¿¡Hermanas!? ♦❇Yui Komori❇♦ Una Nueva Amenaza

Cap. #23

Se hicieron las 4:00 y Yui tuvo que regresar a la mansión a ver las clases normales con los trillizos, mientras Hikari tuvo que quedarse hasta bien llegada la noche, ambas morían del cansancio.

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Pasaron los días, las semanas que se convirtieron en un mes. Los entrenamientos subían su intensidad y sin casi descanso durante horas cada día, sus cuerpos al igual que sus habilidades comenzaban a moldearse y acostumbrarse a los duros ejercicios que realizaban sin importar el ardor y el dolor que sufrían después de cada clase, o el agotamiento físico y mental.

Hikari estaba practicando con Kannon como golpear ofensivamente.

siendo observados por cierta rubia, quien estaba tomando un descanso después de una clase algo... Improductiva.

— ¿hay algo que te moleste? — le dijo su maestro tomando agua den una botella, ella negó con la cabeza sonriendo flojamente. Estaba mintiendo si había algo que la molestaba; pues si bien es cierto que el entrenamiento estaba dando frutos también era cierto que una de ellas se destacaba más... Y no era ella precisamente. 

Describiría a Hikari como un a buena aprendiz, sabe captar muy rápidamente cada lección, cada movimiento y cada golpe y patada; esta llena de ferocidad e instinto, no se doblega rápidamente y aunque es algo irreverente y confiada, es una resplandeciente luchadora, sabiendo superar sus fallas y a si misma cada vez. Pero ella,  ella era otra historia, seguía cometiendo el mismo error una y otra vez, el miedo. Aunque sabe lo que tiene que hacer y como hacerlo para poder avanzar, el miedo la dejaba estancada, atando sus manos y sus pies, limitándose demasiado a sí misma ¿como podría proteger a su hermana de esa manera siendo tan débil e insegura? Eso la frustraba.

Con Hikari y Kannon. 

Estaban concentrados en su práctica, había solo un problema que siempre se hacía presente, la confianza entre profesor y alumna necesario para un mejor desempeño, no existía. 

— eso de las "lecciones especiales" fue ingenioso — dijo la chica con cierto recelo sonriendo algo altanera.

— Concéntrate en el entrenamiento y deja de decir estupideces — le replicó lanzando un gancho que la chica esquivó.

— ¿me podrías responder algo? — el hombre se detuvo un momento arqueando una ceja — yo pensé que usarían los celulares que nos dieron para comunicarse... ¿Por qué nós fueron a buscar tan de repente? 

Entonces Kannon recordó su primera visita a la mansión de los hermanos vampiros.

Flashback.

El jardín había muerto y expedia una aura de desolación y desesperación, es lo que él sintió al enterrar sus dedos en la tierra y las cenizas que habían quedado de las rosas. Sabia lo que significaba, eso era una amenaza directa de parte del "otro lado" sin lugar a dudas alguien había estado allí y no un espectro cualquiera, su poder era mucho, eso significaba al muy malo.

— no puede ser... ¿Estas seguro de lo que dices Kannon? — pregunto Kottan serio y preocupado. 

— claro que estoy seguro, ningún espectro es tan fuerte para dejar una presencia así....— apoyado en la chimenea.

— ¿entonces me estas diciendo... que demonio fue capaz de pasar hacia este plano? — le contesto el peliblanco aun más preocupado.

— no cualquier demonio — menciono mirando las llamas que consumían los maderos de la chimenea — ya he sentido esta presencia antes.

Ambos hombres se miraron guardando silencio, las cosas estaban empeorando el entrenamiento debía comenzar inmediatamente.

Fin del flashback. 

— Hola... Tierra llamando a cascarrabias — dijo la pelicastaña intentando llamar la atención de su maestro, entonces entro si — ¿me vas a responder si o no?

— ¿acaso importa? Era el momento así que fuimos a buscarlas, fin de la historia — respondió alejándose de ella — tomate un descanso.

Kannon se intentó alejar, pero ella lo siguió.

— entonces respóndeme otra cosa ¿por qué los espectros nós quieren matar?

— ya basta niña.

— tengo derecho a saberlo y no me creo eso de que es por nuestras "habilidades especiales" — Haciendo comillas con sus dedos. 

— no te diré nada, punto — culminó.

— a entonces si tienes algo que decir — Noto la mirada fulminante de Kannon entonces capto la indirecta de "largo" — ok,  ya me voy. 

Ya resignada a no conseguir repuestas por el momento la chica se dirigió a donde su hermana vuelto a entrenar con Kottan. Estaban teniendo algunos problemas.

— ¡Vamos Yui debes atacar con más fuerza! ni siquiera pude sentir el último golpe — se veía que lo intentaba pero algo en ella la hacia medir su fuerza; con una barrida el peliblanco hizo caer a la chica.

— Oye, ve más despacio Kottan — Se interpuso la castaña acercándose a ayudarla, esta situación ya la había vivido antes y la recordaba muy bien. La imagen de un joven chico interponiendose entre él y una chica durante un entrenamiento paso por su mente como una veloz ráfaga... Ya sabia que hacer.

Se acerco sin decir nada, viéndose las intenciones de ayudar a levantar a la rubia, pero por el contrario, lo que hizo es agarrar a Hikari por una llave en el cuello. 

— ¡ugh! ¿Que haces?  — intentando soltarse.

— ¿K-Kottan-san?  — Yui temerosa intentó acercarse pero él sólo se alejó y presionó un poco el cuello de la chica.

— Tómalo como un incentivo lindura, por cada minuto que pase, haré un poco más de presión en su cuello — ambas chicas lo miraban perplejas.  Por otro lado Kannon también lo miraba, resultandole interesante este medio que utilizaba su compañero.
— el objetivo de esta clase es literalmente salvar a tu querida hermana.