Después de la muerte del coronel Meléndez, la relación de Bárbara y Santos se empieza a complicar, como todos saben el quién terminó la relación entre ellos, pero en esta historia el quién termina la relación es Bárbara al descubrir a Santos con Mar...
Ese desgraciado le hizo algo, no se le puede llamar "hombre", a una persona que hace llorar a una mujer.
Si ese Santos tocó a Bárbara, juro que lo mato.
-Bárbara... no me digas que ese... - ella no me deja terminar de hablar y se adelanta.
-No, no. Él no intentó tocarme como tú crees. - y entonces ¿qué es?
-¿Entonces?
-Entonces... él, me dijo que me sigue amando, que no puede besar a otra que no sea yo y otras cosas... es que yo...
-¿Estas confundida?- completo lo quería decir.
Ella me ve con sus ojos cristalinos y asiente con la cabeza.
-Hey, no estés mal - la tranquilizo. -Esto a veces sucede, ¿quieres tiempo? - ella me ve como preocupada o algo parecido- No te preocupes por mi estaré bien. -Yo te espero, cuando aclares todo, entonces búscame y hablaremos de tu decisión, ¿de acuerdo?
Ella asiente con la cabeza y dice un "si" a penas entendible.
-Bien, no llores más mi ángel dulce ¿sí? Nos vemos luego - le deposito un suave beso en la mejilla y me retiro de su cuarto.
Salgo de la hacienda, tomo mi caballo, me monto en él y me voy camino a mi hacienda.
Estoy completamente seguro de lo que hice, Bárbara necesita tiempo para aclarar sus verdaderos sentimientos.
Y yo respetaré su decisión, si quiere volver con él lo entenderé. La apoyaré en lo que decida, es su vida y debo respetarla.
Así me ha enseñado mi padre en todos estos años, hasta su último día me ha ensañado cosas que se hace en la vida.
Mi padre era un gran hombre y yo agradezco a Dios por haberme dado un hombre maravilloso como padre.
Llego a mi hacienda, los peones como que están murmurando cosas.
Esp me llamó la atención, desmonto de mi caballo y me acerco a oír. No se dan cuenta de mi presencia. Están hablando de Bárbara, ¿Qué tienen que decir sobre ella?
-Les digo que estaban juntos, que el doctor Luzardo se la llevó a un callejón uno de los que no tienen salida - comenta uno de mis peones.
-Ja! Sabía que no era bueno que el patrón se enredara con la Doña, que le metería los cuernos - habló otro.
¿Qué estupideces están diciendo?
-¿Qué es lo que están diciendo ustedes? - les interrumpo su "charla".
-Patrón... solo estábamos hablando de lo que se dice en el pueblo
¿Ya todo el mundo sabe eso?
Claro! pueblo chico, infierno grande!
-Ustedes, ¿qué tanto le hacen caso lo que se dice en el pueblo? mejor vamos a marcar reces que quedaron pendiente... vamos! - elevo la voz en este último.
Pares de chismosos.
¿Qué no pueden estar sin tener que hablar mal de Bárbara?
Malnacidos...
Si no fuera porque necesito peones, los echaría a patadas de mi hacienda.
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