Alguien que le enseñaría por primera vez y la maravillaria con la idea de la verdadera libertad.

Libertad que le daría paso a la era más oscura, el comienzo de un fin. Una tradición que acabaría con la paz y la armonía como todos la conocían.