- ¡Vamos chicas desde arriba! -grite mientras iniciaba la música por quinta vez.
- ¡Ay! -se quejó Marisol.
Selena la había golpeado con su mano al girar.
-Paren, paren. -ordene.
Detuve la música y miré alrededor del salón sin detenerme en ninguna de las chicas específicamente. Algo estaba mal el día de hoy. Las dos horas que duraba la clase no habíamos llegado muy lejos. Teníamos que estar listas para un recital en algunos meses y se supone que el día de hoy íbamos a ver todo el baile. Pero no habíamos llegado ni a la mitad y sólo faltaba media hora para que la clase se acabará.
-Se acabó por el día de hoy. Vamos a sentarnos en un círculo en el suelo. -dije sentándome.
Todas las chicas se sentaron con rostros de asustadas. Ellas sabían que necesitábamos todo el tiempo posible ya que este era un gran evento, el más grande que hemos tenido en realidad. Algo les tiene que estar pasando para que no se pudieran concentrar y se pisarán entre ellas. Además de que no tenían equilibrio, parecían nuevas.
-Chicas tranquilas sólo quiero saber ¿qué pasa? - dije.
-Profesora es que estamos muy nerviosas. -dijo Kasandra.
-Primero que nada, no es su primer evento, segundo ustedes siempre se emocionan por un nuevo baile y por último lo importante es divertirse. -dije mirándolas.
-Es un evento muy importante. -murmuro Bels.
-Lo es, pero de que vale si no lo disfrutan. -comente.
-Ok. -acepto Sol.
-Vayan a los vestidores terminamos por hoy. -indique levantándome del suelo.
-Hasta la próxima clase profesora. Gracias necesitábamos escucharla. -dijo Kasandra.
Todas las chicas se levantaron y caminaron hasta los vestidores. Luego cada una salió cambiada y con sus bolsos. Espere afuera con las menores a que sus padres las vinieran a buscar para volver a entrar a el salón. Cerré la puerta que conectaba con la calle y encendí el radio para relajarme. La música era algo que me relajaba y el bailar mucho más. Esta profesión no era fácil ya que muchas personas no lo ven como una carrera. Sólo lo ven como un pasatiempo o una pérdida de tiempo.
Llegar hasta donde estoy ahora me había costado mucho. Empezando por mi papá, no estaba de acuerdo con que bailara. Me lo prohibió a pesar de que mi mamá hablo con él y le explico que era mucho más para mí. No le importó y perdí muchas oportunidades por él. Le demostré durante años de lo que era capaz pero nunca fue suficiente. Al día de hoy no lo entiende, tengo muchas pruebas que es una profesión como cualquier otra, pero es como si estuviera ciego.
Nunca voy a entender su odio hacia el baile. Mi mamá nunca bailo y el tampoco, nadie de la familia ha tenido deseos de hacerlo tampoco. Por lo tanto, no entiendo su rencor, antes cuando era más joven intentaba entender o por lo menos darle el sentimiento de la duda, pero hoy día no me era posible. Simplemente no lo puedo entender, lo sigo invitando a los recitales o eventos grandes, pero, aunque vaya y me observe nunca eh recibido una muestra de comprensión u orgullo, ni siquiera un aplauso.
No tengo ningún hermano así que no puedo excusarlo diciendo que es que no soy la hija preferida. Por qué soy hija única, lo único que me queda pensar es que simplemente no soy de su agrado. No puedo pensar en otra razón después de tantos años.
Me moví al ritmo de la música clásica del lago de los cisnes, el que íbamos a hacer en el recital. Era una pieza totalmente mágica, la historia, todo era perfecto. Tiempo después seque mi rostro con una toalla y arregle mi cabello volviendo amarrarlo en una cola. Salí del salón después de apagar el radio y apagar las luces. Camine por el pasillo hasta llegar a mi oficina donde tome mi bolso y con las llaves en mano, salí. Cerré todo a mi paso para luego abrir la puerta de entrada, me volteé y la cerré.
La calle estaba desierta y era una noche oscura. No había salido tan tarde del estudio, por lo que me apresure hasta el auto ya que no sabía cómo era el ambiente tan tarde en la noche. Era alrededor de media noche cuando llegue a mi apartamento. Entré a la ducha y cuando salí fui directo a la cama, podía sentir en todo mi cuerpo el dolor por las horas largas de baile.
Me levanté la mañana siguiente con muchas energías por lo que rápidamente me arregle, desayune y me dirigí hasta el estudio. Abrí la puerta y mi celular sonó por lo que entré mientras lo contestaba.
-Hola. -salude.
-Hola, cariño. ¿Cómo amaneciste hoy? -me pregunto.
-Muy bien. -conteste encendiendo las luces.
- ¿Estas libré en la noche? -cuestiono.
-No lo sé, ¿por? -dude.
-Quería saber que iba hacer. -dijo.
-Oh, pensé que querías que saliéramos. -comente.
-No, voy a estar toda la semana ocupado. -dijo rápidamente.
Está actuando totalmente raro de nuevo.
-No nos vemos hace tres semanas, Sam.-señale.
-Cariño lo sé, sabes que tengo mucho trabajo. -se excusó como siempre.
-Para ser mi novio, eres la persona que menos veo. Debo irme. -dije para luego colgar.
Sam era mi novio hace cinco meses. Nos habíamos conocido a través de unos amigos en común. Me invito a salir, luego de varias citas me pidió ser su novia y acepte. Pero desde que estamos juntos oficialmente nos hemos distanciado, lo cual es ilógico. Hace un mes lo notaba más raro de lo normal, siempre tenía excusas y podía sentir en su voz nerviosismo. El normalmente no era una persona nerviosa lo que me hacía dudar más. Esta situación se tiene que aclarar ya, no voy a estar un mes sin ver a mi novio. Aunque no lo amo, nos llevamos muy bien y me gusta que pasemos tiempo juntos. En la noche cuando la clase se acabe voy a ir a su casa si no a su oficina. No quiero llenarme la cabeza con cosas así que mejor voy y hablamos.
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Gusto Perfecto (AV #2)
Romance"Jamás pensé enamorarme de algo ademas de lo que salía de la cocina." Historia de Spike. Para leer esta no es necesario que hayas leído Todo Pasa Por Algo pero si se van a mencionar cosas de la misma. Libro #2 de la Saga Amor Verdadero *No tiene c...