¿¡Hermanas!? ♦❇Yui Komori❇♦ Una Nueva Amenaza

Cap. #40

— ¿¡QUE!? — Gritaron todos al mismo tiempo. Los vampiros viendo a la castaña y viceversa. 

— Como lo acaban de escuchar. Sería muy arriesgado que alguna de ellas se quede sola. Cualquiera de nosotros en realidad — Explico Kottan tranquilamente — Así que deberan estar todos juntos. 

— ¡Yo no quiero vivir con estos mosquitos chupasangre! — Se quejo la chica apuntando con la mano a los Sakamaki.

— Ustedes viejos ¿Que les hace pensar que haremos lo que ustedes digan? — Ladró Ayato con su habitual altanería. 

— Me da muy igual lo que tu quieras — Respondió el peliblanco manteniéndose sereno — No es como si estuviesemos felices con esto, pero para desgracia de todos ustedes ya son blancos al igual que las chicas y nosotros y no me agrada la idea de tener a su papi encima nuestra si algo llega a pasarles — entonces junto sus manos y agudizó su voz  — Así que no les queda de otra que ser un bonita y muy extraña familia disfuncional ¿entendido?

— Si... — Respondieron las mellizas, yui de manera normal y Hikari con una arrastrada voz fastidio, asemejando un mujido.

— Ja, lo haces sonar como un padre decente — Se carcajeo Ayato amargamente y ninguno de los otros dijo nada. 

— Bien, entonces solo habrá un problema — Menciono la castaña cruzando los brazos — ¿Que pasara con mis chaperones?  

— Nosotros arreglaremos eso, tu solo debes preocuparte en hacer tus maletas — Le respondió Kannon. 

— o solo podemos quemar la casa en donde se esta quedando así como quemamos los institutos — Intervino Kottan retomando su divertida personalidad habitual. Todos los jóvenes los miraron con los ojos bien abiertos. 

— ¿Qué. Así que eso lo hicieron ustedes par de dementes? — Pregunto Hikari entre risas. 

— Eso no tiene importancia en este momento — Se interpuso Kannon tan serio como siempre — Ustedes ya deberían imaginar esto pero de todas formas se los voy a decir. Ahora que la mansión fue atacada no es un lugar seguro, por lo que no podrán quedarse allí mucho tiempo.

— ¿Entonces a donde iremos? — Pregunto Yui.

— Un conocido tiene una casa en la montaña, es un lugar bastante alejado de aquí, nos dará el tiempo suficiente para entrenar y prepararnos sin ser acechados por mas espectros.

— ¿Cuando iremos allí? — Cuestiono el segu do mayor ordenando las ideas en su cabeza.

— Lo más pronto que sea posible. Es hora se que regresen a casa — anuncio el peliblanco abriendo nuevamente un portal que iba de regreso al jardín de la mansión.

— ¿Vienes con nosotros? — Pregunto preocupada la rubia a su hermana. Entonces ella miró a los Sakamaki.

— Nah, dejare que se preparen psicologicamente primero — Bromeó guiñándole un ojo causando una leve risa de la contraria. Entonces le agarro la nariz con sus y la apretó un poco — Ahora vete y descansa. Nos vemos mañana.

Yui asintió y después de un abrazo se despidieron. El portal se cerró dejando a los siete chicos de vuelta en el jardín, desde donde se podía ver la mansión echa un desastre. Dando un suspiro de frustración Reiji se quitó los lentes y presionó el puente de su nariz. 

— Que inconveniente más molesto — se quejo con un gruñido.

— ¿Ahora qué? — Preguntó Subaru cruzado de brazos.