Capítulo 3

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Cuando llegamos por las chicas tuvimos que esperar y por supuesto nos encontramos a los gemelos, ellos dos eran uno tipos imponentes, muy altos, brazos musculosos, espalda ancha, se notaba que bajo su ropa cada uno de sus músculos estaba muy bien definido y tonificado, había visto su abdomen y era impresionante, no solo estaba definido de verdad estaba muy bien marcado, yo solo tenía mi abdomen plano como el de un niño sin nada de definición, pero el de ellos parecía el de un modelo, de hecho todo de ellos lo parecía, cabello castaño bien cortado y peinado, rostro cuadrado, barbilla fuerte, nariz respingada, cejas pobladas pero bien peinadas, lo que hacía que resaltaran más sus ojos azules, y por increíble que parezca ambos tenían las pestañas tan largas y rizadas casi como su hermana, esos chicos eran muy divertidos, y graciosos pero me daban algo de miedo, en una ocasión se habían enfrentado ellos dos contra cuatro chicos del equipo de lucha olímpica de otra escuela y los gemelos habían ganado, tenían mucha fuerza y lo demostraban cada que podían, aunque no sabía si demostrarían conmigo su rudeza o su buen humor ahora que salía con su hermana.

- Hola Dylan, ¿Qué hay Robbie? – saludo sonriendo Adders

– Si quieres puedes decirnos cuñados – añadió Andrew riendo muy fuerte

- Hey hola chicos, ¿Qué tal la vida? – pregunto Rob saludando de puño a cada uno de sus primos

- Hola chicos – salude un poco tímido, también chocando el puño con ambos

– De por si no sabíamos cómo deshacernos de los Bearsley y ahora resulta que sales con nuestra hermana – comento Andrew divertido, pero mirándome fijamente

- Así que lo saben – respondí tratando de no parecer intimidado por esos dos grandulones

- Toda la maldita escuela lo sabe Dylan, no seas tonto – añadió Adders en tono de burla y haciéndome una mueca

- Si, tienen razón – me disculpe

- Pero no por el hecho de que seas el mejor amigo de nuestro primo, y nos agrades significa que estarás a salvo – amenazo fuertemente Adders mirándome muy serio

- Si le rompes el corazón, la lastimas o acaso nos enteramos que eres un cabron con nuestra hermana, pagaras muy caro Bearsley – dijo Andrew muy serio en tono amenazador entrecerrando los ojos para mirarme fijamente a los ojos

- ¿Entendiste? – dijeron al unísono

- Ahh – no pude decir más

- ¿Qué si entendiste Bearsley? – repitió Adders mirándome como si fuera un bicho raro

- Entendí, capte el mensaje, eso no pasara chicos, lo prometo – me apresure a responder esta vez, mi cara debió lucir muy asustada porque Andrew le dijo a su gemelo

- Creo que si le llego el mensaje, mira su cara de terror – y comenzó a reírse

- Tienes razón, no sé si va a llorar o a orinarse encima – respondió Adders señalándome y también comenzó a reírse

- Oigan chicos, todos somos amigos y no tienen que amenazar a Dyl, yo respondo por él, ya déjenlo tranquilo – intervino Rob, muy tranquilamente

- De acuerdo, pero no prometemos nada si hace algo mal – respondió Andrew divertido

- Y como tú respondes por él, también te tocara si le hace algo a Ashley – añadió Adders

- Ok, ok, ya entendí, no hare nada malo, ahora por favor, somos amigos, dejen de torturarme psicológicamente – me defendí rápidamente, antes de terminar de perder mi hombría ante ellos

Oscura ObsesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora