Espere a que el círculo de personas que la estaba rodeando se redujera para acercarme más. Una vez me reconoció se acercó, le sonreí mientras miraba su rostro.
-Hola.-dijo.
-Hola, estuviste fantástica.-dije.
-Muchas gracias. ¿Algun amigo va a subir? -dijo señalando la tarima que ahora era ocupada por un chico con una marioneta.
-Oh no, la clientela bajo y todos los demás estaban aquí por lo que vine con mis chicos.-conte.
-¿Chicos? -dudo.
-Si, mis compañeros o empleados como les quieras decir.-aclare.
-Es lindo de tu parte que los consideres tus compañeros, ya que eres el dueño.-reconoció.
-Sin ellos posiblemente no hubiera logrado muchas cosas. Es bueno tener los pies sobre la tierra y saber que por ser el jefe no eres el que saca el negocio a flote, se necesita de personas que te apoyen.-dije.
-Totalmente cierto.-dijo sonriendo.
-¿Te gustaría comer algo? -cuestione después de un tiempo en silencio.
-No te preocupes, tienes que trabajar.-dijo.
-Si me das un segundo resuelvo todo. Espérame aquí.-dije a la vez que me alejaba sin darle oportunidad de oponerse.
No sé porque quería pasar el rato con ella, no quería que aún se fuera. La iba a llevar a mi restaurante y le prepararía algo mié tras hablábamos. Teníamos alrededor de tres horas para que todos se fueran a buscar algo de comer por lo que le iba a pedir a Fin que mantuviera al resto lejos hasta que le avisara. No quería a nadie escuchando o haciendo el momento incómodo. Cuando localicé al grupo lo llame aparté.
-Fin necesito que me hagas un favor.-dije.
-Mandé.-dijo cruzándose de brazos.
-Mantén a todos lejos del restaurante hasta que avise.-pedí.
-¿Acaso va a tener una cita? -cuestiono burlón.
-Solo hazlo.-dije mientras me alejaba para volver con Victoria.
-¡Jefe! -llamo haciendo que me girará. -Solo recuerde limpiar antes de volver a abrir.-dijo ganándose que lo fulminara con la mirada.
Entre Fin y yo había bastante confianza. Por eso siempre me hacía ese tipo de comentarios, además de que siempre está buscando que entre en una relación seria. Camino entre medio de las personas pidiendo permiso para pasar, una vez llegó a ella tomó su mano y empezamos a caminar hasta el restaurante. En mi campo de visión puedo ver a Fin recostado en un árbol mirándonos, me giro a verlo y me saluda para después guiñar un ojo mientras comienza a retirarse. Imbécil, ya puedo imaginarme todos los comentarios sarcásticos que voy a tener que escuchar cuando regresen.
-¿Para donde vamos? -pregunte Victoria mientras aprieta mi mano para llamar mi atención.
-Al restaurante.-digo mirándola por encima de mi hombro.
-¿Al tuyo? -cuestiona.
Solo asiento y sigo caminando aún con su mano en la mía. Cuando llegamos frente a la puerta, la suelto para poder abrir con la llave. Una vez la puerta abierta la dejo pasar primero. Puedo ver cómo con su mirada comienza a escanear todo. Cierro detrás de nosotros con llave nuevamente y entrelazó nuestros dedos hasta llevarla a la cocina. Todas las veces que eh tomado su mano han sido sin pensar en mis acciones hasta ahora, al sentir como sus dedos encajan con los míos y noto lo pequeña que es su mano. Además de su textura no es tan suave como parece el resto de su piel.
-Regreso.-dije antes de salir para buscarle una silla alta.
La coloco frente a el mesón para que nos podamos ver mientras cocino. Espero a que se siente y la acomodo, después le pasó un menú para que decida que quiere comer. Al ver su rostro de confusión decido aclararle.
-Escoge que te gustaría comer.-digo.
-¿Siempre haces esto? -dudo levantando la mirada del menú tan rápido como la bajo.
-¿A qué te refieres? -dudo mientras comienzo a sacar sartenes y copas para servirle vino.
-¿Siempre haces esto de traer tus citas aquí y cocinarles? -interroga.
Le voy a contestar, pero no puedo dejar pasar el detalle de que menciono la palabra cita. ¿Ella piensa que estamos en una cita? ¿Es una cita? Definitivamente no había pensando en cómo se vería todo esto, simplemente actúe. Actúe de manera inusual, pero eso fue lo que hice al fin y al cabo.
-No, no traigo a chicas aquí.-confesé luego de analizar la situación.
-¿Nunca? -duda.
-Nunca, es mi lugar de trabajo, es mi segunda casa. Es personal.-dije.
-Pero aquí estoy.-murmura.
-Aquí estás.-susurro.
Creo que los dos estamos buscando un significado a todo lo que está ocurriendo aquí. El problema es que no tengo idea de que esto, no se qué estoy haciendo o porque. Nos miramos por lo que parecen horas en silencio, es preciosa, es bella, es hermosa y todas las palabras que pueden existir para describir una mujer perfecta. Aclaro mi garganta para escapar de mis pensamientos.
-¿Tinto o blanco? -pregunto mientras levanto ambas botellas.
-Tinto, por favor.-dice volviendo a dirigirle la atención al menú.
Sirvo una porción en ambas copas y lo dejo reposando en hielo.
-¿Qué me recomiendas? -cuestiona sin mirarme.
-¿Te gusta el pescado? -pregunto.
-Si. Bastante.-responde.
-Tengo el plato perfecto.-digo a la vez que empiezo a sacar todo lo que voy a necesitar.
De vez en cuando detengo lo que estoy haciendo para tomar un poco de vino y para mirarla. Ok, mayormente para mirarla. Está observando cada uno de mis movimientos.
-¿Veinte preguntas? -pregunta.
-De acuerdo, comienzo. ¿Si tuvieras dos pies izquierdos que harías? -cuestione.
-Mm... posiblemente fuera doctora o algo que tuviera que ver con la salud.-dijo.
-¿Te gusta eso? -dude.
-Cuenta como otra pregunta, no la realidad es que no. Mis padres siempre quisieron que lo estudiará y sin nada por lo que luchar, lo hubiera hecho. Ahora mi turno, ¿Cómo fue crecer con unos padre como los tuyos? -dijo.
Detengo todo lo que soy haciendo y la miró. No es una pregunta normal, eso tiene un significado oculto y pero, sé que no es malo.
-Fue maravilloso, siempre me apoyaron. Es verdad que tuve mi momento rebelde y odiaba que me dieran tantas órdenes. Al igual que estuvieran tan pendientes de mi, pero ahora que soy adulto lo aprecio. No los cambiaria por nada del mundo. Tengo que admitir que fue un poco dificil por mi papá, el no era malo pero, es exitoso y mi mamá a pesar de que no trabaja ya todo lo que hace es perfecto. Por lo que en esa etapa de descubrimiento la pasé mal. Los amo mucho y no quiero imaginarme cómo sería si no fueran mis padres.-dije sincero.
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Gusto Perfecto (AV #2)
Romance"Jamás pensé enamorarme de algo ademas de lo que salía de la cocina." Historia de Spike. Para leer esta no es necesario que hayas leído Todo Pasa Por Algo pero si se van a mencionar cosas de la misma. Libro #2 de la Saga Amor Verdadero *No tiene c...