Y apareciste tu...

Alguién nos ha robado

Nos levantamos muy bien, ese día, nos sentíamos orgullosas, de haberles robado un par de latas de cerveza a los chicos, y sobretodo haber descubierto su escondite. Nos preparamos con total tranquilidad, los chicos como siempre llegaron tal puntuales como siempre, esta vez fue Taylor, quien les abrió la puerta, los dejó pasar, él último oque entró fue Daniel, sus miradas cuando se cruzaban saltaban un millón de chispas, pero aún no se atrevían a decirnos nada y eso me mataba, porque se notaba que entre ellos, tenían algo pero que muy especial, pero bueno, tenía que ser decisión suya, si querian contarlo. Como habíamos previsto los chicos, enseguida fueron a coger nuestros zumos, pero esta vez la nevera estaba completamente vacía, no había, ni una triste manzana, ni una botella de agua, dábamos algo de pena, por tener una nevera, así de solitaria.... .

- Chicas, enserio, das pena, con esta nevera asi... - Dijo Nicolas.

- Gracias, Nicolas...- respondió Taylor

- Chicos, ¿sabéis que ahora bajamos a desayuñar?- pregunté

- Sí, pero es que nos encantan los zumos que tenéis...- dijo Nick, recordando el sabor del zumo

-Sí ya lo sabemos, por eso los teneis en el super de abajo y así no  tendreis que saquearnos la nevera, cada vez que llegais.- Dijo April, algo molesta, porque a ella también le encantaban esos zumitos.

- Bueno, ya vale....- Dijo Mark, para calmar el ambiente

- ¿Bajamos?- Dijo Maxi, que apareció por la puerta entrando en ese momento

- Hombre, ya era hora!- Dijo Nicolas,mirandolo, con una cara muy traviesa.

Nos levantamos todos, y bajamos al comedor. Seguro que Masi, se quedó dormido, pensé, me lo imaginé durmiendo en su casa, con las sábanas blancas, teniendo su pecho al descubierto, y esa mínima brisita mañanera, que movia con suavidad su cabello, que era como si lo acariciara y él respondiendole con una tímida mueca.

- Bella!... Bella!... despierta ya!- Dijo Maxi

- Dios!, perdón... ¿que pasa?- pregunté

- Bella, te estábamos esperando para salir del ascensor...¿en que estabas pensando?- preguntó con interés, maxi.

- MmMM.... (otra vez, noo... porque no tengo esa facilidad para decir una buena excusa, en ese momento....)

En ese momento pasó el director y nos dijo que ya tenía nuestra notas listas para entregarnoslas, que pasaramos, cuando terminaran las clases, por su despacho y nos las daría y sobretodo para felicitarnos.

Bien! pensé! ahí está excusa que estaba buscando. El director se fué y nosotros seguimos nuestro destino. Pero alguien me cogió del brazo e hizo que parara. Me giré para saber que quería.  Sabía perfectamente que era Maxi, pero estaba justo detrás de mi.

- ¿que pasa?

- ¿en que estabas pensando?

- ¿Cuando?

- Antes y no me respondas con otra pregunta que no me gusta...

- ah!!, pues en las notas... ¿en que voy a pensar?- le dediqué una pequeña y tímida sonrisa.

Me volví a girar y vi que Taylor y Daniel íban unidos por sus manos.... quizás pensaron que si lo hacían evidente, no importaria contarlo..., los demás no lo había visto porque íban delante de ellos y solo lo vimos Maxi y yo. Maxi se acercó a mi poniendose a mi lado y dijo sin moverse, que si yo quería podríamos estar así ahora mismo, como ellos. En ese momento, me sentí bloqueada, no podía pensar ni caminar, me quedé parada ahí mirando ese pasillo que daba al comedor, cuando pude reaccionar me giré a Maxi, para contestarle, pero él empezó a andar y me dejó con la palabra en la boca.  Mierda!, era yo quien siempre tenía la última palabra y lo que me dijo no se lo iba a permitir, él era... él estaba... él... , oh! dios, no me salían las palabras que tantas otras veces había dicho de él..., ¿que me pasaba?