Gusto Perfecto (AV #2)

#10: Ahora si lo noto

    Después de que el evento terminara todos los empleados que había contratado para la limpieza estaban haciendo su trabajo mientras yo tenía una pequeña y rápida reunión con mis empleados.  Quería solamente agradecerles e informarles que iban a tener el día de mañana libre ya que no iba a abrir el restaurante.  Sin dar mucha explicación se los comunique y me fui a buscar a mi mamá que me estaba esperando ya que la iba a llevar a que se encontrará con papá para que juntos se fueran a su casa.  No estaba muy de acuerdo ya que era bastante tarde pero de alguien había sacado mi terquedad y para completar era de ambos.

-Ahora que estamos solos, ¿Qué te pareció?.- le digo mientras la rodeó con mi brazo izquierdo a la vez que salimos del restaurante. 

-Sabes cómo me siento al estar de nuevo en mi ambiente.  Además esas muchachas sabían cómo transmitir a través de la danza lo que siempre es bueno ver.  Me gusta mucho lo que estás haciendo aquí.  Esa joven era linda ¿cierto?.-comento.

-No me pude fijar con tanta pintura en la rostro pero si tú lo crees.-dije mientras le informaba a mi papá que ya estábamos esperándolo.

-Oh no seas sarcástico, tenía una linda sonrisa y no me digas que no notaste sus ojos.-dijo mientras se rodeaba mejor con su abrigo.

-Cierto, pero ya se por donde vas y detente.-dije haciendo lo mismo.

-Oh por Dios hijo, ¿no puede tu madre darle un cumplido a una muchacha bastante carismática que acaba de conocer?.-pregunto dirigiendo su mirada a mi.

-Exacto, la acabas de conocer no sabes básicamente nada de ella.-aclare.

-En ese caso es bueno que la vaya a ver de nuevo en dos días.-dijo indiferente.

-¿De nuevo? Mamá no quiero que tomes mucha confianza no la conoces y puede ser peligroso.-confesé mis dudas.

-¿Peligroso? Me puedo cuidar sola.-murmuro.

-¿De quién te tienes que cuidar?.-pregunto papá mientras se acercaba.

-De la profesora que conocí hoy de danza en el evento aqui de tu hijo y a la que invite a comer esta semana.-lo puso al día.

-Bueno, ¿Hijo se veía peligrosa?.-cuestiono después de saludar a mamá con un beso como siempre.

-Oh, no le preguntes eso.  Te va a decir que no lo pudo notar por la pintura en su rostro.-dijo tratando de no reír.

-¿Qué es esto? Solo di una recomendación déjenlo morir ya.-dije cruzando los brazos en mi pecho.

Bueno, ¿nos vamos?.-cuestiono papá.

-La oferta de que se queden conmigo sigue en pie.-dije mientras los acompaña hasta donde papá había estacionado el auto.

-Tenemos cosas que resolver temprano en la mañana cerca de casa sería ridículo.-contesto este después de quitar el seguro del auto.

-Llámenme cuando lleguen por favor.-pedi mientras abrazaba a mamá.

-Siempre.  Te amo hijo, acuerdate quiero nietos muchos, muchos.-dijo después de cerrar la puerta una vez dentro del auto.

-No sé cómo tu madre solo te tuvo a ti con tanto que ama a los niños.-comento papá mirándola.

-Al tenerme vio lo maravilloso que soy y supo que no podía tener uno mejor y ya.-dije haciendo que riera.

-Siempre tan humilde hijo, a mí no me molesta que digas todos esos comentarios al contrario cuando lleves a tu chica a la casa se los diré todos y me voy a divertir mucho.-dijo con una sonrisa burlona.

-Vete, vete.-dije después de abrazarlo mientras le daba pequeños empujones hasta el lado del conductor.

-Adiós hijo y para que conste yo también quiero nietos.-dijo cerrando la puerta y encendiendolo.

    Ví como el auto se alejaba y me quedaba solo de pie en la calle.  Rei mientras caminaba hasta el auto y lo encendí para yo también adentrarme a el resto de autos que transitaba las calles a pesar de lo tarde que se estaba haciendo.

    Un detalle bastante importante que mi madre aquella noche no me había dicho es que su invitación había sido para comer aquí en mi restaurante.  Me enteré porque había dado la instrucción desde el principio que cuando alguien de mi familia se presentará debían avisarme, lo cual habían echo.  Así que ahora mismo me estaba dirigiendo a la mesa con sus pedidos ya preparados.

-Buenas tardes madre, señorita Parks.-salude mientras depositaba los platos en la mesa.

-Hijo, muchas gracias.  ¿Cómo estás?.-pregunto.

-Cómo siempre, espero que la comida este de su agrado y cualquier cosa le dice a uno de mis muchachos.-dije par luego voltear.

-Gracias.-susurro Parks.

-A la orden.-dije para después alejarme.

    Lo bueno de ser jefe y dueño en esta situación es que puedo espiar.  Por eso mismo me encontras en una esquina mirando hacia la mesa donde estaban comiendo y charlando animadamente.  No era la primera vez que mamá tenía este tipo de almuerzos o reuniones es solo que Parks me daba una sensación bastante rara.  No sé exactamente que puede ser, solo se que me hace mantenerme alerta.  No pienso que es una mala persona, no la conozco para juzgar.  Solo me causa intriga.

    Decido alejarme de aquí y volver a trabajar.  Pero tengo ese pensamiento muy tarde porque cuando estoy a punto de irme ella mira hasta donde estoy.  Por su expresión sabe que estoy mirando hacia ellas y noto como se incómoda.  Para aligerar el ambiente decido sonreír y alejarme con una inclinación de cabeza.

    Después de ese momento repito en mi mente como un mantra "mantente alejado" hasta que veo que les llevan la cuenta.  Algo que no me gusta de cuando mamá o papá vienen es que insisten en pagar por lo que consumieron y por más que eh intentado no eh podido hacer que me hagan caso.  Salgo por la puerta de la cocina para despedirme de mamá y bueno de Parks.

-Espero que la velada haya sido de su agrado.-mencionó.

-Siempre, pero sé que esto no lo cocinaste tu así que me debes una comida hecha por ti ¿oíste?.-dice sonriéndome.

-Cuando quieras.-le digo.

-Victoria, también estás invitada.-dice mamá.

-No, estoy bien.  Estaba bueno, gracias.-dice casi susurrandolo.

-Puedes ir, no molesta.-tan pronto lo digo mi mamá me mira e intenta ocultar su sonrisa con su mano pero lo noto antes que no sea visible.

    Me volteó a mira a Victoria para saber si también lo noto pero puedo ver cómo me está mirando y ahora si puedo decir que lo noto.  Es bastante linda, está confirmado lo noto.  Noto como sus ojos verdes me están mirando intensamente, noto como su cabello negro como la noche rodea su rostro, un rostro bien arreglado donde se encuentran unos labios impresionantes.  Su piel morena parece que brilla en estos momentos.  Noto todo eso.

*Vicky en multimedia*